⇢ ﾞbe happy゛|| 지민

VII

——¿Qué sucede?
Namjoon aparecía a un lado de Kaia.

——Necesitamos que vayas a Corea y cuides la entrada. Ahora serán tres, luego irán más.
Afirmó la maga superior.

Seiji lanzó un suspiro pesado llamando la atención de todos, con intriga le cuestionaron.
——Soki ya logró que sus sombras puedan apoderarse de nuestros magos. Algunos han sido atacados y murieron.

——Pero si no llegó ningún aviso de que un mago murió.
Kaia señalaba el mural de que todos sus nombres parecían intactos.

——Es porque nosotras no nos podemos enterar. ¡Perdemos la conexión con ellos!

——¿Y qué haremos?—Namjoon cuestionó, estuvo presente en esa discusión.——¿Seguirán mandando magos?

——Me encargaré de traer a todos esos magos que están inactivos.—Kaia se retiró hacia un balcón del piso superior.

Mientras que Seiji se cruzó de brazos caminando por la sala.
El chico de pelo violeta esperó a que hablara.
——Todos estarán activos.—caminó a unas puertas con él detrás.
La abrió mostrando una habitación repleta de pulseras con una pequeña esfera de diamante.
——Aquellos que encuentres allí y sus collares no sean de color negro dales esto.

Colocó varios en una bolsa y se la entregó.
——Los protegerán de las sombras y cualquier mal.—él asintió.——Sus collares ya lo hacen pero por más seguridad.

Yoongi regañaba a Jimin por milésima vez en los dos días que pasaron.
Durante ese trayecto, el chico de menta trataba de abrir portales pero era inútil, su collar ya había vuelto a la normalidad.

Habían notado que cada que se acercaban a las personas poseídas por las sombras el collar de Yoongi se volvía negro como señal de advertencia.

Por otro lado, Hoseok dio la idea de robar uno de esos carruajes impulsados por líquido.

Al contrario, hicieron una imitación de un auto con los poderes del grisáceo y habían tomado este hasta llegar a las orillas de Japón.
——Estamos en Fukuoka...
Dijo el chico positivo estirando sus piernas.

——¿Aquí no debería haber una entrada?

——Lo destruyeron.
Cortante Yoongi seguía enojado con él.
——Subamos al barco de allá, de seguro va a Corea.

Los tres chicos se encaminaron juntos al bote, no había nadie que dijese que era suyo.
Así que se subieron solo para hacer una imitación más rápida que ese y comenzaron su navío hacia Corea.

——Lo lamento...

Yoongi miró a su compañero con una ceja arqueada, sin entender.

——A los dos, los decepcioné.

Hoseok dejó que el bote se manejara solo y se acercó a Jimin.
——No nos-

——Sí, lo hice, a todos decepciono.

——¿Por qué dices eso? ¿Estás bien?

——Primero dejo que el chico que cuidaba lograra suicidarse cuando yo debía ayudarla a seguir adelante.—frustrado se sentó a un lado de Yoongi y Hoseok.——Y ahora parto mi collar para ayudar a alguien, ella desaparece y no sé en qué parte de Corea podría estar.

Aunque quisiese llorar, esas lágrimas jamás iban a salir porque lo tenía prohibido.
Solo ocultaba su rostro con sus manos, su voz estaba rota.

——Que mago más inútil.—murmuró para si mismo.