Grosero

<Four>

Louis Tomlinson no era alguien celoso. No lo era pero ahora sí, más cuando estaba éste tipo coqueteando con tu novio y él como el pequeño inocente que es, no lo notaba.

Claro que Harry nunca le ha dado motivos para desconfiar de él, y por supuesto que no desconfía de su novio es más sería capaz de poner su vida en sus manos sin pensarlo dos veces. Pero claro no era del rizado de quién desconfiaba, sino de Kevin.
Un chico nuevo que llegó hace una semana y desde el primer momento estaba pegado como garrapata de su Hazzie; al principio no le prestó atención ya que el chico era nuevo y no conocía a nadie, pero se volvió irritable al pasar los días.

Sin embargo, quiso dejar su molestia de lado y centrarse solo en su adorable novio.

—Amor...—canturreo cerca del rizado para luego abrazarlo—¿Qué tal tu clase?—sonrió sabiendo que se pondría a quejarse de lo aburrida que era o de lo injusto que era el profesor u profesora.

Un seco—Bien—fue lo único que recibió en cambio.

—¿Estás bien?—se preocupó el castaño.

—¿Por qué la pregunta Louis? ¿Debería sentirme mal, acaso?—preguntó mordaz.

—No lo sé, Harry—se molestó por el tono que estaba utilizando el de jades ojos—Solo me preocupo por ti— deshizo el abrazo para sentarse algo alejado del contrario.

—¿Yo te pedí que lo hicieras?—su tono de voz fue tan frío y duro que hizo sentir mal al castaño.

—Lamento velar por quienes me interesan, Edward—sin decir nada más se levantó de la banca en donde ambos estaban, dejando sólo a un arrepentido rizado.

Louis caminó todavía herido y dolido por lo que su novio dijo, es más, ni siquiera fue por lo que dijo sino por el tono en que lo dijo; caminando hacia la biblioteca -quería tener un poco de paz y tranquilidad- permitió que las lágrimas que estaba conteniendo bajarán por sus mejillas.

—¿Problemas con tu novio?—preguntó una voz que reconoció de inmediato cuando ya llevaba unos minutos en un rincón de la gran habitación.

—Tal vez—sonrió.

—Louis, Louis—se sentó a su lado— cuéntale a este chico tus problemas amorosos, yo soy un experto para solucionarlos.

—Te escucharé solo sino implica una roptura y que me quede contigo—mencionó divertido viendo los claros ojos grises del contrario.

—¡Ja! Parece que alguien no tiene buenos gustos—tarareo viendo con ojos brillantes al ojiazul.

—Si los tengo, por algo salgo con Harry—la sonrisa que tenía decayó un poco al nombrar al de rizos chocolates.

—No lo creo—dijo de nuevo para intentar animarlo— si de verdad tuvieras buenos gustos saldrías conmigo—se pavoneó mientras batía sus pestañas. Louis carcajeó como siempre que estaba con Kendall.

—Claro, claro. Ya lo creo Ken—se burló y el otro puchereo.

—¿Osea que no soy lindo?—preguntó aún en broma pero con fingida indignación.

—Oh claro que no cariño, eres simplemente majestuoso—se lanzaron miradas pícaras antes de comenzar a reír fuertemente, siendo sacados por la bibliotecaria.

—¿Viste su cara Lou?—habló como pudo el rubio aún algo afectado por la risas.

—Si, fue divertido—rió—. Gracias Kendall, necesitaba esto—confesó.

—Para eso estamos—empujó su hombro y antes de siquiera procesarlo estaba en medio de los brazos del más alto.

—Ahora, ¿vamos por algo de comer? No desayuné esta mañana y muero de hambre—el rubio asintió de inmediato siendo ahora abrazado por los hombros.

Lo que ambos chicos no notaron fue una mirada verde puesta en ellos, la cual reflejaba dolor, arrepentimiento y rabia.

————
¡Holis!
¿Cómo se encuentran?
Espero que muy bien, eh.

Por cierto, no es obligación, pero me ayudarían mucho votando y comentando que les está pareciendo la fic hasta ahora; también si hay faltas ortográficas o algo no cuadra no duden en hacérmelo saber.

Besos~

PD: ¿Desde dónde me leen?｡◕‿◕｡.

\Rebeca/