LLBN

Capítulo 43

¿Por qué estoy aquí? La pregunta me dio ganas de llorar, y cuando miré a Fang Shuyi, éste miró indiferente por la ventana como si no fuera de su incumbencia, mientras Lu Weixi me miraba sin decir una palabra. Xiao Heng también parecía intuir que los dos le ocultaban algo, pero no tenía ninguna intención de seguir con el asunto.

Era como si fuéramos extraños que nos hubiéramos encontrado de pasada, él era cortés y humilde, y yo era el único que estaba confundido y asustado.

Las flores silvestres en el alféizar de la ventana, que sigo regando todos los días, estaban hoy un poco marchitas en sus pétalos. Se despertó hace un día, tiempo suficiente para pensar las cosas, y yo ya llego demasiado tarde. Es seguro que Fang Shuyi y Lu Weixi trabajaron juntos para apartarme de la historia, y lo que Xiao Heng escuchó y vio, la huella de Luo Yuchen se borró por completo.

La historia de Luo Yuchen sigue siendo la misma que hace seis meses, el mismo desalmado que lo llevó al borde del abismo. Tenía autocontrol, por lo que sólo era indiferente, aún no enfadado por casi haberle cortado su vida para nada.

Pero esto me hizo estar cada vez más perdido. Tenía los medios para lidiar con su enfado, pero no con su indiferencia, porque si estaba resentido, significaba que aún tenía algo que esperar, y si mostraba una indiferencia absoluta, me desempolvaría tan fácilmente como una fotografía descolorida, para no volver a ver la luz del día.

"Puedes salir si estás bien". Lu Weixi me empujó en la frente y me empujó hacia la puerta, Xiao Heng no volvió a hablar por mí y sólo me empujaron fuera, la puerta blanca de la habitación se cerró con fuerza.

No tuve el valor de llamar a la puerta, así que me quedé con la cabeza gacha. Por fin se despertó. Era curioso el tiempo que había estado esperando este día, pensando que me alegraría mucho cuando se despertara, pero la realidad era que estaba privado incluso del derecho a esperarlo, lo que lo hacía aún más amargo y difícil.

Sabía que aunque fuera al hospital no me dejarían volver a verlo, pero mi corazón estaba tan revuelto que no pude evitarlo y tuve que ir a verlo y estar con él en el mismo aire para poder respirar bien.

Sabía que esto era tan arbitrario como inútil.

En el jardín del hospital, el sol del mediodía de mayo brilla entre los árboles, haciéndote entrecerrar los ojos, y el calor del aire te hace divagar un poco. Sacudí la cabeza, cada vez más propensa a pensamientos demasiado sentimentales en estos días.

Entonces oí una voz que me llamaba por mi nombre, como una alucinación que sonaba increíblemente fuerte detrás de mí, y el flujo sanguíneo de todo mi cuerpo se ralentizó junto con el movimiento, y sentí que podría haberme dado la vuelta y haber sido grabado a cámara lenta en una película.

"Hola". Se quedó de pie, con las manos en los bolsillos, con un aspecto bastante relajado, con una sonrisa en los labios como el aire de mayo, calentado por el sol. Si no fuera por la bata de hospital que llevaba, casi me daría la ilusión de haber retrocedido el reloj a una escena maravillosa que nunca existió.

"Tú... tú..." tartamudeé, sin saber qué decir, Xiao Heng se encogió de hombros y sonrió, "Yo sólo estoy caminando casualmente por aquí. "

No sé qué decir de nuevo. De hecho, según las circunstancias normales, debería al menos ser capaz de disculparme con él y explicarle algo, pero su sonrisa como si nada hubiera pasado en general me confundió. Me sonrió de una manera que me hizo sentir asustado y halagado, y después de la indiferencia de ayer, pensé que no volvería a sonreírme en mi vida.

"Ah, si todavía tienes algo que hacer, ve a trabajar primero" dijo.  Probablemente porque me vio no moverme durante un buen rato, agitando la mano para indicar que podía irme, y luego como si se le ocurriera algo, "pero si nos volvemos a encontrar alguna vez, tengo algo que hablar contigo".