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jihyo observó en silencio como cheongsan parecía tener un ataque de rabia mientras pateaba las cosas que habían utilizado para hacer la señal de auxilio y se abrazó a sí misma por el frío

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jihyo observó en silencio como cheongsan parecía tener un ataque de rabia mientras pateaba las cosas que habían utilizado para hacer la señal de auxilio y se abrazó a sí misma por el frío.

se sentía desesperada al igual que todos, pero no lograba demostrarlo como los demás.

había estado tanto tiempo sonriendo y siendo positiva que ya hasta se le había olvidado como llorar, como sentir tristeza. solo se sentía perdida.

escuchó un trueno y se estremeció cuando escuchó a namra y a gyeongsu quejarse del ruido.

—¿estás bien? —le preguntó a su hermana con preocupación mientras se agachaba junto a ella.

—me duelen mucho los oídos.

vió como suhyeok a su lado cortaba su camisa y hacia algo parecido a tapones para colocarlos en las orejas de namra como si fueran auriculares y cuando escuchó otro quejido por parte de gyeongsu fue con él para hacer lo mismo.

—no. —negó el chico empujando levemente a jihyo lejos de él.— vete.

sin escucharlo, jihyo se agachó a su lado e imitó las acciones de suhyeok hace un momento con el objetivo de, al menos, quitarle un poco de dolor a gyeongsu.

—te dije que te alejaras de mi. —se quejó gyeongsu aún con sus manos en sus oídos.

con cuidado, jihyo tomó las manos de gyeongsu entre las suyas y le colocó los improvisados pedazos de tela en sus oídos.

—ya cállate, por favor. —le pidió jihyo.— no me vas a hacer daño, nunca lo harías.

como siempre, las palabras de jihyo tenía un fuerte efecto en gyeongsu a pesar de escucharlas lejanas por los tapones. sin embargo, esto no impidió que soltara un par de lágrimas sintiéndose terriblemente culpable por casi haberse dejado llevar por sus impulsos, lágrimas que de todos modos se camuflaron con las gotas de lluvia que habían comenzado a caer y se escondieron en el cuello de jihyo cuando esta lo abrazó.

—por favor no te culpes porque no lo es. —le decía jihyo a gyeongsu insegura de si escucharía sus palabras, pero aún así las dijo.— vamos a tener que vivir con esto y aprender a superarlo, juntos.

sintió las manos de gyeongsu pasar por su cintura y apegarla más a él siendo claro para ella el sollozo que se escapó de la boca de su novio y como se apoyaba completamente en ella sin importarle los gritos de los chicos a su alrededor felices por la lluvia o sollozando en silencio. parecía como si todos estuvieran en una historia diferentes, habían demasiados sentimientos mezclados, mucha frustración y poca esperanza.

—lo siento tanto. —sollozó gyeongsu.— no quiero hacerte daño jihyo.

—no lo harás. —aseguró jihyo.— y si lo haces no será tu culpa, no pediste esto gyeongsu y tampoco creas que me voy a alejar por esto.

el propósito de gyeongsu con jihyo era que mientras se mantuviera con vida nadie le haría daño y ahora mismo el mayor peligro para ella eran él y namra, las dos personas más cercanas a ella.

—¡oigan! —los llamó cheongsan de repente a todos.— ¡busquemos algo con que cubrirnos, tengo un plan!

jihyo junto a gyeongsu fueron debajo de la tela que habían colgado para que la lluvia no los siguiera mojando y esperaron a cheongsan explicara su plan, el cual consistía moverse ahora mientras habían truenos para evitar que los zombies los escucharan y llegar a yangdong, dónde creían que tal vez aún no habían invadido los zombies.

—nadie nos va a salvar si nos quedamos aquí, solo nosotros podemos salvarnos.

no era algo que jihyo disfrutara oír para nada. sabía que ya no habían esperanzas de que los salvaran para nada, pero no le gustaba pensar que estaban solos en el mundo.

tomó la mano de gyeongsu mientras sus amigos discutían entre ellos sobre ir o no y miró al chico a su lado. estaba preocupada sobre si seguiría sintiéndose culpable pese a sus palabras, no quería que gyeongsu se sintiera de esa manera ya que a pesar de que sabía que a él no le pasaría nada con los zombies allá afuera, a ella si le podía pasar algo y no quería que desperdiciaran valiosos segundos juntos por la culpa.

—por la lluvia, todos los aromas se mezclan. —habló namra.

—la lluvia es muy ruidosa. —aportó gyeongsu.— casi me marean todos los sonidos juntos.

—seguro los zombies tienen los sentidos adormecidos. —asintió namra.

—si eso dicen los mediombies debe ser fiable. —aseguró daesu haciendo sonreír a jihyo.

finalmente, acordaron ir con el plan de cheongsan, prometiendose ir de la mano en duplas para no perderse ni alejarse del grupo.

—me siento como si estuviera adormecido. —le dijo gyeongsu a jihyo mientras se preparaban para ir, ellos irían juntos.

—debe ser por la lluvia. —razonó la chica.— por ahora hay que enfocarnos en llegar a salvo fuera de la escuela.

gyeongsu asintió y, antes de que cheongsan abriera la puerta de la azotea, besó cortamente a jihyo en los labios con la esperanza de que saldrían de ahí con vida y sintió su corazón más calmado cuando vió la hermosa sonrisa de su novia.

cautelosamente caminaron escaleras abajo junto al grupo y aunque jihyo no lo demostraba, gyeongsu sabía que estaba asustada por el fuerte agarre en su mano.

pudieron salir de la escuela con éxito, pero cuando llegaron a la entrada había un zombie solitario que les podía arruinar todo por lo que cheongsan les hizo una seña a todos para escapar por los arbustos sin ser vistos. mientras iban por ahí lo más rápido y silenciosos que podían, jihyo se dió cuenta de como gyeongsu iba mareado por los fuertes ruido y cuando volteó a ver a namra era casi lo mismo, pero con menos intensidad. deseaba poder ayudarlos, pero no podía hacer nada más que esperar a que llegaran a un lugar seguro y que la tormenta parara.

—tranquilo. —le acarició el cabello jihyo cuando llegaron a un camión y se agacharon a un lado de este.— ya vamos a llegar, no te preocupes.

gyeongsu asintió aceptando las caricias de jihyo. ella no lo miraba ya que estaba atenta de cuándo sería el turno de ellos para pasar por debajo del camión pero se sorprendió a sí mismo observandola mucho más de lo normal. de repente, su sentidos se enfocaron solo en jihyo por primera vez desde que había comenzado la tormenta y si no hubiera sido por el alboroto que formó cheongsan logrando distraerlo, habría mordido a jihyo.

se odiaba, se odiaba mucho por no poder controlarlo y no podía entender por qué a namra no le daban tan seguido esos desacatos como a él, no entendía por qué no podía abrazar a su novia sin sentir la necesidad de morderla, no entendía por qué tenía tanta hambre.

soltó la mano de jihyo con la excusa de ir a separar a cheongsan de daesu sin siquiera comprender la situación, solo se quería alejar de ella, solo quería protegerla.















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LO MATO O NO LO MATO QUE DICE EL PUBLICO JAJAJJAJAJAJJAJAJAJJAJAJJAJAJA

mentira igual voy a hacer lo que yo quiera, muchas gracias por leer y no me maten los tkm besos en las nalgas muak<3
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𝗦𝗠𝗜𝗟𝗘𝗬 | 𝘢𝘭𝘭 𝘰𝘧 𝘶𝘴 𝘢𝘳𝘦 𝘥𝘦𝘢𝘥 [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora