Kara, una chica tímida e inteligente, a quien le gusta la poesía y las letras, es una estudiante de Midvale High School. Sueña con ser escritora, sin embargo, una serie de acontecimientos durante este último año de secundaria la marcarán como nunca...
A la mañana siguiente, cierto ruido hizo que dejara de tener sueño de un momento a otro.
- BUENOS DÍAS - gritaba Sam.
Desperté espantada y, al abrir los ojos y encontrarme a Sam frente a mi lado de la cama, llevé mis manos a la cara. No podía creer que siempre hiciera eso, comenzaba a ser molestoso.
- ¡Ay vamos primita! Por los viejos tiempos - decía.
Los viejos tiempos, claro.
- De pie - me jalaba de ambos brazos y solo pude dejarla llevarme rendida.
Cuando me separé de mi cama, sentí cómo un gélido clima me envolvía.
- Sí, hace mucho frío, ¿cierto? - notó por mi expresión.
Asentí y dirigí mi mirada alrededor, buscando mi celular, necesitaba ver la hora.
- Son las 7:30 de la mañana - ¿A caso iba a hacer de adivina todo el día? - Vamos abajo a desayunar.
Ambas salimos de aquella habitación.
- Buenos días, chicas. ¿Qué tal durmieron? - preguntaba mi tía Eve.
- Muy bien, gracias - contestaba Sam.
- Que bueno, entonces a desayunar para que se alisten y vayan a su escuela.
Las tres nos sentamos y el desayuno transcurrió de lo más tranquilo, entre mordiscos a los panes que parecían recién horneados y una amena charla entre Sam y la tía Eve. Yo no tenía mucho apetito, me tenía algo ansiosa lo que pudiera pasar hoy con Kara y los populares descerebrados. Con suerte y pude tomar un par de sorbos del café frente a mí.
Cuando finalizó su conversación, nos pusimos en pie y, junto a mi prima, subimos a mi habitación. Ella iría por sus cosas y luego a su casa para vestirse. John y yo, pasaríamos a recogerla y llegaríamos juntas al colegio. Obviamente me dejarían o antes o después porque no nos podían ver bajar del mismo carro.
Cuando por fin estuvimos arriba, habló.
- Bueno primita, hoy pasé muy bien la noche, espero que podamos hacer esto más seguido - sonrió - Y por lo del poema... - mierda - no te preocupes, que de mi boca no saldrá nada. Y por si acaso, no tiene nada de malo si estás con alguien - me guiñó un ojo y salió de ahí con sus cosas en mano.
¿QUÉ ACABA DE DECIR? ¡Que no estoy con nadie!
Estaba sola en mi habitación y solo pude quedar sentada frente a los cuadros que allí tenía colgados. Mi vida era un desastre.
Luego de un momento en silencio, tratando de pensar, me dispuse a vestirme para salir a Midvale High School. Llevaba algo ligero a pesar del clima aunque no me preocupaba mucho eso ahora...
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