La hija de Beyoncé

Miami

Estuvimos buen rato viendo todas las calles posibles, por suerte ambas teníamos calzado deportivo así que el cansancio era menor. Todavía no reconocía a Dinah de rubia, pero era la mejor manera para esconderse.

Mira Mani, aquí venden comida -tomo mi mano jalándome al pequeño restaurante, había literalmente de todo en ese lugar, parecía un centro comercial- ¿que quieres comer?

Madre mía, no se... Aquí hay tanto -susurre buscando un buen lugar, entre comida mexicana, italiana, hasta alemana, encontré un bonito local llamativo con pinta de barrio francés, al voltear a ver a Dinah ella miraba el mismo local y sin soltar su mano la lleve hasta ahí- Buenas tardes -susurre al ver que no había nadie, Dinah se encogió de hombros y cuando íbamos de salida alguien finalmente nos contesto.

¡Buenas tardes señoritas! -un señor de gran barba salió de quien sabe donde con dos menús y nos indicó una mesa cerca de una gran televisión- bienvenidas a la Blableblúbléblabla -o algo así le entendí que dijo...- ¿desean algo de tomar?

Una margarita por favor -alce una ceja mirando a Dinah, ella me miro confundida.

¿Quieres alcohol? -me puse seria y ella frunció el ceño.

Yo creí que era... Uhm, mejor una malteada de chocolate -empezó a jugar con sus dedos y luego a rascar su nuca, estaba nerviosa o mas bien apenada por el rubor de sus mejillas.

Yo quiero una limonada con agua natural, por favor -le hable al señor raro que nos atendía, él salió de un brinco a la cocina, desapareciendo de nuevo.

Este menú es raro, todo esta en otro idioma o -Veía el menú con completa confusión mientras escuchaba a Dinah y asentía pues estaba totalmente de acuerdo con ella.

Creo que necesitare un traductor -saque mi teléfono buscando los significados de cada palabra, pero era completamente difícil escribir todo, así que ambas optamos por lo único que era entendible, un sándwich con bacon y quien sabe que.

El señor llego con nuestras bebidas y parecía que bailaba mientras nos atendía, Dinah solo sonreía divertida y yo trataba de concentrarme en el menú para no soltar una carcajada- ¿que van a ordenar? -nos preguntó el mesero y yo arrugue la nariz.

Dos sándwiches le ba...

¡A la orden! -ni bien termine la frase y ya se había ido bailando de nuevo- ¡Aurélin! ¡deux sándwiches le bacon! -gritó el señor en la cocina y de inmediato empezó a sonar la cocina con música clásica a todo volumen. Empezamos a reír de una manera incontrolada ya que ni siquiera nuestras risas se escuchaban por la música tan alta.

¿Qué quieres hacer después de desayunar nuestro sandwich? -me pregunto Dinah mientras me encogía de hombros- deberíamos buscar en un lugar de información o en internet -sonrío sacando su movil nuevo y empezó a buscar mientras yo tomaba de mi limonada- "cosas interesantes que hacer en Miami". anda Yahoo respuestas, ayúdame -reí mirándola y entraron otras personas, gire para verlas sentarse cerca de la puerta y volví a girar para ver a Dinah con los ojos como platos por asombro.

¿Que viste Di? -pregunté curiosa mientras ella solo negó con la cabeza aún viendo su teléfono con interes- eres cruel.

Es que... es que encontré algo y... oh por dios -susurró aún viendo con atención su teléfono- ¿Cuándo es esto?

Si hablaís de Coachella temo en decirte que eso es en California -arrugué la nariz mientras ella negó con la cabeza- ¿Con que entonces? -me crucé de brazos haciendo berrinche.

bueno dale, estaba buscando en google y... checa la segunda búsqueda -me pasó su teléfono y lo leí. "Vacaciones en miami... Lesbians parties in miami... Buffet in Miami... oh, tienen un buen buffet en esta ciudad"- ¿Ya lo viste? -asentí con la cabeza dandole click a los del buffet.