—Hola señor Lee, ¿qué tal el viaje hacia aquí?
—Bastante bien Nilya, ¿qué tal tu día?
—Uh, normal, ya sabe. Con personas. —el viejo rió conmigo mientras veía como Min subía conmigo—; Oh, él es Yoongi, va a cenar con nosotros en casa de mi padre.
—Mucho gusto señor...
—Vaya, es usted un muchacho apuesto.
—Puede tutearme, después de todo usted es el mayor.
Puso en marcha el auto mientras yo ponía mis audífonos para ignorar a Yoongi todo el camino, no sin antes poner mi cabeza sobre su hombro para dormir, si iba a estar ahí que sirviera de algo, claro que si.
Sentí que alguien movía mi cabeza despertándome.
—Ya llegamos.
—¿Ah?, bien— bajé del auto después que Suga —, regrese con cuidado señor Lee, muchas gracias.
—Nos vemos mañana señorita Nilya.
Nos adentramos a la gran casa escuchando murmullos en la cocina.
—Ya llegamos, ¿Jimin?
—Holi.
—¿Qué haces aquí? —se acercó a abrazarme ofendido.
—Yo también te extrañé, claramente.
—O sea si, pero está es una cena importante, ¿no?
—¿No lo sabes?
—Saber, ¿qué?
—Jimin es prácticamente tu primo.— Contestó Yoongi saludando a Taehyung. Y tomé el silencio de todos como una afirmación.
—Papá nunca me habló de su demás familia, sabría si eres mi primo.
—En realidad— habló Eunbi—; es mi sobrino. Mi apellido de soltera es Park.
—Wow, por eso esa sonrisa con los ojos.
—¿Qué sonrisa?
—Ya sabes, esa donde sonríes y se cierran los ojos— se miraron entre sí sin saber de qué hablaba—. ¿Así como sonrío siempre?
—¡Aaah! —al unísono, los cuatro en la cocina.
—No puedo creer que no supieran de que hablaba, no es tan complicado.
(...)
Poco más tarde llego mi padre y nos sentamos todos, muchísimos platillos hechos por Eunbi desfilaban en la mesa siendo variados, el festival de colores que había era precioso, justo con la noticia especial que se daría más tarde.
—Y bien Yoongi —habló papá—; ¿como va la empresa de tu padre?, escuché que después de graduarte te harás cargo.
— Oh bueno, va muy bien— silencio incómodo—. ¿Cómo van los idols... suegro...?
Rompí ese silencio incómodo con algo atorandose en mi garganta por la última palabra de la pregunta de Suga, ¿qué le pasaba?
Por otro lado, Taehyung solo se reía de mi situación mientras Jimin nos miraba con confusión.
Después de darme un poco de agua, Min se acercó a mi oído y dijo un bajo lo siento.—En fin— empezó Eunbi—, la verdad es que planeé esta cena porque quiero darles una noticia.
—¿Qué pasa cielo?
—No es nada malo, lo prometo —de debajo de la mesa sacó una pequeña cajita verde con un listón dorado y la puso frente al viejo.— Ábrelo cariño.
Él, con la emoción resplandeciendo en sus ojos desató aquel listón y abrió la caja, sacando de ella unos pequeños zapatitos.
Taehyung ahogó un grito de emoción, Jimin abrió en grande los ojos (tanto que daba miedo), Yoongi aplaudía y papá, aún asimilando la noticia pero con lágrimas de felicidad resbalando en sus mejillas se levantó a abrazar a su esposa, diciéndole lo feliz que la noticia le daba, lo mucho que la amaba y que iba a ser el mejor padre del mundo para ese pequeño que viene en camino, Taehyung y para mí.