Farolitos de Amor

Celos

Los personajes no me pertenecen, son de la gran Rumiko Takahashi esto es sin fines de lucro solo diversión por y para los fans.

Esta obra se reserva en su totalidad los derechos de autor, prohibida su copia o uso.

Una historia AU (universo alterno) solo tomo prestado los personajes, no necesariamente deben apegarse a sus personalidades.

Advertencia: está clasificada para mayores de edad, puede contener violencia física o emocional así como escenas eróticas y lenguaje soez.

—O—

Akane acababa de oír una conversación muy tensa entre Ranma y Shampoo; la peli lila reclamaba y su interlocutor intentaba tristemente apaciguar los ánimos, sin embargo la menor de los Tendo quedó muy sorprendida al escuchar aquella revelación, sí, la supuesta relación de ambos era toda una farsa.

¡No debí quedarme! Se reprochaba internamente hasta que la voz de Saotome notó su presencia y luego todo su ser estaba frente a ella acorralándola por completo.

—Esto es incómodo —musitó ella muy bajito.

—¿Por qué?

—Porque acabas de discutir con tu novia y yo no debería...

—No, ella no es mi novia Akane —aseguró tajante— En realidad lo que te incomoda es mi sola presencia ¿verdad? —agregó.

—Dame espacio —pidió posando sus dos manos sobre el pecho de este con la clara intención de poner distancia entre ambos.

Ranma retrocedió dos pasos sin dejar de observarla...

—¿Puedo preguntarte algo? —mencionó el azabache.

—Solo dilo —replicó un poco impaciente.

—Es posible que... —la veía dubitativo —todo este tiempo fuiste muy fría conmigo porque estaba ¿con Shampoo? —la conclusión absurda de Ranma la puso de mal humor.

—Por supuesto que no, ¿te crees muy importante acaso? —cuestionó frunciendo el ceño.

—No lo digo con esa intención —respondió el chico negando enérgico con sus manos.

—Escúchame bien Ranma Saotome yo no soy parte de tu fan club ¿te quedó claro? —Aseveró Akane con las manos en la cintura —tú y yo no somos nada más que un par de compañeros, ni siquiera antes fuimos amigos mucho menos ahora —aseguró.

—¿Cómo que no lo fuimos?

—Déjate de bromas de mal gusto, solo te fui útil porque eras el nuevo y ahora solo eres amable porque tu madre te lo exige pero no lo necesito, ¡no te necesito! —chilló muy ofendida y con deseos de gritarle lo más alto posible.

—Akane no te alteres, ya veo que me precipité... pensé que te agradaba —respondió cabizbajo.

—¿Por qué eres así? —preguntó ella muy contrariada, Ranma alzó la vista sin entenderla.

—¿A qué te refieres?

—¡A eso! A veces eres muy fanfarrón y te llenas la boca sacando conclusiones estúpidas y otras te comportas muy empático, no logro reconocer al real...

—Solo soy yo Akane, el mismo de siempre ¿por qué no puedes darme una oportunidad de ser amigos, de poder entenderte?

—No, no lo eres. Las personas cambian Ranma, ni tú ni yo somos los mismos de hace cuatro años atrás, eso quedó en el pasado.

Y con esa última oración la chica se giró para irse, no obstante Ranma la tomó por la muñeca deteniéndola...

—¿Por qué no podría entenderte? ¡Al menos dame una razón! —le reclamó con urgencia.