Capitulo 10

8 2 1
                                    

A la mañana siguiente me levanto medianamente pronto porque para mi los sábados es para quedarme durmiendo hasta el medio día pero no se podía con tanto jaleo, miro el reloj y son solo las doce del medio día.

Bajo al salón para saber porque hay tanto jaleo.

-Ma, buenos días- le saludo- que haces cocinando tan pronto? - le digo

- Buenos días- me devuelve el saludo- no se si te acuerdas pero tu novio iba a venir a comer

- Como que mi ..- y enseguida me viene lo de ayer, como mi madre le invitaba a comer.

Sin decir nada me giro y voy corriendo al baño para ducharme, cuando termino veo la hora y son 1:05 p.m y aun me tengo que vestir y arreglar el desastre de habitación que tengo. No se porque estoy tan nerviosa pero mientras me miro al espejo para terminar de arreglarme; llevo unos vaqueros rojos, una blusa marrón pegada al cuerpo y como no mis convers blancas.

Estoy terminando de recoger mi habitación cuando oigo el timbre y me pongo mas nerviosa de lo que estoy; bajo las escaleras para ir en dirección al comedor que es donde escucho murmullos

- Hola- digo tímida

- Hola Erika- se me acerca y me escanea de arriba abajo- que guapa estas con esa ropa- me dice sonriéndome

- Tu tampoco estas tan mal- le digo y como no va de negro

- Bueno- dice mi madre recordándome que también están aquí

- Marco, bueno a mi madre ya la conoces- le digo señalándola- El es mi padrastro Alberto y por ultimo este pequeñin es mi hermano Alex- le digo cogiendo a mi hermano en brazos

- Marco, tu sabes jugar a futbol?- le dice con dificultad

- Claro que si, después si quieres jugamos si?- le dice acercándose y acariciándole la cabeza

- Vamos a ir al jardín que ya esta la comida hecha- dice mi madre

Dejo a Alex en el suelo y enseguida noto como alguien me coge de la cintura, me giro y tengo a Marco en frente de mi

- Media rubia- susurra- tengo unas ganas de besarte ahora mismo pero se que no vas a querer ahora

- ¿Quién te ha dicho que no?- le digo, realmente no se porque con el saco este lado

Se iba a acercar pero noto como alguien lo estira y lo separa de mi, es mi queridisimo hermano, Marco coge mi mano para ir al jardín conducido por mi hermano. Al llegar, Marco se sienta a mi lado, al frente tenemos a mi hermano y mi madre, mi padrastro es quien se pone a la punta. Empezamos ha hablar de cosas triviales hasta que mi madre empezó su interrogatorio

- Bueno supongo que si estas en el mismo curso de mi hija tienes su misma edad no?- le pregunta mi madre

- Pues me lamenta decir que se equivoca, tengo ya los 18 pero este curso lo repetí cuando aun estaba en Italia- le dice

Veo que mi madre se tensa al escuchar de donde es, a su reacción su frunzo el ceño pero no le doy mucha importancia

- Y puedo saber porque os mudasteis?- pregunta mi madre aparentando que la palabra Italia no le ha puesto nerviosa ni nada.

- Mi padre trabaja en una empresa que esta en muchos sitios y fue transferido aquí- le dice

- Y bueno esto es una pregunta mas para los dos, ¿desde cuando estaís juntos?- pregunta sonriendo

- Maaaaa- grito ante su pregunta

- Carla, de momento Erika y yo no estamos en una relación pero nos estamos conociendo y espero que eso pase pronto- dice sonriéndome

Yo abro la boca porque no me esperaba esa respuesta, ¿Cómo que pase pronto?; yo no creo que este ahora para relaciones, la única que he tenido fue horrible, y no quiero salir otra vez lastimada porque no creo que pueda seguir, y aunque hay algo en Marco que me dice que no me va a lastimar sigo teniendo miedo

Mis pensamientos son interrumpidos cuando el fijo de la casa empieza a sonar, algo poco común, mi madre va a responder, veo como frunce el ceño y como poco a poco se va poniendo blanca, entra como un estado de shock. Al ver que no reacciona, Alberto habla con la otra persona y el también se tensa, al despedirse veo como los dos están sin poder reaccionar.

- Mama- digo con miedo- ¿que ha pasado?

- Hija, no te alteres con lo siguiente que te voy a decir, por favor- me dice y me mira a los ojos donde puedo ver su miedo y pánico

Alberto se acerca abrazar la y darle apoyo

- Mmmm.. T-tu padre ha salido de la cárcel, Erika- me dice temblorosa

-C-como?- le digo con un susurró

Comienzo a sentirme débil y a ver puntos negros, siento como Marco me llama pero apenas puedo abrir los ojos, lo último que siento es como me cogen para que no caiga al suelo como peso muerto

Nuestros demonios Donde viven las historias. Descúbrelo ahora