Capítulo uno

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Jungkook.

-¿Ya probaste hablar con él?

Lo miré a la espera de que se riera confirmandome que había sido una broma. No lo hizo.

¿Quién me creía?

-¿Qué te hace creer que quiere hablarme? -pregunté retóricamente y suspiré-. No he podido hacerlo, está renuente a hablar conmigo -guardé silencio unos segundos recordando las veces anteriores que intente hablarle. Miré a Seokjin-. Deberías tú... Tratar de hablarle.

Y su aura y cuerpo relajados de pronto parecieron tan tensos como un roca.

-Nonono. Ya él está enojado contigo, no quiero que lo haga conmigo y más cuando lo necesito para el proyecto del final del semestre. Además, sabes que no tenemos esa confianza. No -negó más veces de la necesaria haciendo gestos con sus manos.

Cobarde.

-Resuelve tú lo que hiciste...

-¡Sí de verdad hubiera hecho algo, sería más fácil! ¿No crees?

-Personalmente creo que... estás jodido. Ahora deja de jodernos a nosotros y come -intervino el intelectual Yoongi.

Deji de jidernis i nisitris.

Fruncí el ceño disgustado mojando mi labio inferior para luego hacer un mohín.

-¿Ya le dijiste?

Soltó un gruñido mientras tironeaba de los bordes de aquel envoltorio. Llevaba un par de minutos tratando de abrir una bolsa de papas y su pregunta -sabía que iba dirigida a mi- me hizo olvidarme de Yoongi y pestañear un par de veces desviando mi vista hacia él.

No parecía muy interesado en mi respuesta, él era así y ya debía haberme acostumbrado pero... sentía que ya lo llegaba a aburrir con el mismo tema.

-¡Estas cosas deberían de estar mejor diseñada! -estalló.

Yoongi rió a modo de burla y Seokjin le dio una mirada de desprecio.

Sí, Seokjin... su paciencia era tan corta como su interés por el tema.

Bueno, quizá el tema si era de su interés pero no se mantenía enfocado en ello, el era de ese tipo de personas las cuales sus palabras no estaban coordinadas con sus acciones, fácilmente podría parecer desinteresado pero sí tenía interés.

-¿Y? -inquirió dirigiéndose a mi.

Tomé una gran bocanada de aire y la dejé salir con fuerza, dejé caer mi mochila al césped para usarla como almohada, me recosté sobre el césped viendo las hojas del árbol que se alzaba sobre mí y que eran movidas por el viento primaveral y el cielo azul que pronto se tomaría negro.

-¿Qué se supone que le diga...? -cuestioné en un suspiro, siendo una pregunta para mí mismo que igual llegó a oídos de Seokjin.

Tenía muchas cosas que preguntarle...

-Deja de contestar mis preguntas con otra pregunta -reprendió-. Dile la verdad.

Él no entendía. Él no me entendía.

¿Cómo le decías...? No... ¿Qué palabras debía usar para que no se sintiera ofendido? No...

Me di vuelta en el césped sintiéndome inquieto e incómodo a la vez quedando bocabajo y apoyándome sobre mis codos para mirarlo. Él aún no me veía, estaba con su bolsa de frituras.

-¿Cómo le dice un chico a otro chico que le gusta?

Sí, me gustaba un chico. No me consideraba homosexual, pero siendo homosexual o no, decirle a otro chico que me gustaba podía terminar bien o mal y... yo no estaba muy seguro de si quería arriesgar mi amistad con él por un romance que seguro podría ser pasajero.

Ignore! Ignore! I Do Not Want To Talk↝ κοοκταεDonde viven las historias. Descúbrelo ahora