Ya no eres mío. El final de nuestra historia. (Terminada)

Pt 4

El tipo era un poco mas bajo que Miguel, tenia el cabello castaño y rizado, moreno de ojos café y unas pequeñas pecas se extendían por sus mejillas haciendo un puente en su nariz. 

Vestía una playera de mangas largas blanca y pantalones  cafés también bastante ajustados. Sus zapatos eran una especie de sandalias de cuero con patrones de bordados bastante elaborados y encima de su camisa una chaqueta naranja con bordados de camaleón muy llamativos. 

Camilo extendió su mano en un amigable saludo hacia Hiro. El pelinegro miro al castaño y luego a Miguel. Con trabajos extendió su mano y enseguida Camilo la atrapo estrechándola con fuerza. 

-Es Bacano conocer al amigo de Miguel, ¿de donde eres? no te vez de por aquí Bizcocho- bromeo descolocando a Hiro que de inmediato se soltó del fuerte agarre de Camilo. 

-Eh...No, I'm not from here. I'm from San Fransokyo- hablo mirando al castaño que de inmediato tomo asiento y junto a el Miguel. 

-Orale, Migue me ha hablo de el en algunas ocasiones- hablo Camilo entusiasmado con Hiro que poco a poco se alejaba del "amigo" de Miguel.

-jajaja disculpa a este wey.- Marco intervino ahora invitándole una cerveza a Camilo que tomo con gusto. - se chivea y se le olvida que SI HABLA español- le advirtió Marco a Hiro. 

-ah no te preocupes Marco, también lo hablo no soy tan Maluco hombre- Miro de nuevo a Hiro que no quitaba la mirada del castaño. - Migue has told me that he has visited San Fransokyo. is beautiful there?- 

Su pronunciación era casi perfecta, Hiro lo entendió y Marco ensancho una sonrisa hacia Hiro que solo trataba de procesar todo lo que estaba pasando a su alrededor. 

¿Quién carajos era este tipo? ¿Qué era de Miguel? ¿por que tenían esas confianzas? ¿y por que mierdas estaba ahí sentado con esa sonrisa de idiota hablándole como si fueran amigos?

-claro. Si lo ha hecho- Hiro apretó de nuevo sus manos en puños tratando de relajarse de nuevo pero su sangre estaba hirviendo a mas no poder. 

-Hiro, Camilo es novio de aquí mi estimado Rivera- llamo Marco la atención del pelinegro resolviendo de un jalón la duda de Hiro. 

-Marco¡¡- llamo Miguel con las mejillas rojas y riendo como un adolescente enamorado. 

Camilo lo abrazo por los hombros recargando su cabeza en el hombro de Miguel justo como cuando Hiro lo había hecho. -jajaja estamos re cuadrados bonito- y acto seguido beso la mejilla de Miguel que gustoso acepto el gesto. 

Hiro sabia que era aquello que sentía casi explotar en sus adentros, eran todas y cada una de sus esperanzas que tenia con el mexicano que en un segundo se habían acabado en el momento en que ese chico puso un pie en el bar, no. Desde el instante en que vio los ojos de Miguel al llamar su nombre y correr a su encuentro. 

-Hace cuanto salen?- pregunto el pelinegro a Miguel que aun rojo de sus mejillas miro a Camilo. 

-Tenemos 4 meses que empezamos algo serio.- Miguel tomo la mano de Camilo entrelazando ambos sus manos en un acto romántico. -Camilo me ayudo mucho cuando...- 

-Cuando este Guevon estaba todo achantao y no quería ni tragar un pan- Camilo miro de nuevo a Hiro pero esta vez había una especie de brillo en sus caramelos ojos. -ya no quería ni tocar la guitarra. Pero ahora me toca y canta como un ángel- 

-Oraaa par de calientes¡¡¡- los regaño Marco golpeando el hombro de Miguel. 

-JAJAJAJAJAJA no seas pulido Marco que tu y yo somos llavecita¡¡¡- bromeo Camilo y enseguida abrazo a Miguel riendo los tres latinos con alegría. 

