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Advertencia: Capítulo con contenido explícito.
Felix se alegró de que se hubiera ido. No era como si el hombre pudiera darle algún medicamento que realmente hiciera algo para ayudar de todos modos. Las cremas para la piel eran muy agradables, pero Baekhyun se negó a darle algo para el dolor o las náuseas.
La próxima vez, Felix probablemente debería ser más agradable sobre todo el asunto. Él había querido esto, después de todo, pero no podía evitar estar de malas a veces.
Excepto ahora. Con Chris junto él, y las manos de Felix comenzando a vagar a través de la gran extensión del musculoso pecho. Felix estaba duro ya solo por el pequeño toque, incluso a través de la tela y él lo quería más.
―Felix ― dijo Chan, y había solamente una leve advertencia en su voz.
―Ya lo oíste, podemos hacerlo ― dijo Felix ―Sólo tenemos que ser suaves.
―No sé ― dijo Chris, pero ahora sus manos estaban empezando a moverse también. Él mismo dejándose llevar, que era exactamente lo que quería Felix.
Decidió rogar. Chan no podía manejarlo cuando Felix le rogaba y suplicaba por algo, y ahora Felix estaba sintiendo que debería jugar sucio.
Dejó que su mano se deslizara entre las piernas de Chris, y Felix estaba tan condenadamente contento consigo mismo cuando descubrió que su compañero ya estaba duro para él.
Felix estaba contento por una serie de razones. Significaba que su compañero todavía se sentía atraído por él, todavía le deseaba a pesar de que Felix se iba hinchando día a día.
No tanto como para no hacer que su compañero se empalmara para él, darle un beso de la manera que a Felix le gustaba y entonces empujó su lengua dentro de la otra boca con un gemido.
Felix envolvió sus brazos alrededor del cuello de Chris, empujándose a sí mismo más cerca, y luego subió en el regazo de Chan, a caballo entre sus caderas y juntando sus entrepiernas aun vestidas.
―Por favor, Chris, te echo de menos ― dijo Felix, rogando y suplicando un poco más, manteniendo sus rostros tan cerca que sus narices se estaban tocando incluso cuando no se besaban.
Más besos, más de su caliente boca, labios suaves y lengua húmeda.
―Estoy aquí.
Eso no era lo que quería decir Felix, y Chan lo sabía.
Felix lo besó otra vez, y esta vez empujó su eje contra Chan, poco a poco e incluso sus caderas empujaron hacia adelante en un movimiento circular.
Sí, definitivamente no estaba demasiado grande para hacer cosas como esta. Se sentía como siempre lo hizo, y ahora que estaba subiendo el placer detrás de su vientre, ya no recordaba el dolor que estaba dentro de él.
