Nada estuvo bien, su papá se puso un tanto agresivo.
—No, tu no entiendes nada. -escuchaba los gritos de su padre.
—Porfavor entiende, es por nuestro bien... Esto ya no es..... -decidio no escuchar más, no quiso escuchar más, y se obligó a si mismo a cerrar sus oídos, para que no escuchará nada.
Despues de un momento escucho de nuevo.
—¡A la mierda entonces! -despues de esto se escuchó el estruendo de algo,como si hubieran roto, golpeado o azotado algo.
Harry estaba recostado en su cama, lágrimas se deslizaban por sus ojos verdes, empapando sus pestañas, lágrimas cayendo, recorriendo sus pómulos, hasta tocar sus rizos y desaparecer en la tela de la almohada.
No hizo ruido alguno al llorar, no sorbió su nariz, no hubo sollozos.
Salió corriendo de su cuarto y fue al de su padre, vio a su padre tirado en el suelo, gritando y pidiendo perdón por algo.
—Harry! -escucho a su padre gritar para después sentir que le apretaban las piernas.
—Papá, me lastimas. -dijo, su voz no tenía pizca de tristeza, miedo o enojo.
Su papá dejo de hacer presión pero seguía abrazando los pies de Harry.
—Que hice, que hice, perdón mamá, soy bueno, que hice mal. -su papá lloraba y se aferraba a las piernas de Harry, susurraba palabras que no eran entendibles, Harry lo escuchaba, más no lo veía, tenía su vista puesta en la pared tenía que ser fuerte, tenía que mantener la calma, tenía, tenía, tenía, se le hizo un nudo en la garganta, como si quisiera llorar, pero no lloro.
—Papá me lastimas. -dijo una vez más, pues su papá volvió a hacer presión.
Momentos después, su papá lo soltó.
Salió de aquel cuarto y fue al suyo, tomo la mochila que llevaba al colegio y metió ropa, un cargador para su celular.
Volvió al cuarto de su padre, y este iba de salida con una alcancía de cerámica en forma de perro, tenía ahorros de casi cuatro meses, dinero que ocuparían cuando se necesite.
Harry lo vio salir con esa alcancía en manos.
—¿Que haces?. -pregunto Harry, y la verdad que no sabe por qué lo hizo, si está más que claro que iba a hacer.
—Ya me voy, ya no quiero nada. -dijo su padre.
Harry lo vio y seguía sin soltar una mísera lágrima, o algo que dijera que la situación le dolía, y que solo quería desaparecer.
Volvió a salir y como si su padre solo esperaba que el saliera reventó el perro contra el suelo, este rompiéndose en mil pedazos, dejando libres a muchos billetes, muchos billetes, su padre recogiendolos todos, no había ningún billete a simple vista, solo pedazos de cerámica.
Se dispuso a recoger los restos, en ese transcurso encontró billetes entre los escombros, llevándose 130 pesos.
Fue al cuarto de sus padres, su papá estaba empacando sus pertenencias en una gran maleta.
No le hizo caso.
—Ya me voy.
No lo escucho.
—Harry, ya me voy.
Su padre seguía guardando sus pertenencias.
—Okey. -fue lo único que dijo Harry.
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CINCO DIAS EN MI CUERDA FLOJA
FanfictionEsto es mío, no puede haber un plagió, no lo copié, no me gustaría que me copiaran, gracias por leer. LaPanzitaDLou. :) Avisen de errores. Leer con discreción porfavor.