Segunda Oportunidad del Villano Escoria

El Hermano del Villano

—Bueno, Shen Li era la hermana de Mingyu. La familia la repudiaba desde antes de que nos casáramos —Xu Linqin explicó mientras conducía de regreso a casa—. Te pareces mucho a nuestro A-Yuan. Estoy segura de que ustedes dos serán los mejores de los amigos.

Shen Jiu apenas le prestaba atención mientras miraba al bebé en el porta bebés a su lado. Tenía ojos grandes, redondos y negros. Alcanzó a ver un brillo en sus ojos cuando le devolvió la mirada.

—Creo que le agradas.

Shen Jiu parpadeó y miró al otro chico a su lado, Shen Yueqi.

Al principio su aterradora su apariencia idéntica a Yue Qingyuan. Sin embargo, las diferencias eran notables. Este joven tenía el cabello castaño claro como Xu Liqin, mientras que poseía rasgos afilados como Shen Mingyu y Yue Qingyuan. Ojos verdes suaves como Shen Mingyu, en vezde  ojos marrones como Yue Qingyuan. A diferencia de Yue Qingyuan, que siempre se veía amable, Shen Yueqi se mostraba arrogante. De hecho, parecía una persona amable por lo que podía ver, pero su rostro naturalmente afilado lo hacía parecer alguien a quien no se le podía acercar.

—¿Por qué?

—A Ruoulan le gusta mirar a la gente linda. 

Shen Jiu se sonrojó ante esto antes de mirar hacia otro lado. Shen Yueqi se rio de esto, más fuerte de lo que solía hacerlo Yue Qingyuan. Shen Jiu se negaba a entretener más al adolescente mientras miraba a Shen Roulan, quien parpadeó inocentemente hacia él.

—Llegamos. 

Shen Jiu miró hacia arriba y casi se quedó boquiabierto ante la vista que tenía delante. El barrio de los ricos.

Docenas de casas alineadas con un espacio considerable a su alrededor. Hermosos patios con frentes exageradamente detallados. Puertas casi tan altas como las propias casas.

—Este va a ser tu nuevo hogar, A-Jiu —dijo Xu Liqin, sacando a Shen Roulan del auto tan pronto como salió.

¿Por cuánto tiempo?

No expresó la pregunta en voz alta mientras se echaba la mochila al hombro. El lugar estaba al menos de treinta a cuarenta minutos de la biblioteca y su escuela.

—Vamos, Jiu'er —dijo Shen Yueqi mientras agarraba su manga en lugar de su mano para tirar de él—. Shen Yuan nos está esperando.

Shen Jiu hizo una mueca ante esto, pero no pudo encontrar la forma de liberar su brazo. El contacto con Shen Yueqi... no estuvo tan mal.

En el momento en que entraron en la mansión, Shen Jiu se quedó boquiabierto ante la bienvenida. Las criadas y los mayordomos les dieron la bienvenida a todos cuando pisaron la casa. Era casi como una de esas novelas de fantasía que leyó una vez cuando necesitaba un descanso de sus estudios, excepto que no había ninguna mierda de "maestro", "amante" o "joven maestro". Todos parecían genuinamente felices de ver a esta familia de personas ricas.

—A-Yue, ¿por qué no llevas a A-Jiu a su habitación? —dijo Shen Mingyu, sonriendo suavemente mientras sacaba a Shen Roulan de su portabebé—. Tu madre y yo iremos a ver si Shen Yuan está preparado para conocer a tu nuevo hermano hoy.

—Sí, baba. Vamos, Jiu'er.

Shen Yueqi lo llevó arriba y a través de la casa, contándole sobre algunas de las habitaciones por las que pasaban hasta que terminaron en un pasillo que había ocupado su habitación.