Vida, paz y amor (Jack Frost y tu)

❄️✨

Narra ___:

25-12

La Navidad ya había llegado, y con ella, también llegó bastante asombro. Yo estoy consciente de que mis padres compran mis regalos, pero nunca he perdido la fe en que algún día conoceré a Santa Claus.

Salí de mi casa para encaminarme en dirección a la plaza, allí habían muchos niños, todos felices, jugando con sus regalos, a lo lejos diviso a Maite y a Henry.

-Maite, Henry ¿Cómo están?- dije cuando estuve cerca.

-___!!- gritaron al unísono mientras corrían a abrazarme.

-¿Cómo han estado?- pregunté al separarme de ellos.

-Bien- dijeron nuevamente.

-___! Mira lo que me trajo Santa Claus!!- dijo Maite mientras me acercaba su regalo a mi cara. Tomé el regalo entre mis manos, era un set de pintura, tenía lápices, acuarelas, y plumones.

-Esta hermoso Maite, felicidades!!- dije con alegría al ver su sonrisa.

-Mira el mio!!- dijo Henry.

El regalo de Henry era un monopatín, era color verde con detalles rojos, las ruedas eran de un color azul eléctrico.

-Esta muy bonito Henry- dije.

Así pase unas 2 horas, conversando con los niños, ellos mostrándome sus regalos y yo felicitandolos.

Luego me dirigí al bosque, querías relajarme un poco. Allí me encontré con Oliver, quién venía acompañado de varios animales más, alimenté a cada uno de ellos.

Cuando estaba a punto de irme, escuché un ruido que me sobresaltó, divisé a lo lejos una silueta, al verla mejor me di cuenta de que se trataba de... ¿Qué es eso? ¿Un canguro? ¿O una especie de conejo mutante? sea lo que sea era bastante alto, de unos 2 metros aproximadamente, al parecer el se percató de mi presencia, pues se quedo totalmente quieto mientras veía hacia mi dirección.

Con un valor que ni yo se de donde saqué, me acerque a el, la criatura retrocedió unos pasos al ver que intentaba acercarme.

-Ey! tranquilo, no te haré daño- dije con voz suave mientras estiraba mi mano en su dirección.

El animal o lo que sea, miró mi mano con miedo, se acercó un poco a ella y la olfateo, vi como se relajó un poco y me dejó acariciarlo.

-¿Cuál es tu nombre?- pregunté, pero luego me di un golpe mental por mi pregunta tan estúpida- lo siento, que estúpida- agregué mientras miraba el suelo.

-Soy Conejo- dijo una voz grave.

Levanté la vista rápidamente, ¿Qué tan demente estaba como para escuchar voces en mi mente?

-¿Qué?- fue lo poco que pude decir.

-Mi nombre- dijo nuevamente, con esto confirme que la voz provenía de la criatura- me preguntaste como me llamo, mi nombre es Conejo- continuó al ver que yo lo veía estupefacta.

-Pues... amm mucho gusto Conejo, soy ___- dije aún procesando- disculpa pero ¿Que se supone que eres?

Pues, mi nombre lo dice, soy un conejo- dijo restándole importancia.

-Y ¿Cómo es que puedes hablar?- pregunté.

Vi como se tensó un poco ante mi pregunta ¿Acaso dije algo que lo incomodó?

Narra Conejo:

Me encontraba viajando por mis túneles sin dirección alguna, quería relajarme un poco, pues Navidad había sido hace unas horas y Norte no dejaba de presumir lo maravilloso que había sido entregar sus regalos.

Decidí parar un momento para descansar, estaba por recostarme en un árbol, pero sentí una presencia cerca, por un momento creí que se trataba de algún animal, pero esa idea se esfumó cuando escuché una voz femenina.

Me dirigí hacia donde provenía la voz, me escondí entre los árboles, pude ver a una humana sentada bajo un árbol, a su alrededor estaban varios animales, todos de diferentes especies, en su regazo descansaba un pequeño gato negro, pude ver que ella los estaba alimentando.

Cuando me dí la vuelta para retirarme, por accidente pisé una rama, el ruido ocasionó que la chica se pusiera alerta, rogué para que no se diera cuenta de que estaba ahí. Pero de igual forma me vió.

Se acercó a paso lento hacia mi, yo retrocedí asustado, pues podría tener algún arma.

-Ey! tranquilo, no te haré daño- dijo con voz suave, mientras estiraba su mano hacia mi.

Miré su mano con miedo, acerqué mi nariz a su mano y la olfatié, no parecía mala, así que me deje acariciar, su tacto fue relajante.

-¿Cuál es tu nombre?- preguntó, pareció meditarlo un poco- lo siento, que estúpida- dijo mientras veía el suelo.

Por un momento dudé en contestar, pues no sabía cómo iba a reaccionar.

-Soy Conejo- dije, levantó su vista rápidamente, al parecer no se lo esperaba.

-¿Qué?- preguntó estupefacta.

-Mi nombre- dije de nuevo- me preguntaste como me llamo, mi nombre es Conejo- aclaré.

-Pues... Amm mucho gusto Conejo, soy ___- dijo saliendo de su trance- disculpa pero ¿Qué se supone que eres?

-Pues mi nombre lo dice, soy un conejo- dije mientras le restaba importancia.

-Y ¿Cómo es que puedes hablar?- mencionó.

Me tense ante su pregunta, ¿Cómo le explicó que soy un espíritu y que soy el famoso Conejo de Pascua?

-Tranquilo, puedes confiar en mí, no le diré a nadie- dijo, al parecer noto mi incomodidad.

Decidí contarle lo que soy, pues ya no había vuelta atrás, estaba nervioso, y sabía que si inventaba alguna excusa no sería creíble.

-Pues... Veras..-

Le expliqué quién soy y lo que hago, sinceramente esperaba que no se lo creyera, pero grande fue mi sorpresa al ver que si me creyó.

Narra ___:

Conejo me explico todo.

Seguía un poco confundida, pues no era normal que te encontrarás al conejo de pascua en pleno bosque.

Cambiando de tema, al fin pude completar uno de mis sueños; conocer al conejo de pascua.

Conejo y yo nos quedamos hablando por unos minutos más, hasta que nos tuvimos que despedir, pues yo debía regresar a casa.

Al llegar saludé a mis padres, cenamos y nos preparamos para dormir, hablé con la luna, le comenté sobre Conejo.

Me dormí rápidamente, pues estaba bastante cansada, hoy habían pasado muchas cosas, pero estaba feliz de haber podido realizar uno de mis sueños.

Buenaaassss....
Espero que les haya gustado
Besos........

Martina ✨