Suffocated || Saida

Séptimo

Nuevo día, a madrugar de nuevo.

Hoy no es feriado, así que no zafo de tener que ir a la escuela como todos los adolescentes de mi edad, mi fiel alarma como siempre, me despierta todas las mañanas a las 6 en punto.

Al menos me encuentro con el desayuno hecho, por lo general tostadas y una taza de leche con chocolate, tengo que agradecer que mi madre se levanta antes que yo, y cuento con eso.

También de que me lleva a la escuela en auto, me ahorro mucho tiempo, y energía.

La noche de ayer fue extraña, luego de que Sana me dejara en casa, no pude parar de pensar, tenía muchas preguntas sin responder, a las que les inventé alguna respuesta que me gustara.

¿Qué vio en mí? ¿Por qué le gusto tanto? ¿Hace cuánto que se enamoró?

Eso, ¿Qué es el amor? Acaso estaré enamorada yo también, eso no paró de dar vueltas en mi cabeza, cómo sé si siento amor por alguien, se demuestra, se dice, qué se hace.

Estuve pensando mucho en lo que convendría tener una pareja, es mi primera relación amorosa se podría decir, solo salimos dos veces, pero por su lado ya sé que hay más que solo eso, y que busca algo serio, de eso me quedo tranquila.

Pero, ¿Yo quiero?

¿En las relaciones siempre hay alguien que ama más que el otro?

En fin, todo este cuestionamiento no me dejó dormir bien, por esa razón me lavé bien la cara, con agua fría, para despabilarme.

Los pasillos de la escuela están tan monótonos como siempre, la mayoría con cara de muertos y con ganas de tirarse bajo el primer auto que pase, pensando en cosas que al resto no se les ocurriría.

El cielo hoy está nublado, con ganas de expulsar agua de las nubes, ojalá, la lluvia siempre viene bien, cambia las vibras en el salón, con ella siempre viene la tranquilidad.

—Hola. — me saludó Chae apenas me senté en nuestro banco.

—Hola Chaeng, ¿Cómo dormiste?

—Bien por suerte, me traje los auriculares para escuchar música.

—No puedes escuchar música en clase.

—Claro que sí, tenemos filosofía y el profesor nunca se calla, así que no se dará cuenta porque además los voy a tapar con mi pelo.

—Ehh, okey...

Qué audaz.

—Mmm con las chicas queremos saber qué pasó ayer en tu cita con Sana.

—Sí, ya me lo puedo imaginar, en el recreo les cuento.

—Ya me armé varias teorías de lo que pudo haber pasado.

—¿Varias teorías?

—Sí, discutimos las posibilidades.

Mmm rari, pero bueno así son, después me dirán cuáles eran.

Ya no pudimos hablar más debido a que llegó el profesor, y como Chae dijo, no se calló en toda la clase.

[...]

—Dinos los detalles. — ordenó Jihyo mientras nos sentábamos en rondita para que les pudiera contar los hechos.

—Sí, y resume. — agregó Mina.

No sé pueden resumir los detalles, pero, en fin, comencé a contarles a la par que veía sus diferentes facciones y el cambio de sus caras cada vez que escuchaban una nueva oración.

—¿En serio viajó a un lugar inhóspito?

—Inhóspito será para ti. — Mina no sabe nada.

—Pfff claro que no, a mí me encantaría recorrer Marruecos, pero lo digo de un punto de vista vulgar, ya que su grupo de amigos me parece eso, muy básico y por lo tanto me cuesta creer que haya viajado a un lugar como ese.