Narra___:1 semana, 1 semana había pasado desde que llegó más gente al pueblo. Las calles seguían bastante alborotadas, claro que no tanto como el primer día. Lo más negativo de todo esto, es que la delincuencia había aumentado un poco, eso le ponía los pelos de punta a más de una persona.
Pero bueno, cambiando de tema, hoy mis padres no trabajarían, tenían día libre, por lo tanto, íbamos a aprovechar el día para adornar la casa.
Luego de desayunar los tres nos dirigimos hacia las tiendas, compramos esferas, luces, coronas de muérdago, velas, entre otros.
Al llegar a casa, mi papá fue a buscar el árbol, mientras mi mamá y yo arreglamos los adornos que se le pondrías a éste, cuando papá llegó, comenzamos a poner esferas de diferentes colores, tamaños y diseños, también guirnaldas y luces. Y por último la estrella.
Luego de decorar el árbol, pusimos una corona de muérdago en la puerta, un centro de mesa junto con una vela en el comedor.
Adorne un poco mi habitación, no hice mucho, solo puse una manta con diseños navideños sobre mi cama y un pequeño arbolito sobre mi mesita de noche.
Después de terminar de arreglar la casa, aún quedaban bastantes horas para que el día terminarse, así que decidí salir a caminar un poco, obviamente llevé mi mochila, en esta siempre llevaba comida por si me encontraba con alguien en situación de calle.
Después de estar unas horas en el pueblo, decidí regresar a mi casa, por el camino iba saludando a todo aquel que viera, todos en el pueblo me conocían y yo los conocía a ellos.
Cuando llegué a casa, mis padres se encontraban dormidos en el sofá, frente a la televisión, tal vez vieron alguna película y les dio sueño. Pase por su lado con mucho cuidado para no despertarlos, cuando me encontraba en el segundo piso fuí directo a su habitación, agarré una manta, y la lleve a la sala para cubrirlos con ella.
Me dirigí a mi habitación, y me puse a leer un poco, amaba la lectura.
No tengo idea de cuanto tiempo estuve leyendo, solo sé que cuando aparté mi vista de el libro, ya estaba oscureciendo.
Me dirigí a mi ventana y me apoyé en ella, me quedé viendo el atardecer, Haste que escucho a mi madre gritar que ya estaba la comida.
Bajé en dirección al comedor, allí estaban ambos esperándome.
-Hola mamá- dije cuando llegue a su lado.
-Hola mi niña- habló ella.
-¿Cómo estuvo tu día?- preguntó papá.
-Bastante tranquilo, estuve jugando un poco con Maite y Henry- respondí- me encontré con el señor Mario, a quien le di un poco de comida, también estuve hablando un poco con Felipe y Alex- finalicé mientras comía.
-Vaya, si que estuviste ocupada- dijo mamá.
-No fue mucho- dije.
-¿Te puedo hacer una pregunta hija?- cuestionó papá.
-Por supuesto papá, dime- hablé.
-¿Por qué te esfuerzas tanto en ayudar a las personas?- pregunto con una mirada curiosa.
-Sinceramente no lo sé, solo lo hago, me siento feliz con eso- dije - además, es reconfortante ver las expresiones de agradecimiento y alivio en las personas cuando las ayudo.
-Me alegra que seas tan generosa hija- dijo mamá mirándome.
-Tu madre tiene razón, tienes valores que no siempre son fáciles de encontrar en las personas- habló mi padre con una sonrisa.
-Cambiando de tema, aún no hay nadie que te guste hija- dijo mamá con una sonrisa pícara, sacando el tema del cual no me gusta hablar mucho con ellos, primero porque mi padre es bastante celoso en ese aspecto y segundo porque mi madre se aprovecha de los celos de mi padre para burlarse, tanto de mi como de mi padre.
-No mamá, aún no a llegado nadie que se robé mi corazón- dije con una mano en mi frente dándole un aire "dramático" a mi frase.
-Y espero que eso se mantenga así- dijo papá con el ceño levemente fruncido.
-Algún día tendrá novio amor, debes comenzar a hacerte la idea de que pronto te dirán suegro- dijo mi mamá con la intención de molestar a mi papá.
-Pues espero que ese día no llegué- habló con un tono molesto.
Yo por mi parte, me encontraba viendo el espectáculo desde mi silla, confieso que estaba aguantando la risa, ver a mi padre celoso siempre fue bastante divertido, me mataría si supiera que ya dí mi primer beso.
-Claro que llegará el día en que ___ tenga novio y de su primer beso, si es que no lo a dado ya- habló mi mamá repentinamente haciéndome salir de mi mundo.
Al escuchar esto mi padre me miró rápidamente.
-Pues aún no lo a dado, ¿Verdad ___?- dijo mirándome. Juro que le rezé a todos los santos, incluso a los egipcios para que me ayuden a salir de esta con vida- ¿Verdad ___?- preguntó de nuevo pero esta vez un poco más preocupado.
-Amm yo...- dije con nerviosismo, fruncí el ceño al ver como mi mamá se aguantaba la risa, pues ella sabía que yo ya lo había dado, yo se lo había contado y ahora me estoy arrepintiendo completamente de habérselo dicho.
-___, ¿Diste tu primer beso?- preguntó alarmado mi padre.
-Yo... Amm si- dije lo último en un susurro, rezando porque el no hubiera escuchado.
-¿Que? ¿Con quién? ¿Cuando? ¿Cómo? ¿Por qué?- preguntó.
-Fue con Felipe- dije.
-¿Con Felipe?- preguntó un poco más aliviado, yo asentí- al menos fue con alguien que conozco, ¿Cuándo fue?
-Cómo hace tres meses- hablé.
-¿Y porque no me lo habías contado? Creí que nos teníamos confianza- habló fingiendo estar ofendido e indignado.
Por otro lado mi madre ya había comenzado a burlarse de mi padre hace unos minutos.
-Bueno, es tarde y yo quiero dormir, así que nos vemos, que tengas buenas noches- dije llendo a mi habitación con la intención de escapar de ese incómodo momento.
Llegué a mi habitación, hize mi rutina, hablé con la luna, me acosté y me deje vencer por el sueño.
Buenassss
Espero que hayan disfrutado el capítulo
Comenten si les gustóBesos...
Martina ✨
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Vida, paz y amor (Jack Frost y tu)
Hayran Kurgu☆ ___ , una adolescente de 17 años, amable, generosa, bella, empática y creyente en la magia. Se verá involucrada en una aventura con personas que nunca pensó conocer. ¿Se enamorará de alguno de sus compañeros? Te invito a leer ⚠️Los personajes no m...