→𝑅𝑒𝑒𝑠𝑐𝑟𝑖𝑏𝑖𝑒𝑛𝑑𝑜 𝑎 𝑚𝑖 𝑎𝑙𝑚𝑎 𝑔𝑒𝑚𝑒𝑙𝑎 (𝑴𝒊𝒕𝒂𝒌𝒆)

Prólogo. El inicio del final, el final es el inicio

La decisión de salvarlo
tenía un precio alto que debía pagar.

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El parque de diversiones, la lluvia que caía de forma incesante sobre los presentes. Una visión, una misión que debía llevar a cabo a costa de su propia vida.
Ser acorralado de esa forma; y el destino empeñandose en ponerlo a prueba una y otra vez con la mano en el corazón, deseaba proteger a las personas que amaba incluyendo a Senju a pesar de no conocerla demasiado tenía la impresión de que la chica tenía las intenciones de defenderlo.

Luchó, se opusó con mucha fuerza y como si de una línea de tiempo alterna se tratase el ruido de una poderosa moto llegó a sus oídos.

En ese mismo instante las intenciones del otro bando eran claras, cualquier persona sería una víctima. Y en este caso, Draken era la opción más cercana.
No podía permitir que el futuro que había visto, él teniendo un taller reparando motocicletas, él más alto con una sonrisa siguiendo su vida como un luchador innato. Demostrándole a la persona que ama que puede disfrutar de cada momento con sus amigos, de esos que se consideraban su familia. Takemichi simplemente no pensó cuando uso su cuerpo de escudo para recibir aquellos balazos protegiendo el cuerpo del mayor.

"Ah...que sensación tan familiar"

Había vivido una situación similar en manos del chico que en esos precisos momentos enfocaba su mirada oscura sobre la escena. Mientras que el agua caía sobre su cuerpo creando una escena en donde la sustancia más pura se mezclaba con ese carmesí creando bajo sus pies un charco de esa mezcla que creaba el shock más grande en todos los presentes. En como una chica salió corriendo en busca de ayuda sin siquiera pensarlo, necesitaban una ambulancia.

¡Ya! ¡Ya! ¡Ya! Debía apresurarse sino quería perder a una persona de su propia pandilla sintiéndose impotente por no haber cumplido su palabra.

-........¿Takemitchy?.....

Poco a poco los pasos eran más apresurados mientras que la lluvia no hacía más que llevarse al piso lo que más le importaba en brazos de una persona que consideraba su propio corazón; Entonces...¿Por qué dolía tanto?.
Sus ojos negros no tenían brillo alguno acercándose a la escena paso a paso, aún faltaban algunos minutos para tener presentes a todos los miembros de las tres deidades. Y realmente en esos momentos, el invencible Mikey se sentía tan vulnerable. Sin recibir respuesta, sintiendo que todo su sistema fallaba ante la imagen de ese chico de cabello rubio teñido tratando de respirar.

-¡Oi! ¡Takemichi! No cierres los ojos, la ambulancia llegará enseguida.

-Draken-kun...estas...a salvo...me da mucho gusto.

Una tos se hizo presente junto a una bocanada de sangre salir de sus labios, no sentía mucho dolor, es como si su cuerpo se hubiera preparado para ello. Se había sacrificado sin pensar en su amigo, no sólo por él...

-.......¿Take...mitchy?.....

Levantó un poco sus ojos azules como el mismo cielo cuando la lluvia no arrasa con todo, ni con su propia vida. Contemplar una vez más esos ojos tan brillantes de una gran vitalidad, de una motivación tan grande e impulsiva haciéndolo fallar...haciéndolo desfallecer. No sabía como sentirse en esos malditos momentos en donde se tuvo que arrodillar para llegar a la altura. Sentía la mirada de su mejor amigo sobre él mientras que Mikey sólo necesitaba llegar a tocar esa mano tan cálida...no quería volver a sentir el frío una vez más.