Aquella vista le dolió a Hiro, Miguel se reía tan hermoso y no lo hacia con el. Había alguien mas a su lado que lo hacia reír y a simple vista muy feliz. 

En ese momento una canción comenzó a sonar ( aquí va la canción del enlace). Camilo miro a Miguel, casi podía sentirse el amor y el mensaje oculto que el par de enamorados se estaban diciendo. El castaño se levanto y aun sosteniendo a Miguel se encaminaron al centro de la pista junto con otras mas parejas para bailar. 

-ah vendremos en un momento- disculpo Miguel mientras Camilo se lo llevaba.

-Sin pedos wey ve a darle- Hablo Marco tomando otra vez de su cerveza y comiendo alitas. 

Solo quedaron en la mesa Marco y Hiro viendo este ultimo irse a la pareja. A Miguel siempre le había gustado bailar y cuando le enseñaba daba pisotones que terminaban en risotadas por parte de ambos, pero ahora Miguel podía bailar a gusto y al compas de la música con Camilo que también tenia buenos movimientos. 

Ambos bailaban muy pegados Miguel abrazando la cadera del castaño y Camilo abrazado al cuello del mexicano, era una tonada suave, ambos bailaban despacio mientras cantaban al oído del contrario y reían con alegría. Estaban totalmente perdidos en su propio mundo olvidándose de quienes estaban a su alrededor. 

-Cuando terminaste con Miguel- empezó Marco. - Se hundió mucho en la depresión, ya no quería hacer nada de lo que le gustaba por que todo, le recordaba a ti.- 

Hiro miro de nuevo a Marco aguantando las lagrimas con dificultad. 

-Fue entonces cuando se refugio en Camilo. Al principio le consto trabajo confiar pero, el supo ganárselo poco a poco. - Marco dirigió su mirada a la pareja que seguía bailando con lentitud. 

-Poco a poco fue saliendo de su depresión pero recaía en ocasiones y se volvía a cerrar de todos. Muchas veces tuvo que ayudar a evitar que Miguel hiciera una estupidez. Sabes a lo que me refiero- 

-Lo recuerdo. Era su amigo del que me contaba. La ultima pelea fue por que pensé que, me estaba engañando con el- 

-hujum... me acuerdo...bueno, Camilo nunca se metió entre ustedes, en ese tiempo tenia novia pero ella le puso el cuerno con un amigo suyo. Él también estaba lastimado así que ambos se apoyaron mutuamente- 

Hiro siguió en silencio mirando bailar ahora mas animada a la pareja, Miguel reía de nuevo y atraía al castaño para plantarle besos en los labios que de inmediato eran correspondidos con cariño. 

-¿Por que no te dije? por que no era yo quien debía hacerlo, este pedo es entre tu y Miguel.- 

Marco podía tener momentos de seriedad y este era uno de ellos, el también había visto a su amigo destrozado y llorando a mares en su habitación lamentándose por todo lo que no pudo hacer con Hiro. 

Hiro lo sabia, muy en su interior sabia que lastimo de muchas formas al latino y bien merecido tenia lo que estaba pasando. Sonrió con amargura y tomo una de las cervezas que tenia cerca. La bebió de un solo jalón.

-por mucho que te empedes eso no cambia el hecho que Migue siguió su vida.- Lo acompaño con otra botella y tomo también. 

-Marco...- llamo Hiro con los ojos llorosos.

-hum?- 

-a ti...jajaja... a ti te gustaba Camilo ¿verdad?- soltó de golpe y eso si que sorprendió al latino que abrió mucho los ojos. Dejo salir una risa también y desvió la mirada. Aquello fue como una especie de afirmación.

-Estas cabron pinche chino- volvió a dar un profundo trago a su cerveza. 

Y así ambos se quedaron en un silencio llorando por dentro y arrepintiéndose de todos y cada uno de sus errores que los habían llevado hasta este punto de su vida. 

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continuara.