06

155 10 6
                                    

Había pasado una semana desde aquella noche en qué los gemelos cerraron el trato.

Ambos jóvenes hacían de todo para conquistar a la chica, pero el único que se había atrevido a tanto había sido Carlos. Desde aquella vez en el vestidor no se había repetido, aunque aveces así lo deseaba.

Ambos chicos habían ido a una que otra cita con Victoria. Ella no entendía muy bien lo que pasaba, pero igual eso la iba a ayudar a descubrir lo que en verdad sentía.

Esa noche tenía una cita con Camilo, así que se arreglaba para la situación. Nada fuera de lo normal, su falda verde, su blusa blanca & su cabello suelto, cómo solía usarlo.

Un Camilo nervioso iba rumbo a la casa de Victoria a recogerla para su cita, tenía todo listo, iba a ser una especie de picnic a la orilla del río, así que puso una manta en el piso, había puesto algunas velas para que no estuvieran a oscuras & llevó algunas arepas para poder comer mientras veían las estrellas. Cuando llegó a casa de Victoria, tocó la puerta & la castaña abrió inmediatamente.

- Hola - saludó Victoria sonriendo.

- Hola Vic, ¿Estás lista? - le preguntó extendiéndole la mano.

- Si, estoy lista - respondió tomando la mano de Camilo, para después cerrar la puerta & comenzar a caminar al río. Cuando llegaron, Victoria miró emocionada el lugar.

- Sé que es algo sencillo, pero lo preparé con cariño - habló Camilo, a lo que Victoria le respondió con un abrazo.

- Es hermoso - le dijo feliz, & ambos jóvenes fueron a sentarse.

Después de comer & platicar un rato, ambos se encontraban recostados, mirando las estrellas, aunque Camilo de vez en cuando volteaba a ver a la castaña.

- ¿Por qué me ves tanto? - le preguntó Victoria, a lo que Camilo se puso nervioso.

- Oh, amm, es que estás muy linda esta noche - respondió provocando un leve sonrojo en Victoria.

- Bueno, pues gracias, tu también te ves bien - mencionó volviendo a mirar las estrellas.

- ¿& si la beso? - pensó Camilo, & después de una corta discusión mental, decidió hacerlo, después de todo no era la primera vez que iba a besarla.

Se sentó, seguido de Victoria, Camilo volteó a verla, & después miró sus labios, esos labios tan suaves que sabían a cereza por el labial que usaba.

Se acercó lentamente, al igual que ella & juntaron sus labios en un suave beso, que pronto hizo que ambos quisieran más. Camilo puso su mano en la espalda de la castaña & poco a poco se fueron recostando sin separarse del beso.

El beso fué subiendo de intensidad, Victoria quería despojar a Camilo de su ruana, pero le incomodaba un poco el lugar en el que estaban, así que se separó del beso, se levantó & tomó a Camilo de la mano para comenzar a correr a la casa de la castaña.

Cuando llegaron & entraron a la casa, volvieron a besarse, & fueron subiendo las escaleras sin separarse. Cuando entraron a la habitación de Victoria, se separaron & Camilo se fué quitando la ruana & la camisa, al igual que Victoria fué quitándose su blusa.

Ambos fueron retrocediendo hasta llegar a la cama, Camilo tomó a Victoria & la recostó con cuidado, quedando él encima de ella.

Camilo se acercó & comenzó a besar el cuello de la castaña, sacándole varios jadeos. Comenzó a jugar con el borde de la falda de Victoria, hasta que comenzó a bajarla con todo & su ropa interior, para después quitarse él su pantalón.

Se acomodó entre las piernas de Victoria & comenzó a entrar, lentamente con cuidado de no lastimarla. Cuando entró completamente, esperó unos segundos antes de comenzar a moverse, dando embestidas suaves, que con el paso del tiempo fueron aumentando la velocidad.

Ambos disfrutaban el momento, Victoria arañaba la espalda de Camilo, & el besaba ocasionalmente el cuello de la castaña, dejando algunas marcas.

