Los magos de las sombras no se mezclan con los magos

Capitulo 23

Capitulo 23 Desvio egipcio

Era casi la hora de que los niños regresaran a Hogwarts y Yami estaba sentado solo en su habitación en Grimmauld Place. No exactamente por elección tampoco. De hecho, esperaba poder pasar el día con Yugi, ya que había pasado un tiempo desde que los dos habían tenido algo de tiempo para ellos mismos, pero Bakura se lo había llevado con el pretexto de su "proyecto secreto". Era el día de Seto para patrullar la escuela y los demás habían decidido aprovechar para ir a entrenar, por lo que Yami se quedó solo con sus pensamientos.

Yami dejó escapar un gruñido bajo y apretó su mano en un puño. Estaba cansado de cualquier secreto que Yugi y Bakura le estuvieran ocultando. ¡Habían estado trabajando en esto durante meses! Seguramente podrían decirle la esencia de lo que estaban trabajando. Dejó escapar un largo suspiro, pasando una mano por su cabello. Sin entrar a la fuerza en la mente de Yugi, lo cual se negó a hacer, no había forma de saber qué estaba pasando, así que decidió ser paciente.

Echó un vistazo a la cama donde él y Yugi tenían cada uno una pequeña bolsa de ropa, debatiendo hacer un viaje rápido a Egipto para dejar sus regalos de Navidad. Yami no pudo evitar sonreír al ver los suéteres voluminosos que yacían encima de sus cosas. Había sido un inesperado regalo de Navidad de Molly Weasley, pero al menos era algo práctico. A Ryou le había gustado instantáneamente, diciendo que había pasado un tiempo desde que tenía algo hecho en casa y felizmente lo usaba todo el día. Incluso había logrado culpar a Bakura para que usara el suyo. Yami apenas pudo contener una sonrisa cuando le dijo a Bakura que él era quien tenía que decirle a Potter sobre su nueva clase. Aunque se rió de la desgracia del ladrón, frunció el ceño al hombre que los había llevado hasta ese punto.

Si bien Dumbledore no fue tan inteligente con sus manipulaciones como probablemente pensó que era, fue eficiente. Los magos siempre podían ver a través de lo que el hombre estaba tratando de hacer, pero se frustraron cuando encontraron que el mejor curso de acción era estar de acuerdo con él. El hombre había estado compartiendo con el espía sus preocupaciones sobre el aparente vínculo de Potter con Voldemort y cómo le preocupaba que Voldemort intentara aprovecharse de ello para atraer al chico hacia él. Los magos tuvieron que reconocer eso como un punto válido, pero tenían curiosidad por saber qué iba a hacer el director al respecto. Para su sorpresa, le había pedido al hombre que el chico odiaba que le enseñara esta habilidad.

Yami estaba seguro de que Dumbledore esperaba que los magos intervinieran y tomaran el lugar del espía como maestro de Potter, pero el día que sucedió fue el día en que le dio su trono a Bakura. Desafortunadamente, los magos aún se vieron obligados a jugar al 'mensajero' ya que la posición de Snape se habría visto comprometida si se hubiera ido en ese momento. Por mucho que les desagradaran los magos, los magos tuvieron que aceptar que eso sería contraproducente para sus propios planes.

El sonido de las disputas sacó a Yami de sus pensamientos. Era obvio para Yami que eran Potter y sus amigos, pero las voces se apagaron. Se acercó a la puerta cerrada y la abrió para permitirle escuchar mejor.

"¡Es un ser vivo, Ron!" Granger decía acaloradamente: "¡Los elfos domésticos no deberían ser esclavizados por los magos!"

"¿Te meterás en la cabeza que a los elfos domésticos les gusta hacer las tareas del hogar?" Weasley respondió.

"¡Tonterías! ¡Solo piensan que les gusta porque no saben nada mejor! Quiero decir, mira a Dobby -"

"No puedes usar a Dobby como evidencia de todo, Hermione", intervino Potter con calma, "Dobby simplemente no estaba contento con los Malfoy. Prácticamente me juró".

"¿Ver?" Weasley dijo victorioso.

"¡Él todavía disfruta de ser libre!" Granger argumentó: "¿Por qué no deberían hacerlo todos los demás elfos? Estoy segura de que aún trabajarían si les pagaran-"