Monstrum [Nymphadora Tonks]

Capitulo XVI: Navidad glacial.

El viaje pilló a la vampira de mal humor, no solo porque el vagón de aurores era ruidoso, su creciente incomodidad se daba cuando miraba su petaca plateada, medio llena y medio vacía, contenía sangre de dragón. Todo el tiempo bebió sangre de dragón, toda la semana sangre de dragón, lo único que tenía en su petaca era sangre de dragón, lo único que ingería era sangre de dragón, la boca le sabía a sangre de dragón. Tanta sangre de dragón la estaba por desquiciar.

No era la correcta forma de alimentarse, y el ministerio lo sabía, pero aún así no le mandaban más que sangre de dragón. Era como si esperaran que su vampirismo estallara y atacara a alguien, para entonces poderla mandar a arrestar y posteriormente declararla peligro inminente a la comunidad mágica, de modo que pudieran mandarla a ejecutar con todo el apoyo de la ley. Pero ni un solo auror contaba con la resistencia de Snyde, que no veía como un desafío aguantar solo con un tipo de sangre, pero su cuerpo no estaba tan de acuerdo. Su dieta, al igual que la humana, necesitaba variedad, tanta sangre de dragón poco a poco dejaba de serle zaceadora, y su cuerpo daba los primeros indicios de hambre.

Mientras la vampira fingía dormir, una metamorfomaga la observaba, se podían distinguir bien por que eran las únicas dos que no tenían un acompañante en la sila de al lado, pero aun así se negaban a sentarse en asientos pegados.

Tonks se preocupaba, constantemente se preguntaba si ahora la pelirroja comía como es debido, ya que la veía escasas veces y nunca la vio comer. En todos estos días previos no la vio (ni se enteró que alguien la viera) comiendo. Eso la angustiada inmensamente.

Le escribió a Molly esto, y juntó coraje para escribirle a Bonnie Snyde también, consideraba que el tema era tan urgente que debía acudir a sus dos madres, pero de Bonnie no tuvo respuesta jamás, mientras que de parte de Molly revivió más angustia de la que ya tenía a la hora de escribir la carta, aunque también leyó una promesa definitiva de Molly "Hacer que Arthura comiera todo lo que le sirviera esta navidad".

Y así se enteró del gran cambio de planes que no le había sido comentado: Los Snyde pasarían navidad en la madriguera.

El tren se detuvo en la estación, T/N fingió torpemente que despertaba y esperó que Tonks se diera vuelta para correr a la salida, no quería chocar con ella aunque fueran para el mismo lugar. Al bajar del tren, los Weasley estaban dando la bienvenida a sus hijos y a los amigos de estos unos metros más allá, en tanto que a T/N solo una persona la rodeó con los brazos cuando bajó, era su hermana.

Tonks bajó del tren, y se sorprendió al ver a la pelirroja abrazando y alzando del piso a su hermana adoptiva. No recordaba haber visto reír a Mérula Snyde sin que hubiera denigrado a alguien antes, la abusiva castaña nunca mostró que tuviera un lado afectivo durante sus años en Hogwarts.

Aunque haciendo memoria... si lo había demostrado una vez, hace muchos años, en su primer año de escuela, cuando algún idiota llamó "traidora de la sangre" a su mejor amiga, Arthura Weasley, y la defendió a capa y espada, la abrazó fuertemente y le digo "Desde hoy somos hermanas". Claro que en ese momento hablaba de forma cariñosa, pero actualmente era literal, eran las hermanas Snyde, fundidas en el mismo triunfal abrazo.

Molly: ¡Tonks! -la llamó- ¡Tonks querida!

La metamorfomaga se dio la vuelta dejando atrás a las hermanas Snyde. Cuando iba a saludarla, Molly la rodeó rápidamente en un abrazo cálido, el cual Tonks siguió sin muchas ganas.

Molly: Te ves mucho mejor, querida -le dijo dulcemente-

Tonks: Gracias, Molly -dijo sin sonreír-

T/N pasó de largo a su madre, y salió de la estación hablando alegremente con su hermana. Tonks frunció el ceño viéndola pasar como si no existieran ella y Molly.