La propuesta

Capítulo XVI

Emma, Regina, Zelena, Belle y un inconsciente David desaparecen de allí en una nube negra junto con los bienes preciados de las Dark One y aparecen frente a la casa de estas. La rubia se separa del grupo y se pierde entre los árboles en busca de algo con lo que desahogarse sin herir a nadie, cuando ya no puede más suelta un grito ensordecedor lleno de rabia, dolor, ira y muchas emociones negativas.

-¿Estás bien Emma?- aparece de entre los árboles Regina que se acerca a ella preocupada y le abraza

-La odio, Regina, es un ser demasiado cruel, no sé qué ven en ella de buena- dice sin soltarse del agarre de la morena

-Créeme, eso llevo preguntándomelo desde hace muchos, muchos años y aún sigo sin averiguarlo- trata de hacer que cambie un poco su humor, cosa que consigue al escuchar una leve risa

-Ahora te entiendo, entiendo tu forma de actuar antes- se separa y le sonríe levemente

-Venga, volvamos, hay que curar a un herido Charming por culpa de su loca esposa- bromea haciendo que la rubia suelte una pequeña carcajada mientras comienzan a volver a la casa, entran tras hacer que el árbol vuelva a tener su esplendor y bien plantado en el patio y que el coche amarillo esté en buen estado, al entrar ven que han puesto a David tumbado en uno de los sofás y están las dos mujeres asegurándose del estado del hombre, mientras que Henry alarmado por todo el ruido baja encontrándose a su abuelo materno biológico en mal estado

-¿Qué ha pasado?- pregunta preocupado

-La loca de tu abuela, eso ha pasado chico- le informa la rubia mientras se acerca y cura la heridas de su padre con magia- estará bien, pero debe descansar, puede que dentro de poco despierte y estará confundido, lo mejor será que al despertar se encuentre cómodo y con personas conocidas- informa para todos ya que también se encuentra Rumpel allí

-Creo que lo mejor será que estéis Henry y tú, será lo mejor para que se sienta cómodo, llévalo a uno de los cuartos de la casa- le sugiere Regina mientras pone su mano en el hombro de ella- y tal vez le venga bien, verte como está acostumbrado a verte-

-Está bien, Henry, ¿qué dices?- las dos miran al joven y este asiente- vale, Zelena, Belle, pueden quedarse aquí con nosotras, no les pasará nada a nadie mientras estén dentro con nosotras, Gina, ¿tú te encargas?- la morena asiente antes de que Emma haga aparecer en una de las habitaciones de la casa con su padre tumbado en la cama y ella y su hijo a la espera sentados en unas sillas que hay allí a un lado, Emma ya tiene su aspecto de antes de ser la Dark One, mira a su padre preocupada y no puede evitar empezar a sentirse culpable y se le escapa una lágrima que no pasa desapercibida por su hijo

-¿Qué pasa mamá?- le pregunta preocupado

-Si hubiese seguido como antes, todo esto no habría pasado, si me hubiese estado callada tu abuelo no estaría así y no correríamos peligro, Henry, creo que esto ha sido un error, no debería haberme rebelado y seguir haciendo lo que debo ser, la Salvadora y ya-

-Pero mamá, no podías seguir así, habrías acabado muy mal si seguías así, nadie nos habíamos dado cuenta porque lo mantenías en silencio, si hubieras dicho algo esto había sido diferente, no te estoy echando la culpa de nada, porque ahora no estaría con mis madres juntas y felices con lo que son y luchando codo con codo por su felicidad y yo soy feliz así- trata de hacer que su madre se sienta algo mejor

-Pero Henry, si no hubiese dicho y hecho todo lo que he hecho, David no estaría así y no habría ningún problema a excepción de los que cada uno tiene con uno mismo y todos estarían bien-

-Todos menos tú, hija- los dos voltean a ver a un David recién despierto y con la voz algo ronca, él empieza a toser y le ofrecen un vaso de agua que acepta de inmediato- si esto ha sido lo que has elegido como final feliz, yo soy feliz al verte bien Emma, perdóname por no haberme dado cuenta antes-

-La que se tiene que disculpar soy yo, por mi culpa estás así papá, te he hecho daño- se acerca a él mientras comienza a llorar

-Estoy así ha sido por mi culpa, yo he elegido lo que quiero hacer al igual que tú y soy feliz de tenerte de nuevo, de verte en todas tus facetas y si eres feliz siendo así junto con Regina, lo acepto porque un padre es feliz si su hija es feliz- toma sus manos y con cuidado le aparta las lágrimas de sus mejillas sonrojadas de la rubia- echaba de menos a mi hija y perdóname por no haberme preocupado por ti antes-

-No te preocupes papá, lo importante ahora es que estás bien, ahora debes de descansar, ha sido un día duro para todos, mañana hablaremos todos con calma, ¿te parece bien?-

-Claro, que descansen los dos- sonríe mientras ve a su familia frente a él

-Yo prefiero quedarme un rato más con el abuelo- le informa Henry

-Está bien, hasta mañana- la rubia sale de la habitación y va al salón donde están las dos hermanas Mills sentadas

-¿Cómo está?- preguntan a la vez

-Ya ha despertado, está con Henry y me ha pedido perdón por todo lo que ha pasado y que acepta todo esto en general- les informa a ambas

-Deben descansar las dos, mañana veremos las cosas con más claridad, hoy ha sido un día difícil para todos y una buena noche de descanso nos viene bien, ¿sí?- sugiere la mayo de las Mills

-Está bien, nos vemos mañana, descansad bien- despide Regina antes de las dos irse a su respectivo cuarto- ¿estás bien Emma?-

-Extrañamente si lo estoy, mañana va a ser un día largo y presiento que cargado de muchas cosas- suelta un suspiro cansado

-Pues a descansar se ha dicho Miss Swan- hace que las dos estén en pijama con un giro de muñeca y las dos se acuestan la cama, la morena con la cabeza apoyada en el pecho de la rubia

-Regina-

-¿Si?-

-Me alegro que no me hayas dejado sola...-