Zee hizo una parada antes de llegar al trabajo. Sacó el coche del aparcamiento y fue al supermercado. Zee podía sentir arder sus mejillas por lo que necesitaba comprar. Como nunca había tenido un amante masculino antes, Zee no estaba preparado y como tal, no tenía lubricante. Era necesario corregir esa situación lo antes posible, ya que no había manera que Zee no tuviera relaciones sexuales con su pequeño compañero.
Al entrar en el supermercado, saludó a varias personas mientras caminaba pasando entre ellos. Una vez que se encontró en el área que estaba buscando se quedó estupefacto ante la variedad disponible. Color, aroma, sabor, calor. Yesung se quedó allí y se quedó mirando considerando las opciones.
Zee salió de su concentración cuando una mano aterrizó en su brazo. Mirando a su alrededor se estremeció cuando vio a Jenny a su lado, con una cesta en su mano.
—Zee, ¿qué estás haciendo? Me ignoraste completamente cuando te llamé. —Hombre, la voz era molesta. No sabía cómo la había aguantado casi un año.
—Lo siento. Creo que tenía la mente en otra parte.- contesto Zee.
—Lo que sea. Estaba pensando que podías recogerme esta noche a las siete e ir a cenar. —Anunció Jenny, como si tuviera todo el derecho a hacerlo. Zee no tenía ni idea de qué había visto en ella. Saint era lindo, su voz era sexy, y Zee sabía que era mucho más amable que Jenny y un infierno mucho mejor en la cama que ella también.
Zee quitó el brazo de su mano y negó con la cabeza.
—Lo siento, no puedo hacerlo. Tengo planes con mi compañero.
Zee vio el momento exacto en que caló en el cerebro de Jenny lo que había dicho.
— ¿Compañero? — chilló Jenny, elevando su voz varias octavas—. ¿Qué quieres decir con compañero? ¿Desde cuándo? Yo soy tu compañera.
Zee se estremeció ante la idea.
—No, no lo eres —suspiró Zee. Le daba lástima que Jenny estuviese tan desesperada por un compañero que hubiese recurrido a mentiras y engaños—. Salimos, y luego cortamos. Lo sabes. En ningún momento se me ocurrió que fueras mi compañera.
Zee se volvió de nuevo a los estantes. Podía oír los ruidos ahogados de la rubia a su lado, pero pensó que era mejor no hacerle caso. Extendió la mano y cogió una pequeña botella plana de lubricante. Si querían probar cualquiera de los otros, él y Saint tomarían esa decisión y volverían más tarde. Zee se volvió a las cajas cuando Jenny se puso delante de él, bloqueando su salida por el pasillo. Reprimiendo una maldición, Zee se sorprendió cuando su voz salió plana y carente de emociones.
—Muévete, por favor, Jenny. Tengo que irme a trabajar.
—No, no me moveré. Quiero saber quién es.
Zee estaba seguro que la voz de Jenny estaba apenas un tono por debajo del chillido de un alma en pena. Mirando a su alrededor, Zee tomó nota de que varias personas merodeaban cerca, fingiendo no escuchar su conversación. No podía culparlos realmente, hasta los clientes al otro lado de la tienda podían haber oído gritar a Jenny.
Ya había tenido suficiente de Jenny, y ahora llegaba tarde al trabajo. Zee se inclinó y le susurró al oído.
—Su nombre es Saint. —Antes de que pudiera responderle, Zee la esquivó y se dirigió a la caja.
ESTÁS LEYENDO
1* Compañero Inesperado
Lobisomem[FINALIZADA] Tras ser rechazado por sus padres y expulsado de su manada por ser gay, Saint se mete en su camioneta y conduce sin destino. Cuando su camioneta sufre una avería fuera de la pequeña ciudad de Buri Ram, Saint nunca...