"Un dobe siempre sera un dobe..."

"Por un pequeño accidente..." [REESCRITA]

Capitulo 1: "Un pequeño Accidente"

Un Dobe es un Dobe y siempre será un Dobe, pero eso no significa que no pueda ser... ¿Cuál era la palabra? Soportable. Si, soportable.

Aquella teoría resonaba repetidamente en la mente de Sasuke, quien trataba de encontrar aunque sea una pisca de razón en ella para evitar asesinar al rubio en ese mismo instante.

Oh si...casi jadeó de dicha ante la hipotética imagen que su mente creó, en donde él mismo activaba su fuego eterno para después contemplar los restos del Uzumaki vueltos polvo y siendo arrastrados por el viento. Eso era arte puro, simplemente hermoso.

Mientras que el Uchiha se perdía en sus perversas fantasías (o premoniciones), Naruto, el ninja más persistente de la aldea, suplicaba arrodillado que le dejara explicar aquel panorama que segundos antes Sasuke había tenido que presenciar.

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Sasuke Uchiha salía de la torre del Hokage con la mirada cansina. Hace unos momentos había entregado el reporte de la misión, lo que significaba que ya estaba libre en lo que quedaba de la semana. Habían sido exactamente dieciséis días llenos de sangre y cansancio, donde tuvo que matar a un sinfín de enemigos y abandonar a la mitad de sus compañeros.

Al contrario de lo que se pueda pensar, no había sido un encargo difícil, sino simple, pero gracias a la estupidez de uno de los nuevos ANBU tuvieron que enfrentarse con los Shinobi de la aldea del rayo, quienes no tuvieron ninguna compasión con ellos.

Sasuke acabó rápidamente con todos, alicatado de su tan característica destreza y agilidad; degolló cabezas como solo él sabía hacer. Sus compañeros, por otra parte, fueron otra historia. Como había dicho antes, solo volvió la mitad del escuadrón.

A Sasuke no le podía importar menos. Pero sus días de descanso se vieron reducidos a, irónicamente, la mitad.

"Malditos incompetentes"

El Uchiha estaba fatigado, irritable y levemente herido. Su único deseo era llegar a su mansión, darse un baño, comer una buena comida (arroz, tomate, puede que hasta un poco de Natto) y dormir hasta el medio día siguiente.

Ni siquiera recordaba que día era hoy.

"Ya después veré el calendario"

Se perdió en sus pensamientos mientras caminaba por la aldea, ignorando algunas miradas despectivas por parte de los vendedores y ninjas jóvenes. Después de haber vuelto a la aldea había aprendido a desoír aquellos rumores que corrían de su persona y a olvidar las "bromas" algo subidas de tono que buscaban hacerle con la guarda baja; nunca lograban sorprenderlo ni encrucijarlo, pero el intento estaba.

Semanas después de reubicarse en Konoha, ya recuperado y casi psicológicamente estable, se llevó al cabo el juicio donde se resolvió la libertad condicional del Uchiha y sus nuevos deberes como ANBU. Desde entonces se le veía ataviado con diferentes misiones de rango S que le ponían constantemente al borde de la muerte.

Era obvia la intención de los ancianos, pero él no podía hacer nada para cambiarlo.

Repentinamente un escalofrío interrumpió la meditación del pelinegro. Era una sensación que conocía como su propia mano. Un augurio que venía del mismo infierno a alertarle sobre la presencia cierta persona. Agudizó sus sentidos y sorprendentemente, solo percibió la presencia del que alguna vez fue su maestro.

Frente a él, Kakashi se acercaba con su dichoso libro entre sus dedos y con una sospechosa sonrisa oculta bajo la máscara, la cual que se evidenciaba bajo su ojito feliz.