35. El tito Ferrán

4K 210 56
                                    

Viernes 28 de Enero de 2022

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Viernes 28 de Enero de 2022

En mi vida he visto una persona tan testaruda como Rebeca. Dios, llevo desde ayer llamándola y no me coge el teléfono ni contesta mis mensajes. Bueno, si, los WhatsApp si los mira, que ya me ha dicho que la deje en paz que la agobio. Yo, que la agobio. Y más que la voy a agobiar. Pienso ir a buscarla a mediodía y decirle cuatro cosas. Ya está bien de sentirse inferior cuando está conmigo. Ya va siendo hora de que tengamos una larga conversación ella y yo.

Mi teléfono suena en ese momento y voy corriendo a cogerlo pensando que es ella. Miro la pantalla y veo que es Noemi y dudo si cogerlo o no por si me echa la bronca.

- Hola Noe - el tono desesperado de su voz me produce un ligero escalofrío.

- Dime que estás en tu casa Ferrán.

- Estoy en mi casa.

- ¡Dio! Hazme un favor, ¿podrías venir y llevarme al hospital? Se me ha roto la bolsa...

Me quedo parado sin saber que hacer. La bolsa. Rota. Los mellizos. Trago saliva nervioso con el teléfono aún en la oreja.

- ¡Ferrán!

- Siii. Que si, que ya voy. ¿Has llamado a Leo?

- Si, claro que he llamado a ese inútil -mientras Noe me habla yo cojo mi cartera, las llaves del coche y mi chaqueta. Cierro la puerta de casa poniéndole la alarma y bajo las escalera del sótano- cuando está con un paciente no coge el teléfono, mi hermana tiene su móvil apagado y en la consulta no paran de comunicar ¡estoy hasta el coño, joder!

- Bueno, tranquila que ya voy para allá. Yo los llamo de camino.

Me monto en mi coche a la velocidad de la luz y salgo de casa en dirección a la suya. Menos mal que vivimos cerca. Voy llamando a la consulta, y efectivamente no para de comunicar. Bajo la calle de Noemi y me la encuentro en la puerta nada más llegar. Me bajo del coche y la ayudo a sentarse en la parte de atrás junto con sus cosas.

- ¿Vas bien? ¿Vas cómoda? -le pregunto arrancando mi coche en dirección al hospital.

- Si, tranquilo. En teoría aunque se rompa la bolsa, aún no estoy de parto Así que me lo tienen que provocar, aunque...joder, si me tienen que hacer la césarea...

- Bueno Noe, tranquila, no pienses en eso por favor, todo saldrá bien ¿vale?

Voy marcando el teléfono de Rebeca y sigue apagado y el fijo de la consulta no deja de comunicar. Doy golpes en el volante maldiciendo mientras me pongo cada vez más nervioso.

- Ferrán, tranquilo, que voy bien ¿vale?

- Debería tranquilizarte yo a ti, no tú a mi Noe.

- Bueno, se nota que tú estás nervioso por algo más que por mi.

Mi pequeña locuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora