Angstruary [One-shots]

Día 1 - Marcanne

Temática: I did it for you

Una azabache de piel oliva y ojos verdes estaba mirando fijamente a la castaña desde el estrado.

—¿Por qué?—La chica por su parte ni se inmutaba a responderle, parecía que no le importaba ser llevada al juzgado después de haber confesado su crimen hacia ella—¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué?—Se repetía una y otra vez, la tailandesa intentando tener todas las respuestas posibles.

—Lo hice por ti...—Agregó para luego dirigir su mirada a los padres de la chica que había matado.

—Señorita Wu—habló el juez impaciente—¿puede decirnos de una vez por todas que fue lo que hizo?—El abogado de la azabache interrumpió—mi cliente es inocente hasta que se muestre lo contrario.

Marcy Wu nuevamente volvió a hablar.

—¡Encontraron mis huellas en su cuerpo y en su ropa también! ¡El arma homicida estuvo en mi casa a la vista!—Aún con las esposas puestas saco un mechón de cabello rubio que le pertenecía a la animadora—como premio decidi quedarme con esto.

—¡Eres un monstruo!—Grito la madre de la alemana—Mi hija tenía una vida por delante y tu se la quitaste—su marido intento calmarla—se la arrebataste...—Volvió a dar un grito al aire para apoyarse en el pecho del señor waybright.

La taiwanesa admiraba de lejos esa conmovedora escena con una sonrisa en los labios, pues bien sabía que para una madre no había peor dolor, que el perder un hijo sobre todo al enterarse que alguien más puede arrebatarle la vida de una manera muy injusta. Sonreía por qué a ella le habría encantado imaginarse como su madre o su padre se preocuparan por ella, pero no ocurría por dos simples razones.

La primera era que la mujer que decía ser su madre, era una mujer alcohólica que se la pasaba tirada en la sala de su casa esperando a que el licor o la cerveza no se le acabará. La segunda era que su padre se mataba trabajando para pagar los gastos básicos de su hogar y para darle una vida digna a su única hija, sin embargo para hacerlo tenía que trabajar turnos o horas extras, lo que incluía no estar en casa y si lo estaba, estaría descansando para así poder reponerse.

En términos resumidos a marcy no le daban el afecto y cariño que merecía. Volvió en sí, cuando un señor de barba blanca hablo .

—Orden en la sala—exigió el juez—no sólo hay pruebas, la culpable ha confesado la muerte de la señorita sasha waybright—tomó su mazo y golpeó con el tres veces—su condena será de 15 años—oficiales llevensela. La sesión ha concluido—El juez se retiro, dejando a los presentes en la corte.

La señora waybright, seguía en lo mismo, mientras su esposo intentaba calmarla. Anne al igual que el juez se retiro de inmediato del lugar junto a sus padres.

Marcy fue llevada a la correccional de mujeres menores hasta que cumpliera la mayoría de edad, para ser después trasladada a otro sitio. Desde ese entonces no había vuelto a ver a la castaña mucho menos había tenido la oportunidad de explicarle el por que lo hizo.

Había pasado un año de estar tras las rejas, un año en el que había confesado el crimen de odio hacia la porrista, un año en el que había perdido la cordura y firmeza que le quedaba, otro año en ser olvidada por sus padres, por si fuera poco un año de no tener ninguna visita de tal chica.

Hasta ahora...

Anne savisa boonchuy se encontraba caminando en los pasillos del reclusorio de los ángeles, iba acompañada por una oficial que custodiaba de vez en cuando la celda de la azabache.

—Hey cerebrito tienes visita—abrió la celda indicándole a la chica de piel canela que entrará para después cerrarla.

Anne al entrar vio cómo la azabache seguía echada en su camilla leyendo un libro.