𝗢𝘆𝗲 𝗻𝗲𝗿𝗱, 𝗺𝗲 𝗴𝘂𝘀𝘁𝗮𝘀.

다섯.

BeomGyu se tapó los oídos de nuevo con su almohada. Sus padres estaban discutiendo de nuevo y no lo soportaba, quería concentrarse y poder escribir aunque sea algo de lo que estaba por dedicarle a TaeHyun, pero no era suficiente, y para colmo, los gritos de sus padres no ayudaban mucho.

Tiro con fuerza su bolígrafo y se paró para tomar su teléfono y su chaqueta. Salió del cuarto y bajó las escaleras, encontrándose con sus padres, claramente alzando la voz y a punto de casi matarse.

BeomGyu pasó por un lado de ellos y quiso abrir la puerta, pero la voz de su padre lo detuvo.

—Choi BeomGyu, ¿a dónde creés qué vas?

BeomGyu miró el picaporte antes de soltarlo y mirar hacía su padre que tenía una cara llena de furia.

—Sigan en lo suyo, yo me iré. —Dijo intentando abrir la puerta, pero su parte lo jaló del brazo bruscamente—.

—¡A mí no me vas a estar contestando de esa forma, pequeño baboso! —Le dijo— ¿A dónde piensas ir? ¿Eh? ¡Responde, baboso!

—¡Deja de llamarme así, mierda! —Dijo alzando la voz. Lo que sorprendió a su padre y su madre—.

Lo miró con furia, pero antes de que pudiera seguir, así, su padre le dió una bofetada que resonó todo el lugar. Lo había lastimado.

—¡Oye, ¿por qué pegas al niño?! —Dijo su madre, tratando de acercarse a su hijo que tenía la vista en otro lado por el golpe—.

—¡Tú no te acerquen mujer, esto es algo de hombre a hombre!

BeomGyu tomó su mejilla en manos y miró a su padre con disgusto.

—Eres lo peor, Choi.

Dijo BeomGyu antes de tomar rápidamente el picaporte y salir de su casa lo más rápido posible escuchando los gritos de sus padres.

Él no debía estar ahí, no se sentía seguro.

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BeomGyu caminaba por las calles desoladas de Corea. Iba pensando en la nada, hasta que tomó su celular y lo desbloqueo para tocar un contacto y llamar.

—¿Aló, BeomGyu Hyung?

La voz de TaeHyun resonó en su oídos, haciéndolo sonreír.

—Hola, TaeHyun-Ah... ¿Cómo estás?

—¿BeomGyu Hyung? ¿Se encuentra bien? Suena como sí... Estuviera llorando... ¿Pasó algo?

BeomGyu soltó algunas lágrimas de sus ojos y se las quitó con su mano para resonar su nariz y hablar.

—¿Puedes venir al parque? por favor...

—En seguida voy.

TaeHyun colgó la llamada. BeomGyu no quitó su teléfono de su oído hasta minutos después que lo bajó con pesadez, mirando haciendo un punto fijo del camino del parque.

BeomGyu se sentó en una banca que estaba cerca de él. Se colocó su capucha y sus manos en sus bolsillos de la chaqueta. Sí alguien lo conociera, diría que está pasando por un momento nada fácil. Era cierto, no era un momento fácil, eso sólo SooBin lo sabía. Con él tenía la confianza suficiente, ahora es con TaeHyun con quien se va a abrir.

—¡BeomGyu Hyung!

Escucho su nombre salir de los hermosos labios se TaeHyun. Volteó la vista y ahí lo vió, corriendo hacía él.

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—Hyung... ¿Qué tiene?

Preguntó TaeHyun ya cuando estaba acomodado al lado del mayor. Este no lo miraba, pero sabía que lo podía escuchar.

—Mis padres pelean casi todo el tiempo. —Dijo—.

TaeHyun se quedó estático en su lugar. Sabía que BeomGyu era muy directo, pero no era para que lo suelte así nomás. ¿Tanta confianza se tiene Choi con él?

—Lamento eso, BeomGyu Hyung... ¿Está bien?

BeomGyu dejó escapar una risita irónica:—¿Creés qué es fácil escuchar cómo tus padres pelean a diario y qué tu propio padre te odie?

TaeHyun se quedó perplejo ante las palabras del mayor. Sonaba serio, enojado, frustrado y triste. TaeHyun se acercó un poco más al mayor para buscar su mano entre su bolsillo y sacarla para tomarla y acariciarla.

BeomGyu miró al menor que también lo miró y sonrió, pero dejo de hacerlo cuando vió la mejilla del mayor.

—¿Él te golpeó?

—No es la primera vez que lo hace. No duele.

—Beom... No tienes que minimizarlo, ésto está mal, muy mal...

Dijo tomando la mejilla del mayor con su mano, pasándola delicadamente por la zona.

—Pobre Beommie... —Dijo TaeHyun—. ¿Le duele? —BeomGyu nego, viendo los ojos de TaeHyun llenos de preocupación—. ¿Cómo esto no le duele? literalmente siento el dolor que usted siente. No me diga que no lo siente, dígame la verdad, no tienes porque hacerte el fuerte conmigo.

BeomGyu sonrió levemente por la insistencia del menor:—Me duele, pero me duele más el no poder decirte la verdad completa.

TaeHyun lo miro directo a los ojos y bajo la mirada:—Cuando este listo, me lo dice, ahora... Usted necesita que ese moretón sane.

—Mi mamá y mi papá están casados por obligación por mi culpa. —Soltó BeomGyu y rió—. Tengo suerte de que mi mamá me haya querido tener, mi papá quería que mi mamá aborte... Pero no tuvieron opción, y... bueno, así nací yo... Choi BeomGyu, el chico de la mala reputación que todos aman, menos tú...

TaeHyun no dijo nada, solamente se quedó con la mirada baja y luego volvió a mirar a su hyung.

—Soy un error, ¿no es así?

—¡Choi BeomGyu, no digas esas cosas de tí! —Exclamó TaeHyun, haciendo que BeomGyu pegue un brinco en su lugar—. U-Usted no es nada de eso, ¿me oyó? no lo es. Al menos para mí no, eres... eres lo más lindo que tengo cercano a alguien que me quiere de verdad... No digas eso, por favor, gyu... Me lastima oírte decir eso...

BeomGyu se levantó de la banca para mirar a TaeHyun y tomar su mano. Lo levanto y tomó su cintura para acercarlo a él y abrazarlo. Hay algo en lo que BeomGyu se siente seguro, con TaeHyun.

TaeHyun con el simple hecho de existir hace que su vida sea menos miserable. Lo abrazo con más fuerza y oculto su rostro en el cuello del menor.

—B-BeomGyu...

—Me gusta estar contigo. Gracias Hyunnie, por ser mi lugar seguro.

TaeHyun oyó las palabras de su hyung y sintió algo en su corazón y mejillas. Su corazón latía muy rápido y sus mejillas estaban que ardían.

¿Era esto lo qué se siente el amor?

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