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A Chan no le gustaba esto. No le gustaba en lo más mínimo, pero no había nada que pudiera hacer al respecto. Su compañero estaba embarazado, a pesar de que muy bien podría matarlo o dejar su cuerpo en una forma peor que antes de Chris lo conociera.
Pero Felix quería la oportunidad de tener el niño de Chan, y Chan sospechaba que Felix había empezado ya a amar a la cría que estaba dentro de él.
Chan había advertido al hombre contra eso, en el caso de que un hombre lobo no fuera capaz de llevar una cría hasta el final, pero después de cuatro y medio meses, parecía que era de hecho posible.
El problema era que Chan también se encontró deseando que llegara el día en que su cría llegara al mundo.
¿Tendré un hijo o una hija? ¿Será un hombre lobo? ¿O será un Shifter dragón? ¿Ambos? ¿Una mezcla entre los dos?
Muchas preguntas y poco a poco, la preocupación empezó a dejar a Chan a favor de la emoción de convertirse en padre.
Pero entonces Felix tenía días malos. Los días en que intentó esconderse de Chan, donde el chico lloró y se quejó acerca de su dolor a Baekhyun, pero luego sonrió y le dijo a Chan que todo estaba perfectamente bien con él cuando no lo estaba.
Felix sentía dolor. Su interior fue cambiando y el dolor fue empeorando, y estaba tratando de ocultárselo a Chan. Para colmo de males, incluso cuando Chan había intentado hacer el amor con él por primera vez en días, había acabado sangrando.
Lo lastime.
Chan casi había tenido un infarto sobre eso. Su corazón había golpeado tan duro y rápido que era un milagro que no estuviera inconsciente y en la clínica de Baekhyun ahora.
Baekhyun tuvo que darle un montón de explicaciones cuando Chan fue capaz de llevar al hombre hasta Felix. Felix había estado sentado en su cama, aun no saliendo de ella, tal como le había prometido cuando ambos habían acordado tratar de tener este hijo, pero claramente estaba triste y avergonzado, y le temblaba la barbilla.
Chan sentía como si alguien le hubiera clavado un cuchillo oxidado en su corazón, pero si esto era sobre la salud de Felix, entonces no había manera de que fuera a correr ningún riesgo.
Él le gruñó a Baekhyun cuando tuvo que comprobar la mitad inferior de Felix, pero fue Felix quien se volvió hacía él.
―Eres el único que quería que me revisara, ¡acuérdate!
Chan se había quedado en silencio sorprendido, y dejó a Baekhyun hacer su trabajo sin más comentarios ni gruñidos.
Observó como el sanador se había quitado los guantes cuando terminó con Felix y luego preparó la máquina que necesitaba para asegurarse de que el huevo dentro de Felix no estuviera roto. Cuando Baekhyun le había puesto el gel sobre el estómago de Felix, en todo lo que podía pensar Chan era en cómo se había derrumbado sobre su compañero.
