Kiss Me Prince

You Belong To Me

“No puedes escapar…”
“… y al final, verás…”
“… viviremos en armonía”
"… me perteneces"

La madre de Jake estaba orgullosa de que su hijo se convirtiera en parte de la corte porque eso le daba estatus y privilegios de la casta uno aunque no fuera un noble y todos en Derinsberk especulaban grandes cambios en en reino gracias al Omega de origen humilde que había ascendido en la escala social.

Jaeyoon recorría el enorme palacio al lado de Heeseung, esa enorme
construcción tenía más de quinientas habitaciones, amplios jardines, un vivero, un aviario y muchísimas cosas más, ni siquiera en un solo día era posible recorrer todo el extenso lugar.

— Y bien ¿Que te parece el palacio real? —Preguntó Heeseung cuando ambos se sentaron en un columpio a descansar del recorrido.

— Es demasiado brillante y sorprendente, tiene tantas cosas que no entiendo porque en vacaciones nunca quisiste regresar —exclamó Jaeyoon.

— Solo son habitaciones y lugares vacíos, quizá al principio te parezca algo genial este lugar pero con el tiempo el ambiente y las personas se vuelven algo insoportable — se quejó el alfa y terminó tomando de la mano a su novio.

— Bueno creo que tendré que acostumbrarme entonces.

— No será tan malo contigo aquí, pero aún así sí alguien te dice algo hiriente
tienes que decírmelo, yo haré que pague por hacerte daño.

Jaeyoon y Heeseung juntaron sus frentes al punto que sus narices se tocaban, luego el alfa le dió un beso en la comisura de los labios a su Omega y el recorrido acabó cuando le mostró su habitación que también funcionaba como despacho.

— Sé que no es la habitación tan grande o bonita como la que tenías en la academia pero solo espera hasta que nuestra relación se haga pública, aún así vendré a verte cuando me desocupe.

Jaeyoon le dio las gracias a su novio por el recorrido a pesar de que estaba
demasiado ocupado por sus responsabilidades reales, pero Heeseung le dijo que era necesario porque el palacio real era realmente un laberinto y cualquiera se perdería.

Jaeyoon se recostó en la cama y estaba a punto de cerrar los ojos y dormirse,
pero escuchó un par de golpes en la puerta así que se levantó a abrir.

— Su majestad ¿Que hace aquí? — le preguntó el omega al alfa con olor a
chocolate.

La verdad no tenía ganas de ver a Sunghoon en su primer día en palacio pero era inevitable, así que terminó dejándolo entrar.

— No me vuelvas a hablar formal Jake, me da escalofríos cuando lo haces — se quejó Sunghoon.

— Acostúmbrate, es el protocolo ¿Entonces que te trae a mi habitación? Tengo sueño así que se breve por favor.

— Primero que nada eres mío así que puedo verte cada vez que quiera, también te traje una carta de tu madre y vengo a invitarte personalmente al baile de máscaras en mi honor.

Jaeyoon rodó los ojos al escuchar las palabras posesivas de Sunghoon, puso la carta sobre el escritorio para leerla después con calma y le abrió la puerta al alfa para que se fuera.

— Está bien, gracias por invitarme ahí estaré.

Sunghoon esbozó una sonrisa ladina, tomó del mentón a Jaeyoon y le dio un beso.

— No me importa en lo más mínimo si también eres de Heeseung, así que no
vuelvas a llamarme su majestad o intentes evitarme en la fiesta.

Jaeyoon dejó salir un suspiro cansado. Sunghoon cada día estaba más encaprichado con él y no pensaba terminar con su acuerdo por nada del mundo. Entre la espada y la pared el
omega quería acabar con todo pero no quería ver a nadie morir así que después de cerrar la puerta de la habitación terminó sentándose en la cama, cerró los ojos y pensó.