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Narrador Omnisciente.

SeokJin descansaba en una muy mala postura apoyado contra la cama de la pequeña Sunhee, esta pequeña descansaba con total tranquilidad ya completamente arropada hasta los hombros, como a ella le gustaba.
El pequeño libro de cuentos cayó de sus manos haciéndolo despertar. Jin talló sus ojos y suspiró, su cuello dolía un poco al igual que su trasero, claro, quedarse dormido sentado en el suelo y con la cabeza colgando, vaya que le dejaría dolor, miró a su derecha viendo a la pequeña descansar, después de recoger el libro se puso de pié y fue a la sala sala a buscar su teléfono.

Llamaría a Jimin, eran cerca de las once y aún no regresaba.

Buscó al menor para marcarle en su celular pero cortó al momento que lo escuchó ingresar a la casa, guardó el aparato y se acercó a él.

— Hyung, s-sigues aquí.

— Jimin, es muy tarde, ¿dónde estabas?, Sunhee quería que llegaras para darle las buenas noches.

— Lo sé, es solo que...— no puedes decirle la verdad. — YoonGi y yo nos entretuvimos mucho. — mintió.

— ¿de verdad?— el semblante del rubio cambió a uno más tranquilo. — ¿mucho?

— ¡s-si!, claro, hablamos mucho y fue realmente divertido, pero ya es tarde, Hyung, deberías descansar, ¿si?

— bien, mañana me cuentas todo, iré con Tae. — se acercó a la puerta y la abrió. — descansa. — se despidió y salió.

Jimin solo suspiro con pesadez y se dirigió a su habitación, claro, antes pasó a ver a su hermana, todo estaba en órden así que solo iría a descansar, fuera del entretenido momento, lo que pasó después con Yoongi fue algo que lo dejó agotado mental y físicamente.

Mañana seguro y todo estaría bien.












*











— yo no lo sé, no sé porque ese sujeto nos siguió.

— ¿entonces a quién seguía?

— no lo sé, Yoongi... Yo, no sé que pudo pasar, no sé porque nos seguía, porque iba con un arma, créeme que no lo sé.

— no dije que no te creyera es solo que me preocupa, no cualquier demente está de aquí por allá con un arma persiguiendo a alguien.— el menor bajó la mirada, su labio inferior tembló al igual que sus manos. — Jimin. — suspiró cansado. — no sé quién sea ni porque nos seguía pero solo, si vuelves a salir ten cuidado, yo también lo tendré pero si a ti a quién quiere ten, mucho cuidado.









*










Había pasado alrededor de una semana desde que habían visto a aquél hombre, Jimin algunas veces tuvo que salir, al principio sintió miedo pero no vió en ningún momento a aquél sujeto extraño ni a alguien similar, probablemente se trataba de una coincidencia, una broma de muy mal gusto, durante los últimos días se habían reportado avistamientos de personas maliciosas asustando con armas de juguete, solo para robar, posiblemente Jimin y YoonGi tuvieron la mala suerte de que se les apareciera uno de esos "bromistas".

Las cosas estaban más tranquilas, de vez en cuando Jimin y Yoongi se encontraban en la entrada del edificio buscando la correspondencia o cuando iban a salir, todo iba de maravilla.

Mi Sexy Vecino. [YM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora