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Kara

- Y luego... - recordaba - Bueno luego pasaron otras cosas y... - no quería decirlo para no arruinar el agradable ambiente que se había formado gracias al último comentario pero necesitaba sacarlo - ¿Recuerdas el anillo de mi abuela Alura? Del que te hablé...

- Sí, ¿que pasó con el anillo? - preguntó algo tensa por mi tono de voz.

- Lo había perdido durante el enfrentamiento con James.

- ¿QUÉ? - se sorprendió tal y como yo había hecho en el momento que Lena me lo entregó.

Nia sabía todo lo sucedido con mi abuela, sabía el dolor que me había traído, sabía cuan importante era para mí ese anillo, lo sabía todo. Sin embargo, no siempre tocaba ese tema porque sabíamos lo inevitable que era ponernos sentimentales.

- Si, lo se, si no hubiera sido por Lena, probablemente no me habría dado cuenta que no lo llevaba puesto - admití algo avergonzada.

- ¿Por Lena?

- Sí, no se cómo llegó el anillo hasta sus manos pero cuando salí del aula para el baño, en clase de matemáticas, me la encontré. Espera... - al revivir esos momentos, recordé el poema que había escrito antes de darme cuenta que no estaba sola.

- ¿Qué pasó?

- El poema...

- ¿Poema? - preguntó confundida.

- Sí, eee, yo... Yo había escrito un poema en donde expresaba mis sentimientos, fue algo momentáneo, intentaba sacar las emociones que me estaban atormentando pero bueno, aún así, fue... si lo hubieses leído... Fue realmente... puro. No lo sé, me gustó... pero ya no importa, seguro se me cayó por la calle o no se.

- No dudo que haya sido IN - CRE - Í - BLE, porque TODOS tus poemas son ARTE. Pero, ¿sabes qué? Mañana vamos a buscarlo, esto no puede quedar así, ¿Sabes cuánto dinero has dejado ahí? - reímos - De verdad amiga, vas a ser grande.

- Ay Nia - estaba sonrojada, siempre me levantaba el ánimo de una manera tan linda que no podía evitar ruborizarme - no es para tanto, igual no tenía mi nombre, afortunadamente.

- No Kara, si vamos a ir, y si no lo quieres tú, me los das - rió - yo te los guardaré y luego me lo agradecerás - decía orgullosa - Deberías firmarlos con tu nombre by the way.

Ambas reímos mientras negaba con la cabeza.

- Bueno, ¿y luego? - preguntó.

- Cuando estaba apunto de irme, me detuvo. La verdad no me quería quedar ahí porque antes me había dejado sola, y no me gustó que, luego de que enfrentara a James, se fuera sin más - mi amiga hizo un gesto como diciendo "entendible, sigue" - Me entregó el anillo y, luego de preguntar cómo lo tuvo y no obtener respuesta, me iba a marchar pero regresé y le solté la pregunta de por qué me había dejado sola y bueno, de nuevo silencio. Así que solo me fui, por eso estaba un poco rara en el salón, ya sabes...

- Si... Oye, pero se me hace muy raro que no diga ninguna palabra - insistió con el tema de Lena.

- A mí también, por un momento quiere hablar y luego no hay nada, es muy extraño. Ella es muy extraña.

- Si... Oye, ¿y si es por eso que nunca la habíamos visto?

- ¿Que no la habíamos visto porque nunca habla?

- Ajá.

- Mmm, puede ser... - consideraba.

- Se fue porque no quería que... ¿la vieran? Estaban tomando fotos, puede ser eso, ¿no crees?

¿Por qué?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora