¿Qué pasaría si un día el chico del que tienes un póster en tu dormitorio, entrara por la puerta de tu trabajo?
¿Qué pasaría si ese chico, del que estás enamorada, es Ferrán Torres, el futbolista?
DUOLOGÍA DESTINo I
💞⚽💞⚽💞⚽💞⚽💞
ESTA HISTORIA CON...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El taxi acaba de dejarme en la puerta de la casa de Ferrán. Voy a darle una sorpresa. No sabe que he venido. Durante los últimos días de mi estancia en Foios, lo he echado mucho de menos, y ha sido Dolores la que me convenció de que viniera, y eso he hecho.
Llamo al timbre y espero unos segundos con el corazón latiéndome muy deprisa por los nervios. La puerta se abre pero no es Ferrán quien lo hace. Es un chico castaño claro que me mira de arriba a abajo algo sorprendido. Me suena mucho su cara pero no sé de qué, la verdad.
- ¿Qué quieres? -me pregunta con cara de asco.
-Soy Rebeca, la novia de Ferrán -le digo dando un paso para entrar en la casa. Él empieza a cerrar la puerta impidiéndome que avance, dejándome algo desconcertada.
- Si claro. Su novia. Mira tía, lárgate que estamos ya hartos de las fans locas.
Y así, sin más, me cierra la puerta en las narices ante mi estupor e incredulidad. Vuelvo a llamar y él mismo idiota vuelve a abrirme haciendo que me cabree.
- ¡Pero tú eres tonta o qué! -me grita furioso.
- Que llames a Ferrán que soy su novia -le respondo gritándole de la misma manera.
- Ferrán no está, y ya te puedes ir largando o llamo a la poli.
El tipo este vuelve a cerrarme la puerta y yo estoy ya que me subo por las paredes. Vuelvo a llamar al timbre pero de pronto deja de sonar. Así que me pongo a dar golpes en la puerta y ni caso, nadie me abre. Cojo mi móvil y marco el número de Ferrán mientras empieza a llover. El idiota de mi novio no coge el teléfono ni a la de tres y yo me estoy poniendo chorreando. Cojo mi maleta y vuelvo a llamarlo insistentemente mientras llueve cada vez más fuerte. En la esquina de la calle hay un café, así que decido ir hasta allí y refugiarme hasta que Ferrán coja el teléfono o deje de llover. La hostia que se va a llevar más de uno cuando entre en la casa va a ser grande.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
