C A P Í T U L O 26

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Capítulo 26 | Reencontrándome con el pasado.

Moví mi pierna de arriba abajo con desespero, estaba ansiosa.-Que pasa Brad? Sin palabras?.- deje el movimiento de mi pierna y tome un profundo respiro, sabía que el estaba en algún lado viéndome y si notaba mi nerviosismo, sería peor.

-Para nada- miro el mensaje y sonrío.

-Sabes que es lo mejor? Que Aaron no es un marica que anda pegándole a las mujeres.- sonrío mientras envío el mensaje. Me levanto de mi silla y le aviso a los chicos que me compraré un café. Salgo de la tienda para caminar hasta el centro comercial que estaba frente de esta.

Una vez tenía que tenía mi café entre mis manos, decidí sentarme en una plaza que estaba al frente del centro comercial. Siento la sensación de que hay alguien detrás de mí, pero decido ignorarlo.

Un escalofrío invade todo mi cuerpo y esa presencia que sientes cuando una persona tiene mucha maldad, se hace presente.

Sonrío satisfecha antes de hablar.-Qué pasa? Te molesto él hecho de que te llamara por tu nombre? Marica..

-Cuál es tu intención April? Sacarme de quicio? Y luego que harás?.- volteo lentamente para encararlo.

Mi sonrisa se esfuma en cuanto lo veo, ni siquiera podía reconocerlo, había pasado nueve años y no podía creer lo flaco que estaba y su rostro decía lo mucho que había adelgazado, las ojeras adornaban sus ojos, su piel estaba pálido y el brillo en su cabello ya no estaba.

Ni siquiera reconocía al chico de que me enamoré hace nueve años, bueno, si es que eso se podía llamar amor..

-¿Que quieres de mí? Por qué no me dejas en paz?- pregunto, ni siquiera había respondido su pregunta.

-Me quede esperando por ti April, en ningún momento me fuiste a buscar..- me levanto del banco donde estaba.-Me molesta lo feliz que eres al las de ese imbécil.- aprieta sus puños.-Eres mía!.- exclama.

Río amargamente.-Claro! Iba a buscarte porque me encantaba que me golpearas.- digo irónica.

-Sabes que las drogas...

-No.- lo interrumpo.-No culpes a las drogas. Sabes a veces ni consumías y aun así me golpeabas.- digo recordando aquel tiempo.-Fui tuya en un tiempo, pero ya no más. No soy aquella niña sensible y débil.- señalo.

-Eso lo acabo de ver.- me mira de arriba abajo, provocando cierto asco en mí.-Sabes que te encantaba cuando te tocaba.- da un paso hacia delante, retrocedo.

-Antes, ahora me causas asco.- su mirada se torna oscura, noto su cuerpo tensarse y apretar su mandíbula.-Dices que soy tuya pero quieres dañar a la gente de mi alrededor?- cuestiono.

-Haría cualquier cosa para que regreses conmigo, así tenga que quitar a las personas que se atreviesen.- un escalofrío invade todo mi cuerpo.-No sabes de lo que soy capaz April..- aprieto mis puños.-Lástima que no estuviste en aquel auto con tus padres.- el café se cae de mis manos.

-No.. No me digas..- sentí mis piernas flaquear.

-Nos vemos luego April, fue un placer hablar contigo.

-Maldito bastardo..- susurre.

-Pronto volveré a verte.- se dio la vuelta, se detuvo y me miró.-Salúdame a tu novio. Y recuerda que tú siempre serás mía.- dicho esto, comenzó a caminar.

Yo estaba en shock, no podía creer lo que me estaba diciendo, mis manos temblaban. Saqué mi teléfono del bolsillo y llame a Aaron.

-Ven.- fue lo único que dije.

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