Al día siguiente, Victoria despertó, & se dió cuenta que ya era de día, & que Camilo seguía ahí. Pronto recordó que ya casi era hora del desayuno en la casa Madrigal. Entró en pánico & despertó a Camilo.

- Camilo! - dijo moviéndolo para que despertara.

- ¿Ah? ¿Qué pasa? - habló tallándose los ojos.

- Pasa que nos quedamos dormidos, & ya va a ser hora del desayuno en tu casa - respondió & Camilo reaccionó.

- Ay no, tengo que irme! - soltó Camilo levantándose & comenzando a vestirse.

Cuando terminaron de vestirse, ambos bajaron & Camilo le dió un beso a Victoria antes de salir corriendo para llegar antes de que todos despertaran.

Cuando llegó a casita, entró sigilosamente, & se dirigió a su cuarto para cambiarse antes de que lo llamaran a desayunar. Cuando iba a ponerse la camisa, Carlos entró a la habitación para llamarlo.

- Camilo, es hora de - habló haciendo una pausa, viendo la espalda de Camilo - desayunar.

- Ah, si, ya iba a bajar - respondió poniéndose la camisa.

- ¿Dónde pasaste la noche? - le preguntó Carlos.

- ¿Cómo que dónde? Pues aquí, aquí vivo, ¿No? - respondió de lo más normal.

- Ajá, ¿Qué te pasó en la espalda? ¿Te peleaste con el jaguar de Antonio? - habló bromeando.

- Algo mejor hermano, pero no te lo contaré - dijo pasando a su lado, saliendo de la habitación.

- ¿Qué hiciste hermanito? ¿Te divertiste con mi Victoria? - pensó Carlos, quien sospechaba que la misma Victoria había hecho esos rasguños.

Esa noche, Carlos hizo una visita secreta a Victoria, subiendo por el árbol que estaba afuera de la ventana de la castaña, & tocando a ésta para que Victoria le abriera.

- ¿Por qué no llegas a mi casa cómo una persona normal? - le preguntó Victoria haciéndose a un lado para que el castaño pasara.

- Querida, no soy normal, puedo cambiar de forma - respondió entrando & acercándose para besar a la chica.

- Bueno, tienes razón - dijo aceptando el beso.

Victoria le pedía al universo que Carlos no notara la marca, sin embargo lo hizo, pero no reclamó nada.

- Si, se ve que Camilo & Victoria se divirtieron - pensó Carlos.

- ¿A qué viniste? - le preguntó, sin ser grosera.

- ¿Cómo que a qué vine? Pues a ver a la bella dama que vive aquí - le dijo tomándola de la cintura, pegándola a él - vine a hacerte una propuesta.

- ¿Una propuesta? ¿Cómo de que clase de propuesta? - preguntó rodeando el cuello de Carlos con sus brazos.

- Bueno, me gustaría que fueras mi novia - respondió provocando que Victoria se sorprenda.

- ¿Tu novia? - le preguntó mientras un sonrojo abarcaba sus mejillas.

- Si, ¿O prefieres seguir compartiendo cama con los dos?- mencionó acercándose a besar su cuello.

- Ah, ¿Qué? - preguntó desconcertada - ¿Cómo lo sabe? - pensó.

- La espalda de Camilo & la marca de tu cuello me lo dice todo - contestó aún besando el cuello de la castaña - entonces, ¿Aceptas?.

- Yo, amm - dijo Victoria - yo, no lo sé, ¿me darías algunos días para pensarlo? - le preguntó & Carlos se detuvo para mirarla a los ojos.

- Oh, olvidaba que no sabías si preferías a Camilo o a mí, piénsalo todo el tiempo que necesites, pero porfavor, no me dejes así - habló volteando a ver su pantalón, donde se veía una notoria erección.

- Claro que no te dejaré así, no soy tan mala - dijo & ambos retrocedieron hacia la cama.

Fué una larga noche para Victoria & Carlos.

Mundos Distintos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora