Capítulo 11

177 21 19
                                    

Chanyeol tuvo la oportunidad de hablar con su padre, no fue una charla muy amena, pero pudo apreciar la preocupación en él. La reina, por otro lado, insistió en hablar a solas con él y pese a la negativa de todos se hizo lo que ordenó.

Debía odiarla, sería lo que cualquiera en su lugar haría sin sentirse culpable, pero simplemente no puede. Recuerda la primera vez que pudo ver a la reina a los ojos.

Dolor, de ese que marca el alma. Ese mismo que logra oprimir el corazón, agrietarlo con el pasar del tiempo. Del que pudo sentir desde hace mucho tiempo.

—No pensé que lo salvarías.

—También lo pensé —juguetea con sus dedos, no es capaz de ver su rostro—, estos días me pregunté si valía la pena. Cuando lo pienso con detenimiento mi madre no hubiera permitido que me expusiera de esa forma.

—Ella lo amaba perdidamente —toma asiento al lado de la cama, en el sofá más cercano, su semblante es casi colérico—. Sé sincero. No te burles de mí.

—Nunca supo la verdad, ¿no es así? —la mira a los ojos—. ¿Por qué creerle al hombre que la traicionó? Siempre me lo he preguntado, ¿por qué solamente importó su versión de la historia?

—¿Cuál es la otra versión? —dice con desdén—. Ella sabía con quién se estaba acostando y todo lo que lo conllevaba.

—Es cierto que mi madre se le insinuó a mi padre, pero no por las razones que usted cree y sin saber de su título.

—Esta conversación es ridícula, me niego a seguir el hilo de...

—Quería una familia —dice atropelladamente—, quería un hijo, no un marido. Esa noche pudo haber sido mi padre como cualquier otro, una vez que pasó nunca tuvo intención alguna de volver a ver a mi padre. Por el contrario él...

—Fue quien la buscó —deja caer sus párpados, sus puños están apretados arrugando la falda de su vestido—, ¿no es así?

—Ambos hemos sufrido por el comportamiento de mi padre —juguetea con su anillo—. Se por qué me detesta, pero sigue siendo injusto.

—No esperes una disculpa, no será sincera —lo mira a los ojos. Hay tanto cansancio en la reina que Chanyeol siente lástima por ella—. Durante años tuve que lidiar con las burlas a mis espaldas, se volvió tolerable con el tiempo. Pero, ¿sabes qué? Es doloroso ver tu rostro, te pareces tanto a tu madre. Me recuerdas una y otra vez que la persona que amo me ha traicionado y mentido.

—¿Por qué seguir con él? Si le provoca tanto dolor.

—Probablemente este sea el único consejo que recibirás de mi parte, Park Chanyeol —suspira, se levanta de su asiento y su mirada se pierde en la pared más cercana—. Nunca estés al lado de quien no te ama.

No sabe por qué el pecho empezó a dolerle.

—Lo tendré en cuenta.

—Le salvaste la vida, aunque me cueste admitirlo, es como si me la hubieras salvado a mí. En el momento en que necesites algo, pídelo. Se hará realidad.

No pudo decir algo respecto, solo vio a reina reiterarse de su habitación de nuevo con el aura de poder que siempre la ha caracterizado.

De pronto es como si sintiera un peso menos en su espalda, una liberación que no sabía que necesitaba con tanto ahínco.

[...]

El camino de vuelta a Exodus fue rápido, al llegar no dudaron en intentar separar al matrimonio, pero Chanyeol seguía muy enfermo y Sehun quiso mantenerse a su lado. Como príncipe heredero no pudo descuidar sus labores, pero sí avanzar la mayoría en su dormitorio al lado de su esposo.

Matrimonio Arreglado [Sechan/Chanhun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora