Capítulo VI

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Lauren sabía que no debía estar escuchando, ni estar viendo lo que estaba pasando en el campamento de esas tres mujeres pero necesitaba esa información para poder compenetrar más con ellas, Normani también se podía notar incomoda al presenciar aquella escena, estaban haciendo lo que les habían enseñado que estaba mal en la sociedad civil sin embargo ambas alfas tenían un propósito y no podía dejar pasar el conocer más de cerca a aquellas mujeres, ambas podían ver el sincero dolor que sentía la chica, desde donde estaban ambas mujeres podían ver con claridad al grupo, lograban ver lo unidas que estaban, el apoyo que se brindaban unas a otra, el amor que se tenían, a la oji-verde lo asimilaba con el sentimiento de hermandad que sentía con Normani, ese sentimiento de ser familia sin que sea necesario compartir lazos filiales, es lindo lo que estaba presenciando pero Lauren sabía que era hora de interrumpir ese momento, no podía seguir presenciando aquella escena sin sentirse culpable; para suerte de ambas al parecer el grupo estaba terminando.

—Es hora Normani, debemos entrar—  dijo Lauren mientras dirigía su mirada hacia su hermana.

— ¿Estas segura? Parecen que no han terminado— Le responde la menor con inseguridad, la verdad es que la morena no quería interrumpir el momento, le parecía que estaban compartiendo algo importante.

—No podemos seguir presenciando esto, es una falta de respeto a su intimidad— contesto con seguridad la peli-negra queriendo dar por terminado la observación.

Ambas alfas se fueron acercando de manera lenta al campamento de aquellas mujeres, tratando de hacer ruido de por medio para avisar de su presencia, ya que como es de costumbre sus pasos eran imperceptible al oído común debido a su entrenamiento militar, siguieron caminando mientras trataban de entrar en papel que habían creado. Ambas mujeres ya tenían conocimiento parcial de las campantes, solo tenían que sonar convincentes al momento de pedir el preciado favor, también debían estar preparadas por si algunas de esas chicas lanzaba alguna pregunta personal, ambas mujeres no sabían que esperar de esa noche pero tenían un poco de esperanza de que todo saliera bien.

Cuando Lauren y Normani estaban ya a unos cuanto pasos del campamento pudieron notar que las tres mujeres voltearon hacia donde estaban ubicadas, ambas chicas pensaban que ya las habían visto pero de inmediato se fijaron que no estaban en lo correcto al verles la cara de terror que cargaban, ambas mujeres sabían que ya había oscurecido pero se les olvidaba que su visión nocturna era diez veces mejor que de aquellas mujeres y por ende no podían ver del todo su presencia, decidieron acercarse un poco más antes de hablar, ambas alfas no querían asustar más a las demás chicas, suficiente habían tenido con lo de esa tarde.

—Hey tranquilas, solo somos nosotras— dijo Lauren tratando de calmar un poco los nervios de las campantes, desde su posición podía ver lo agitadas que estaban.

— ¿Pensaban que era otro lobo? — Pregunto Normani al ver la cara de pánico que cargaban las tres mujeres que seguían abrazadas.

—No esperábamos que se desplazaran por el boque sin necesidad de una linterna— contesto Dinah mientras se levantaba de suelo y trataba de observarlas sin éxito alguno— ¿Tienen ojos de gato o qué? Casi no puedo diferenciar sus siluetas pero al parecer ustedes caminan como si nada.

—Tengo buena visión, además de buena memoria para saber el camino hasta aquí — se excusó Lauren mientras ubicaba la fogata del campamento e iniciarla para dar luz al ambiente.

—Yo solo la seguí, a diferencia de Lauren no poseo ambas cosas así que solo la seguí— dijo Normani mintiendo mientras ayudaba a la oji-verde a iniciar la fogata, escuchando de fondo como alguna de ellas reían ante el comentario.

Cuando encendieron la fogata ambas chicas pudieron notar como las demás estaban observándolas desde esa posición, para su suerte al parecer no estaban enojadas, podían notar que estaban tranquilas, lo cual era una buena señal para ellas. Lauren suponía que aquel momento emotivo que tuvieron fue lo suficientemente bueno para hacerle bajar la guardia, eso le aliviaba un poco los nervios, al menos tenia por seguro que tendría una buena probabilidad de éxito.

El Experimento Fallido  [CAMREN ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora