─ ¿Qué coño haces? ─ ¿Porqué ha venido a verme?
─ Tu mensaje me preocupó. ¿Estás llorando? ─ me observa con los ojos bien abiertos.
─ ¿Acaso no lo ves? ¿Qué haces aquí? No te necesito. ¡Vete! ─ le señalo la puerta para que capte la indirecta.
─ Déjame ayudarte ─ se acerca.
─ ¿Ayudarme? ¡Vete! ¡No me conoces!
─ Samantha... ─ sus ojos se enfurecen.
─ ¡Quiero estar sola! ¡Por algo dije que me dejarás! ¡Vete!
─ ¡No! ─ niega con la cabeza y me mira enfurecido ─ ¡No voy a irme!
─ ¡No eres nadie en mi vida! ¡Vete! ¡No te necesito! ─ las lágrimas siguen bajando por mis mejillas ─ ¿Eres idiota? ¡Go out! ¡Vete! Ahí está la salida ─ le señalo la puerta de nuevo.
─ No voy a dejarte así.
─ Llevo dieciséis años de mi vida apañándomelas sola, creo que puedo sobrevivir sin ti. ¡Vete!
─ ¡No! ─ un impulso surge de mi interior y tras mirarlo lo empujo y él rebota contra la puerta.
─ ¡Vete! ─ asiente y me señala.
─ ¿Sabes? Tan solo quiero ayudarte, pensaba que éramos amigos pero estaba equivocado. Disculpa. ─ me aparta y sale por donde le mostré.
Me tiro al piso y empiezo a llorar. Por primera vez alguien intentaba ayudarme y solo he conseguido joderla de nuevo. Soy una mierda y esta vez estoy segura de eso.
Necesito disculparme aunque vaya a ignorarme de por vida.
Salgo de le habitación y me apresuro corriendo hacia el ascensor.
─ Luke...
─ Ajá ─ su voz es dura y parece un cuchillo que se clava en mi pecho.
─ Lo siento ─ no me digno a mirarle a los ojos y me quedo paralizada con la mirada perdida sin poder parar de llorar.
─ Mírame ─ me levanta la barbilla y posa sus manos en mis hombros ─ Tranquila ─ me junta a su cuerpo y me abraza como si fuera algo que desease desde hace mucho.
─ Perdóname... No sé que me pasó... ─ vuelvo a llorar y él me dibuja círculos en mi espalda sin soltarme. Me siento protegida pero aun así, sigo llorando.
─ Vamos mejor a tu habitación... ─ me lleva a la 221 sin dejar de sostenerme con su brazo derecho.
─ Lo siento... ─ me tapo la cara y cierra la puerta.
─ Todos tenemos momentos malos, no pasa nada... ─ me sonríe y me limpia con un pañuelo las lagrimas que circulan por mis mejillas ─ ¿Que ocurrió?
─ Nada importante... ─ una parte de mi quiere contárselo todo pero la otra tiene miedo.
─ Bueno, no voy a forzarte, ya me lo contarás en otra ocasión ─ me sonríe y levanta una bolsa del suelo ─ ¿Miramos una película? ─ lo contemplo y veo como saca un ordenador de la bolsa y lo enciende.
─ ¡Vale!
─ ¿Cuál quieres ver?
─ Mmmh... A tres metros sobre el cielo.
─ ¿Es buena?
─ Es de mis favoritas.
─ Okey tu eliges pero solo por hoy ─ me mira y saca su lengua ─ Espero que no sea aburrida.
No puedo parar de reírme y me tumbo en la camilla mientras veo como busca el título en una web.
─ ¡Ya está! ¿Puedo? ─ me mira y capto que se refiere a tumbarse junto a mi.
─ Si... ─ coloca el ordenador encima de sus piernas y sus brazos como cojín.
─ Cierra la luz o no veremos nada ─ hago lo que me dice y veo como le da al play.
Por primera vez estoy en una cama con un chico que no es mi primo y que me ha llenado cuando estaba totalmente rota por culpa de mi papá.
Estoy nerviosa pero al mismo tiempo me siento llena y noto como poco a poco mi pena por lo sucedido se va volviendo opaca.
No puedo prestar mucha atención a la trama y no dejo de mirarlo de reojo.
─ ¡Mierda! ─ miro que sucede y veo que la película se ha trabado por problemas de conexión. ─ Ahora que venía lo interesante... ─ empieza a hacer un ruido con la boca y ha darle al play pero nada sucede.
─ ¿Te gusta eh?
─ Bueno... ─ se toca el pelo y sigue concentrado con el mac.
─ ¿Porqué eres tan bueno conmigo?
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Nota de la autora:
Aquí tenéis el nuevo capítulo, pronto subiré más. He decidido que haré una maratón cuando lleguemos a 1k de likes en toda la historia y como más apoyo reciba más motivada estaré.
¿Os está gustando la historia?
P.d: Se que este es algo corto pero necesitaba dejarlo así. Prometo recompensaros.
