𝗢𝘆𝗲 𝗻𝗲𝗿𝗱, 𝗺𝗲 𝗴𝘂𝘀𝘁𝗮𝘀.

둘.

BeomGyu estaba en la cancha de fútbol mientras estaba sentado ensayando un papel para una obra de teatro donde TaeHyun sería protagonista.

¿Cómo es eso posible? fácil, la maestra de teatro adoraba a TaeHyun, lo trataba como un hijo desde que se enteró que le hacían burla por ser inteligente y ser "diferente" a los demás. BeomGyu amaba a esa maestra. Solo porque trataba bien a TaeHyun, no como otros.

Debería estar entrenando para sus próximos campeonatos, pero no podía, en serio quería el papel de la obra para poder estar de algún modo cerca a TaeHyun.

Estaba desesperado.

—Oye, BeomGyu.

La voz de su prima, Momo, lo hizo quitar la vista del papel que tenía en manos:—¿Qué?

—Uy, que complicado. —Dijo mirándolo—. ¿Qué haces? ¿Por qué no entrenas?

—¿No ves qué estoy ocupado?

—¿Estás estudiando? —Dijo con cierta emoción—. Oh por Dios, por fin estás tomando conciencia de que debes ser un buen estudiante.

—No, no es eso. —Dijo dejando de mirarla—. Estoy practicando un libreto.

—¿Libreto? ¿Desde cuándo te gusta el teatro?

—Desde ahora. —Dijo levantó su vista—. Ahora vete y no molestes. Me distraes.

—Bueno, de acuerdo. Quería ver sí querías ir con SooBin y TaeHyun para ir a tomar algo, pero, ya que insistes, te dejare. —Dijo dándose la vuelta para empezar a caminar—.

—¡Espera! ¿Dijiste TaeHyun? —Dijo levantándose del césped para mirarla—.

Momo sonrió satisfecha y volteo, quitando su sonrisa:—Sí. El primo de Soo, ¿por qué?

—Porque ahora que lo mencionas... Tengo algo que hablar con él, así que, ¿qué esperamos? andando.

Dijo tomando sus cosas para empezar a dar saltitos como un niño felíz.

—Es un tonto. —Dijo Momo apenas vio que BeomGyu estaba lejos—. Un tonto por TaeHyun.

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—Hola chicos, ya llegué. —Anunció Momo, haciendo que los dos chicos se volteen—.

Y ahí lo vió, tan lindo y indefenso. TaeHyun parecía un muñeco de porcelana al cual debía cuidar a toda costa. BeomGyu se murió de ternura cuando TaeHyun sonrió mostrando su hoyuelo y sus colmillitos.

—¡BeomGyu!

El grito de Momo lo hizo reaccionar.

-—¿Ah? ¿Qué sucede?

—Que te sientes, infeliz. —Dijo la chica en tono brusco. BeomGyu gruñó y vió como ella se sentaba junto a SooBin—.

El lugar al lado de TaeHyun estaba disponible. Era su oportunidad.

—Vamos BeomGyu. —Se dijo para si mismo y se sentó al lado de él con una sonrisa que TaeHyun también le devolvió—.

BeomGyu se sentía nervioso cerca del menor y lo miraba de vez en cuando para verlo más de cerca. No sabía que tenía un perfil tan hermoso, esos lentes cuadrados lo hacían ver tan lindo y tan curioso. Ver como se los acomodaba y comía de las papitas que estaban frente a nosotros.

Ni siquiera había notado ese detalle por verlo. Era una obra de arde andante, su cabello ondulado y sedoso, quería acariciarlo, pero no debía ni podía.