Los días han transcurrido con rapidez al igual que la llegada de mamá, si soy honesta me alegra un poco volverla a ver, se que me ha hecho demasiado daño pero me acostumbré a estar con ella.
Papá decidió ir a recogerla al aeropuerto mientras Sophia y yo esperamos en la casa. Sophia no estaba para nada contenta ante la visita de mamá.
— ¿Puedo preguntar algo? —
— Ya lo estás haciendo, pero entiendo tu punto — se dejó caer en el sofá —
— ¿Cuándo les dirás sobre tu embarazo? — ella rodó los ojos —
— No lo sé — me miró de mala manera — y no necesito que siempre me lo estés recordando —
— Solo no quiero que se enteren por alguien más —
— Lo sé, pienso eso día y noche, ya estoy bastante abrumada para que me lo recalques a cada rato —
— Lo siento — me senté junto a ella — cuando era niña, pensaba que nuestra relación seguiría siendo igual — sonríe al recordar lo cuanto nos divertíamos —que siempre nos apoyaríamos, siempre estaríamos juntas y que siempre íbamos a reír hasta llegar al punto de ya no poder respirar —
— Pues no fue así —
— Lo sé, y no sabes cuánto daría para que fuese así — la miré con una sonrisa de tristeza —
— Se que estoy siendo muy mala contigo, y que te he tratado de una manera que no la mereces, es solo que no estoy en un buen momento —
— Está bien, a pesar de todo siempre estaré junto a ti — nos sonreímos — y ahora que mamá estará aquí, necesitamos estar más unidas —
— Así será —
Escuchamos un auto estacionarse afuera de la casa y nos páramos enseguida.
Segundos después la puerta se abrió y pude ver a papá con una enorme maleta color negra, segundos después entro mamá, con su cabello castaño muy bien planchado, llevaba ropa cómoda y junto a ella otra maleta mediana.
Sophia y yo nos miramos sin saber que decir o hacer, simplemente seguimos guardando silencio.
— ¿No piensan saludar? — habló papá con una voz firmé —
Al igual que yo, Sophia también suspiró con irritación. Ella y yo tuvimos una guerra de miradas para ver quien saludaba primero, como si con las miradas habláramos. Yo tuve que pasar primero.
Al estar al frente de mamá no supe que hacer, simplemente la abracé. Aquel abrazo no fue correspondido.
— No pienses que yo te salude — habló Sophia enojada —
— ¿porqué?, No he dicho ninguna palabra con la cual te “lastime” — sonrió falsamente — hasta ahora —
— Eres una mal agradecida, a pesar de todo lo malo que nos has causado, Kaylee te sigue respetando y tú — se acercó a ella — la desprecias, como siempre lo has hecho —
— Ya es suficiente Sophia — alzó la voz mi papá —
— No, no es suficiente — no quitó su mirada de mi mamá — ¿Porqué no lo admites? —
— ¿Qué quieres que admita? — preguntó mi madre sin importancia —
Sophia me miró para después volver a mirar a mi madre — ¿Porqué no admites que te daba vergüenza que Kaylee fuera tu hija solo por no tener amigos en aquel tiempo? —
Mi mirada fue directo hacia mi madre la cual se encontraba fulminando con la mirada a Sophia.
No sé como explicar lo que siento ahora mismo, enojo, tristeza, decepción, son demasiados sentimientos que tengo ahora mismo que no se que pensar o decir.
Mi madre miró con furia a Sophia, y lo único que pude ver ya que todo transcurrió tan rápido, fue ver el rostro de Sophia en otra dirección, mi mamá había abofeteado a Sophia.
— ¿Qué carajos te pasa Rachel? — preguntó mi padre furioso —
— Podré ser una mala madre, podré ser la persona por la cual ustedes han sufrido bastante — señaló a Sophia — pero nunca, escucha muy bien Sophia, nunca las negaría — recargó su dedo en el pecho de Sophia — jamás negaría que ustedes son mis hijas —
Un gran alivio salió de mi cuerpo. Pero algo andaba mal, ¿Porqué Sophia dijo aquello? ¿Sophia está diciendo la verdad?.
Mis pensamientos se esfumaron cuando escuché que mi padre me hablaba.
— Kaylee —
— ¿Si? —
— Lleva a tu madre a la habitación de invitados — miraba a Sophia amenazante —
Yo asentí y me dirigí hacía las escaleras, mi madre iba detrás mío.
Al llegar a la habitación las dos guardamos silencio . Ella posó su maleta en la cama y empezó a desempacar, yo seguía aún sin decir nada y no me movía para nada.
— Subiré tu otra maleta — dije en voz baja —
Ella no respondió ni siquiera me volteó a ver. Iba a salir de la habitación pero escuché que pronunciaba mi nombre.
