| Debo ayudarte.| Saiki X Kaidō

26

9:52 AM

Ya había pasado unos días desde aquel momento con el y sinceramente, no se me olvidaba.

Ya se acercaban los exámenes finales por lo que no nos podemos ver mucho, yo no tengo que matarme estudiando, para nada. Pero se que el si.

Saiki
Oye.

Kaido..♡
MW ESTÁS
HABLANDO?

Saiki
Empiezo a
Considerar dejar de hacerlo.

Kaido..♡
perdón, dime
Es que estoy ocupado
:c

Saiki
Estudiando?

Kaido..♡
Aja _._

Saiki
Ugh. Voy a ayudarte.

Kaido..♡
<33333

Malditos corazones, por que? Apague el teléfono y restregué mis ojos, no podía enfermarme ahora.
Era sábado, los exámenes empezaban la otra semana y por inercia, sabía que shun no había estudiado mucho.

— Ku! Donde vas? —

Donde Kaido.

— que bien! Pero desayuna primero.. —

Cierto. Corrí a la cocina y me hice un emparedado rápido, mi mamá estaba impresionada y yo dándole cada vez más vergüenza ajena.

10:38

La puerta se abrió y era la mamá de el, ya sabía a lo que venía por lo que me saludo y me dejó pasar, indicándome que shun estaba en su habitación.

Me apoye en la puerta viendo cómo trataba de sacar el resultado de una ecuación, se veía demasiado concentrado. Pero quien le diría que primero se tienen que sacar las multiplicaciones o divisiones primero.

— carajo! Ya no quiero. —

De verdad? Esta fácil.

— desde cuando estás allí ?! —

Hace bastante.

Camine hacia su lado, sentándome y dejando mi mochila aún lado. Su cuaderno estaba lleno de ecuaciones mal hechas y multiplicaciones también, aún me preguntaba cómo le iba tan bien.

— soy un estupido. —

Eres uno de los más inteligentes, solo estás nervioso.

— de verdad? —

No.

Escribí una ecuación rápida pero algo larga, se la dejé al frente y me posicione detrás de él, abrazándolo por la espalda. Tal vez eso lo calmaría no?

Vamos..empieza.

Soltó un suspiro y empezó, pudo notar que se había equivocado en muchas cosas que ahora las hizo a la perfección.

Sentir el abrazo de aquel pelirosa era lo unico que le faltaba, al terminar dejó el lápiz y volteo su rostro, quedando frente a frente con el.
No dudó en dejar un pequeño beso en sus labios, agradecía que estuviese allí en esos momentos.