Los Recesos de las Nubes se habían vuelto un poco más alegres desde la llegada de los nuevos estudiantes que eran más bulliciosos que en años pasados, los pasillos silenciosamente calmos poseían una vibra gentilmente radiante que ocasionaban sutiles sonrisas en los virtuosos discípulos de Lan, aunque esto provocara ceños fruncidos y descontento de los mayores; la queja se debía fundamentalmente al discípulo principal de la secta Yunmeng Jiang: Wei Wuxian, una persona de sentimientos honestos lo cual le agradaba al heredero de Gusu Lan.
Lan Xichen siguió su camino adentrándose de poco al basto bosque trasero de su hogar, las aves silvestres guiaban sus pasos hasta el lugar destinado, un pequeño claro oculto por la maleza el cual a primera vista no era la gran cosa, pero una vez ya estando ahí la vista de las montañas era espectacular y no solo por el paisaje sino por la pequeña figura sentada pacíficamente.
—Creí que te encontraría pintando.
Xichen se deleitó con la vista de Huaisang encogiéndose por el susto, mientras un abanico se desplegaba para ocultar el obvio rubor que le llegaba a las orejas al segundo maestro de Qinghe Nie, esta acción robó una amplia sonrisa en el Lan que con cuidado se acercó para sentarse al lado de la otra persona.
—Xichen-ge, no seas malo con este servidor que ha estado esperando paciente por ti.
El semblante cariñoso del cultivador de blanco no fue percibido por el menor que aún se ocultaba tras el hermoso ventilador hasta que su menuda mano, con la que sostenía su fiel accesorio, fue sostenida por unas manos más grandes e increíblemente fuertes dejando caer hasta su regazo su abanico, pero mayor fue su sorpresa al observar como el primer Jade Gemelo llevaba su extremidad hasta su cara de alabastro y posar un sencillo ósculo con labios de melocotón, lo cual coloreo un carmín vergonzoso en el rostro de Huaisang.
—Lamento hacerte esperar, estuve discutiendo con el tío sobre algunas clases de los discípulos invitados.
El mayor que veía las manos unidas con amor impasible subió su vista hasta el redondo rostro que se enmarcaba con un puchero adorable.
—Mi gege es un desvergonzado ¿Cómo es que nadie conoce esta faceta de Lan gonzi?
—Solamente soy un desvergonzado con mi alma gemela, que casualmente es Nie er-gonzi.
Ambos se miraron a los ojos por eternos segundos para después romper en sonrisas brillantes antes de rozar sus mejillas en una seña cariñosa que habían adoptado con el tiempo. Nie Huaisang se recargó en el costado de Lan Xichen, permitiendo que este le abrazara parcialmente acercándoles.
—Te extrañé A-Huan.
—Yo igual mi A-Sang, yo igual.
El paisaje a lo lejos llamó su atención cuando un polluelo pío pidiendo comida, Huaisang suspiró con un dejo de tristeza.
—Será triste cuando tenga que separarme de mis aves una vez que me convierta en tu esposo.
—Oh, mi A-Sang. No puedo pedirte que no pienses mucho en ello, aún nos falta tiempo, ya que apenas nos acabamos de comprometer, sin embargo, si sientes que tu tristeza será profunda seré capaz de colgar comederos con semillas de la mejor calidad en cada árbol dentro de los Recesos, solamente para ver una sonrisa en tu bello rostro.
Una risita enamorada brotó en los labios de seda del Nie antes de decir con descaro: —Mi ge me consiente demasiado, espero no se queje mucho cuando me vuelva codiciosamente mimado.
—Y a mí no me importaría si con ello puedo alcanzar tu felicidad mi amado A-Sang—. Diciendo esto deshizo el apretado abrazo para buscar algo dentro de las largas mangas de su inmaculado hanfu sacando de ahí una hermosa caja. —Es más, me gustaría empezar desde este momento.
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Caos
Fanfiction«El aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo». Lan Xichen debe aprender que las decisiones tomadas afectan más de lo que se cree. Esta historia participa en el evento #angstruary de la página de Facebook @Esdefanfic...