Romance Clandestino

Confesión

Caitlyn

Entramos al despacho de papá, nos vio con curiosidad en sus ojos, se notaba algo de emoción en sus ojos, su hija le iba presentar una novia, ojalá solo fuera eso pensé. Vi saludo cordialmente a mi padre y se sentó en una silla, yo era la que iba hablar, ella era solo mi apoyo.

-Papá, debemos hablar - dije seriamente

El asintió

Comencé a relatar la historia de mi romance, hable de cómo engañe a Jayce para tener una relación a escondidas con Vi por meses y sobre cómo iba huir para escaparme de todos. Mi padre solo me observaba con asombro y tristeza en su rostro cuando mencioné que me iría. El escuchaba atentamente.

-Jayce se entero de mis planes, el me amenazó, el no permitió que me fuera- dije

-Que fue lo que te hizo- pregunto

-El.... El... El causó el accidente de mamá- confesé

Los ojos de papá mostraron confusión, para después poco a poco mostrar furia, apretó los puños.

-Que estas diciendo- tomó mis hombros con desesperación esperando que repitiera aquellas palabras.

-Lo siento, se que debí decirte antes, pero el me dijo que si hablaba acabaría contigo y con Vi, yo me sentí acorralada- dije rápidamente

Pude sentir que sus manos temblaron.

-Por mi culpa mamá esta en coma - mis ojos derramaron unas lágrimas, por no haber ocultado todo-

Papá tiro todo lo que había en su escritorio, estaba furioso, lanzando todo a su paso, Vi se puso de pie y tomó mi mano, y me puso atrás de ella para protegerme, era obvio que mi padre había enloquecido. Después de unos minutos mi padre recobro la compostura y me observó.

-No es tu culpa, perdón- suspiro - tomaste desiciones equivocadas, pero el no tenía derecho de lastimar a nadie por venganza- me abrazo.

-Debe saber que yo desconocía todo lo que él hizo hasta hace unos días, jamás hubiera dejado a su hija sola- le dijo Vi

El asintió

-Buscare un investigador privado, algo podré hacer, el pagará por lo que hizo- salió del despacho.

-Estarás bien? - pregunto Vi

-Si, vamos te llevo al aeropuerto-

Llegamos al aeropuerto aún faltaba alrededor de hora y media para que abordará su avión, registro su equipaje, después nos sentamos a esperar.

Ella recargo su cabeza en mi hombro, estar aquí me trajo recuerdos de cuando dejé que se fuera sin mi, se que era diferente ahora, pero me invadió la tristeza. Ella debió pensar lo mismo porque tomaba mi mano con fuerza. Me puse de pie, ella me siguió fuimos al baño, y espere a que la poca gente que estuviera se fuera y cerré la puerta. Ella sonreía al entender mis intenciones.

Bese sus labios con ternura, me tomó por las caderas para subirme en la base de lavamanos, y devoró mi boca con gran deseo. Sus manos tocaban mis muslos, mis jeans eran un estorbo, la necesitaba aquí y ahora. Empezaban a tocar la puerta. Impidiendo que nuestro encuentro avanzará.

-Creo que tenemos que salir- dijo sonriendo

Nuestra respiración era entrecortada, queríamos más. Ella se apresuro abrir la puerta antes de que algún guardia viniera.
Y fuimos a la sala de espera. Ambas nerviosas y agitadas.

-No quiero irme- susurro Vi

-Esta vez es diferente, no es una despedida yo te alcanzaré, fue la promesa- dije

Los altavoces anunciaban que debía  abordar el vuelo. Ella ya tenía que irse.

Vi

Tenía miedo, miedo de volver a perderla, se que está vez era diferente, se que seguiremos juntas, pero el futuro es incierto  y eso me hacia dudar. Cuando anunciaron mi vuelo, me puse de pie, ella me acompañó para la entrada al pasillo, estábamos en silencio. Tomó mi mano y sonrió

-Estaré bien, te llamaré todos los días, hasta que estemos juntas- me abrazo

-Te amo - susurre en su oreja

-Y yo a ti, ten un buen viaje- sonrió

Camine por el pasillo entre la multitud, y gire la vista, ella aún seguía observando mi partida, me di la vuelta y camine hacia ella. Me veía sorprendida. Tomé su cuello y la bese. Ante la mirada curiosa de la multitud que pasaban a nuestro lado.

-Te estare esperando- dije

Sus ojos estaban llorosos.

-Falta poco tiempo- comentó

Me marche y aborde mi vuelo, era verdad, solo serían dos meses a lo mucho tres, pero  se sentía como si fuera una eternidad, apenas teníamos pocos días de nuestro reencuentro y nuevamente teníamos que separarnos.

Las largas horas de vuelo pasaron de forma lenta, la pase dormida la mayor parte del tiempo.

Cuando llegue a mi departamento lo primero que hice fue marcar a Caitlyn para informarle que ya había llegado. Se escuchaba tranquila, y me daba gusto que Valeria seguía acompañándola, así no estaría tanto tiempo sola.
Después de colgar, tuve que hacer la llamada que estaba postergando por mucho tiempo, mi hermana, no le había contado de mi ruptura con Grace y mucho menos que volví con Caitlyn, así que era hora de decirle.

-Ya estas en Barcelona- pregunto a través del teléfono

-Si, hace como 2 horas que llegue, como estas? - pregunte

-Bien, pronto iniciarán las clases, fueron buenas vacaciones, agradece a Grace por ese aumento salarial, aunque supongo que es un beneficio por salir con la jefa - reía

-De hecho terminamos - dije

-Que!! Porque, hacían una linda pareja - decía asombrada

-Pues yo no correspondía su sentimientos -

-No me digas que es por la tal Kiramman-

-Su nombre es Caitlyn y si, volvimos - dije

-Debes estar bromeando, estas loca, recuerdas lo que te hizo, no puedo creerlo-

-Powder, solo debes entender algo, y es que yo la amo, y eso no va cambiar, no necesito tu aprobación - conteste mal humorada

-Bien, es tu vida, tu sabes lo que haces - colgó.

El lunes por la mañana llegué a la oficina y pude observar carpetas por montones con mucho trabajo pendiente. Suspiré y me puse manos a la obra. Grace apareció en mi puerta.

-Pensé que no volverías, ya estaba buscando tu reemplazo- era evidente que estaba molesta.

-Tengo un contrato que cumplir, si no me quieres aquí puedes despedirme - conteste tranquilamente

Ella sonrió

-Claro que no, te dije que me gusta tu trabajo, yo se separar el trabajo de los asuntos personales-

-Perfecto, igual yo- conteste

-Arreglaste las cosas con ella- pregunto tímidamente

Iba ser difícil trabajar con ella, era directa y no ocultaba sus sentimientos, en otras circunstancias me hubiera fijado en ella, me daba algo de pena haber hecho que se ilusionara.

-Si, estamos juntas- conteste

Salió de mi oficina sin decir una sola palabra.

Con el pasar de los días Caitlyn y yo establecimos un horario para hablar debido a la diferencia de horario, me daba gusto escuchar que su padre estaba bien, me contó que efectivamente consiguió a un investigador para que ayudara a conseguir las pruebas que culparan a Jayce.

La extrañaba tanto, pero trataba de ocupar mi mente trabajando, asi que me ponía a hacer algunos planos, y cuando no podía dejar de pensar en ella, fantaseaba con sus besos y caricias.

Ya había pasado un mes, contaba cada día con ansias esperando que el tiempo avanzará más rápido.