— Kaylee — su voz era distinta, no era la típica voz firmé, ahora era ¿Tranquila? —
— ¿Si? —
— Lo que dijo tu hermana — hizo contacto visual conmigo — es mentira, y no entiendo el porque lo ha hecho — desvío su mirada — jamás te negaría —
No supe que decir así que solo asentí lentamente. Ella continuó desempacando, y yo me di media vuelta para ir por la maleta, pero paré en seco cuando vi a mi padre con aquella maleta. Me hice a un lado para que el entrara.
— ¿Rachel? — habló mi padre. Ella solo hizo un gesto con su cabeza — siento lo que dijo Sophia —
— Está bien, ella sigue enojada por todo el daño que le hice, y dudo que algún día me perdone —
Mi padre y yo hicimos contando visual después de escuchar aquello, los dos sabíamos perfectamente que mi madre estaba muy distinta.
— Tengo algunas cosas que hacer — hablé — estaré en mi habitación por si necesitan algo — dije para después salir de la habitación —
Caminé por el pasillo hasta llegar a mi habitación, me adentre y pude ver a Sophia acostada en mi cama viendo el techo muy concentrada.
— ¿Le creerás? — preguntó ella aún viendo el techo —
Me acosté a su lado y respondí — tú y yo siempre hemos estado juntas y nos hemos contado la verdad — la miré — ¿Porqué creerle a alguien que me ha hecho daño y que incluso ya me ha mentido un par de veces? —
Ella sonrió y me tomó de la mano — nunca te lo digo con sinceridad pero te quiero demasiado Kaylee, eres mi única hermana y no se que haría sin ti —
— Siempre estaremos juntas —
Ella sonrió y soltó mi mano. Me levanté y fui directo hacia mi escritorio, prendí mi computadora y empecé hacer algunos deberes de la escuela que tenía pendientes.
Fruncí el ceño cuando vi que Sophia salía de mi habitación corriendo, al momento no hice nada solamente me quedé viendo la puerta de madera confundida, pero cuando reaccioné también salí de mi habitación a toda velocidad.
¿Y si se siente mal por su embarazo?, ¿Y día ahora mismo está vomitando? ¿Qué tal si le pasa algo a su bebé?, Esas y más preguntas de preocupación resonaban en mi mente.
Entré a su habitación sin tocar, recorrí toda su habitación con mi mirada y me detuve cuando la vi sentada frente a su escritorio hablando por videollamada con un chico de cabello castaño. No pude ver más de su apariencia ya que Sophia tomó su teléfono y lo apagó rápidamente.
Ella caminó hacia mi con rapidez, con empujones me sacó de su habitación.
— ¿Qué quieres? — me preguntó furiosa —
— Solo quería ver si estabas bien —
— Estoy bien, y nunca vuelvas a entrar a mi cuarto sin tocar, ¿Entendiste? — yo asentí para después marcharme —
Al llegar a mi habitación mi madre se encontraba viendo los libros que tenía en aquella repisa color blanca. Ella no me escuchó llegar, así que me acerque a ella.
— Aún sigo recordando tu sonrisa y el brillo que tomaban tus ojos cuando entrabas a una librería —
— ¿Puedo preguntar algo? — ella hizo un gesto con su cabeza — ¿Porqué actúas así? —
— ¿De qué hablas? — me miró confundida —
— Porque actúas como si, sintieras culpa —
— No te entiendo —
— Estás actuando como si estuvieras arrepentida de todo el daño que… — me interrumpió —
— Porque lo estoy —
Entrecerré mis ojos y negué con la cabeza — nunca te arrepentirás de eso —
— ¿Y cómo estás tan segura? —
— Porque ya has fingido muchas veces con estar arrepentida, y jamás los has estado — caminé hacia mi escritorio — ¿Porqué lo estarías ahora? —
— Porque las extraño —
— Como si eso fuera real — me senté frente al escritorio y volví a ser mis deberes — ¿No crees que ya es un poco tarde para venir a pedir perdón? —
— ¿ Y qué quieres que haga?, Tú abuela me rogó para que nosotras tres tuviéramos una mejor relación —
Cuando escuché aquellas palabras me quedé totalmente quieta, a decir verdad no me afectaron en lo absoluto, ya estaba acostumbrada a que mi madre no hiciera nada bueno por nosotras. Respiré hondo y giré a su dirección.
— ¿Deberían de afectarme tus palabras? — caminé hacia ella — yo creo que no, ya estoy acostumbrada a eso — ella me miró sin decir ni una palabra — ¿Y porqué viniste, si no querías? —
— Ya te dije, tú abuela me lo rogó —
— Has estado fingiendo desde que llegaste aquí, ¿No es así? —
— Si — sonrió divertida —
— ¿Entonces, si me negaste? — sabía que me dolería bastante si su respuesta fuera “si” sin en cambio, lo hice —
— ¿A qué viene esto? —
— Si has estado fingiendo, entonces fingiste lo de hace rato —
— Yo… — tragó grueso —
— ¿Lo hiciste? —
— Esto es diferente kaylee — sus ojos se cristalizaron —
— ¿Si o no? —
— Si, pero no sabes lo mucho que me arrepiento — pequeñas lágrimas se hicieron presentes en su rostro —
Dejé de escucharla y me centré en lo que sentía ahora mismo. En un segundo salían demasiadas lágrimas de mis ojos, talvez mi madre me haya hecho mucho daño, pero esto era demasiado.
— ¿Porqué lo hiciste? — pregunté con un hilo de voz —
— Kaylee, olvidemos esto — me tomó de los hombros, pero yo me quité al instante —
— ¿Quieres que olvidé esto? — alcé mi voz — mamá me negaste, ¿Qué carajos te pasa por la mente? —
Mi respiración era un total caos, los latidos de mi corazón eran tan rápidos que hasta podía escuchar el sonido que transmitían, mis manos comenzaron a temblar con descontrol.
— ¿Acaso no me quieres? — grité —
— Kaylee por favor cálmate — habló con su voz entre cortada —
— ¿Acaso no era la hija que tú deseabas? — ella iba a hablar pero la interrumpí — tú no querías una hija como Sophia o como yo, tú querías una hija como tú — me sequé las lágrimas de mi rostro — jamás nos quisiste por nuestra forma de ser, ¿Crees que ya olvidé la vez en la que le dijiste a Sophia que era un maldito hombre por no vestirse con faldas?, y qué coincidencia que después de haberle dicho eso ella comenzó a vestirse con vestidos y faldas — respiré hondo — ¡ella tenía doce años!, ¡Doce años! —
— Lo único que yo quería era que tú hermana mayor te enseñara a ser femenina —
— Pero ella no quería vestirse así, y tú la obligaste, ¿Qué clase de madre hace eso? —
— La que quiere lo mejor para sus hijas —
— ¿Lo mejor?, ¿Estás hablando en serio? — me alejé de ella — vete de mi habitación —
Ella me dedicó una mirada de enfado y salió de mi habitación.
Los latidos de mi corazón aún eran rápidos, mis manos seguían temblando y mi respiración seguía siendo un total desastre.
Me tumbé en mi cama y traté de tranquilizarme, sin embargo no puede. Más lágrimas de mis ojos salían sin control, entre más lloraba los latidos de mis corazón eran más rápido.
Tenía miedo, tenía miedo a que algo me pasara ahora mismo, era una sensación muy desagradable. Lo único que deseaba en ése momento era dejar de llorar, ya que eso hacia a qué mi respiración estuviera fuera de control, al igual que mis manos temblando y los latidos de mi corazón.
Después de tranquilizarme lo único que hice fue dormir, el estar llorando un gran rato hizo que me cansara.
— ¿Tú madre está en tu casa? — habló Lauren por el teléfono —
— Si — suspiré recordando lo que había sentido hace un par de horas — tengo miedo, Lauren —
— ¿Porqué? —
— Ella suele hacernos sentir mal todo el tiempo, mi hermana no está pasando por un gran momento, temo a que haga algo malo —
— Te entiendo, pero pase lo que pase yo estaría ahí, ¿Está bien?, Talvez no sea muy buena dando consejos o ese tipo de cosas, pero puedes desahogarte conmigo cuando quieras —
— Gracias — sonreí —
— Entonces, ¿Qué pasó con Jake? —
— Somos amigos — me encogí de hombros —
— ¿No estaban enojados? —
— Lo solucionamos —
— ¿Sabes?, Presiento qué terminaran juntos —
— Talvez — reí al igual que ella — ¿qué ha pasado con el chico que conociste? —
Ella río y empezó a contarme lo del aquel chico con emoción. Lauren con tan solo escucharla reír logra hacer que olvidé de mis problemas, aunque sea por un pequeño instante.Valery Heales 🦋.
![](https://img.wattpad.com/cover/278401931-288-k41518.jpg)
ESTÁS LEYENDO
¿Promesa Cumplida? - (Cancelada Temporalmente)
Teen FictionLa vida está llena de promesas cumplidas y promesas incumplidas. Dependiendo el tipo de promesa las personas sabrán si la cumplen o no. Kaylee,Jake y Sophia hicieron promesas pero, ¿Las cumplirán? Valery Heales.