03/12/19
Ya eran las 18 de la tarde y Taehyung se encontraba con su traje blanco, algunos aretes colgando en su oreja, sus labios portaban un brillo labial de color rosa, se observó en el espejo sintiéndose extraño.
Una mueca apareció en su rostro. Solo suspiró y volvió a sentarse en su cama, recuerdos absurdos de su adolescencia empezaron a invadirlo y justo cuando no pensaba que se sentiría peor recordó que Jungkook y ella estarían ahí.
mientras tomaba aire, decidió recostarse en su cama. Agarró su celular lo puso en silencio. Cerró sus ojos quedando dormido de nuevo, soñando con una vida mucho más agradable.
El ruido que provenía fuera de su casa lo despertó, pasó sus manos por su rostro para estar algo lúcido, o al menos, lucir lúcido. Bajó las escaleras de manera rápida y no le importó como es que se veía. Abrió la puerta principal encontrándose con Yoongi. ¿Yoongi? el castaño se sorprendió y saludó.
— ¡Yoonie! —sonrió y abrazó al chico pálido.
— Tae —miró a su menor y sus ojos brillaron con admiración— Estás muy lindo, niño.
— Gracias, Yoongi hyung ¿Puedo casarme contigo? Acepta, por favor. Llevo insistiendo desde hace diez años.
—el mencionado arrugó su nariz en muestra de desacuerdo, tomó la mano de Tae y salieron en dirección al auto del pálido.
...
En la universidad, las luces, globos y telas en la entrada deslumbraban, Taehyung admiraba todo con detalle volviéndose a sentir nervioso. Ya sabes, ese revoltijo de sensaciones incómodas que están en la boca del estómago, o al menos, se siente así.
En aquel salón todo se veía de maravilla, las mesas distribuidas correctamente, el escenario, absolutamente todo contrastaba a la perfección. Se sentó en una mesa del medio junto con Yoongi, ambos charlaban mientras sus oídos eran molestados por la canción que sonaba de fondo.
Todo estaba bien hasta que Jungkook ingresó junto con su pareja, su mente se detuvo y solo podía contemplar a los jóvenes que habían ingresado.
Varios pensamientos y recuerdos vagos lo hicieron sentirse agobiado, Jungkook y él... No tenía tiempo para eso, así que decidió irse de ahí e ir al patio, salió con lentitud y, una vez estuvo afuera observó la brillante luna que iluminaba el cielo.
Lágrimas empezaron a deslizarse por su rostro, sin notarlo, el llanto silencioso lo invadió y aunque le sonreía a la luna, su tristeza era reflejada en sus ojos.Y aunque mi corazón dolía, seguía esperando por ti.
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ᵏᵗ Desearía ser...
Fanfiction𝓓. En las novelas juveniles, los mejores amigos siempre terminaban en una relación amorosa con un final feliz y pateticamente romántico. Deseaba que nuestra historia tenga un final pateticamente romántico... Pero, por ...