Mudanza fallida

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Años después...
Era un día demasiado tranquilo como para ser verdad.
Se suponía que hoy era el día de la mudanza, pero al final no llegó la amiga de Sandra, y todas sus cosas estaban esparcidas por toda la poca iluminada habitación.
"Lo siento mucho, de verdad.
Es que mi jefe me ha llamado para sustituya a Chiara y ya sabes que no puedo negarme, está enferma y tendré que ir después a visitarla"
Esas fueron las palabras que dijo hace media hora, mientras que Sandra se mordía las uñas debido al estrés.
Ahora lo único que quedaba por hacer era seguir poniendo las cosas en sus respectivas cajas y maletas y tachar otra cosa de su larga e interminable lista : llamar a Valeria.

Valeria era su alma gemela, que manera más extraña de contar quién es, ¿verdad?
Pues sí, para Sandra ella era todo lo que siempre ha necesitado, y se parecen muchísimo entre sí.
Desde los 13 años han estado intentando aprender miles de cosas, como ir en skate, aprender a tocar el ukelele, saber leer las manos jaja es que en esa época les encantaba todo ese mundillo tan cautivador.
No era la amiga que tenía muchos pretendientes, tampoco la callada o la segunda madre.
Era Valeria.
Y solo con ser ella misma, consiguió que Sandra no dejase sus sueños y mucho menos pasar un solo día sin aprovecharlo y vivirlo al máximo.

Hasta que las rosas se acabenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora