𝓵𝓲𝓰𝓱𝓽𝓼 𝓪𝓷𝓭 𝓼𝓱𝓪𝓭𝓸𝔀𝓼 ( 𝔹𝕠𝕨𝕖𝕣𝕤 𝔾𝕒𝕟𝕘 )

"Capítulo 12"

Mi padre comenzó a conducir mientras yo sintonizaba la radio hasta encontrar alguna canción que me gustara. Al cabo de un rato encontré una, así que me acomodé en mi asento mientras mantenía una conversación  con mi padre. 

Recordé que tenía que ir a casa de Bev para convencer a su padre de el plan de esta noche, así que le dije a mi padre que se estacionara cerca de la casa de Bev para así una vez fuera de su casa poder ir directamente a la nuestra.

-Bien, pues ya estamos.

-Ahora vuelvo, trataré de convencer al padre de Bev y en menos de 5 minutos estaremos aquí.

Salí del coche y me puse a caminar hacia su puerta. Toqué y después de unos segundos sentí el pomo de la puerta girándose dejando ver a Beverly con una sonrisa.

-¿Qué tal Bev? 

-Perfectamente, esto... ¿Cómo hacemos para que mi padre me deje ir a la cena de esta noche?

-No te preocupes, trataré de hablar con él. ¿Puedo pasar?

-Por supuesto, estás en tu casa Kendall -Me dijo Bev haciéndose a un lado dejándome ver el interior de su casa- 

-¿Quién es Bevvie? 

- Oh, papá, ella es Kendall, Kendall Jonhson. -Masculló Beverly con algo de temos, lo cual se me hizo extraño pero simplemente saludé al padre educadamente con una cara formal y severa.

-Encantada de conocerle señor Marsh.

-Oh querida llámame Al, el placer es mío. No sabía que Bevvie tenía amigas. Pero bueno, siempre es bueno saberlo. -No me quitaba la mirada de encima mientras hablaba, lo cual se me hizo algo perturbador pero no le quité la mirada de encima en ningún segundo. -Y bueno, se puede saber para que venías querida Jonhson.

-Kendall, llámeme Kendall. -No me gustaba que se dirigiera a mi de esa forma y menos con esa mirada y estando tan cerca. -Bueno, pues he venido a preguntarle si Beverly podría pasar la tarde conmigo en mi casa, mi padre y mi hermano no estarán debido a unos asuntos personales y he decidido aprovechar para que Beverly pudiera cenar conmigo mientras hablábamos y pasábamos la tarde.-Obviamente le iba mentir ya que si le decía que ibamos a estar con más gente y por a calle de noche no la dejaría ir, lo cual me parece extraño, pero Bev ya me contó alguna cosa sobre él, así que era necesario mentirle.

-Bueno, pues no usualmente le dejo ir a casas de otras personas, pero teniendo en cuenta que es una de una amiga y que solo estaréis vosotras juntas sin chicos, ni amigos, la dejaré. -Pensaba que sería algo más complicado convencerle pero ya veo que no- Pero tendrás que preparar las cosas para dormir en su casa no Bevvie? -Me estaba empezando a angustiar ese mote y más sabiendo que Bev se sentí incómoda escuchándolo de su boca-

-Si papá, enseguida subo y lo preparo todo. Kendall ven conmigo. -Yo solo asentí y la seguí por el pasillo sin despegar mi mirada de la de su padre ya que él no nos quitó su mirada hasta que Beverly cerró la puerta de su habitación.

Estuve un rato observando su habitación hasta que Bev habló haciendo que la mirara.

-Siento mucho el comportamiento de mi padre, sabes como es, y a veces se hace demasiado incómodo todo. -Se sinceró mientras metía todas sus pertenencias en una pequeña bolsa. Lo justo para pasar la noche conmigo. 

-No te preocupes, todo está bien. -Solo veía como trataba de sonreír pero hizo una mueca, lo cual yo me senté a su lado y traté de calmarla ya que se veía algo tensa. -Bev no te preocupes, si trata de hacer cualquier cosa, yo se lo impediré y no dejaré que te haga nada malo, vale? Y respecto a lo de antes, tampoco te preocupes, sé tratar con tu padre y aun que sea algo difícil todo irá bien. -Le acariciaba la mejilla mientras se lo decía-

-Gracias... por todo. Enserio, no sé que haría sin ti en estos momentos. Gracias. -Me decía con una sonrisa sincera en la cara y con esos ojos tan bonitos que hacen sonreír a cualquiera- 

-De nada ahora déjame ayudarte con las cosas. Le dije a mi padre que estaríamos en breve en el coche. -Y sin más nos pusimos a empacar y a meter todo-

Cuando terminamos abrí la puerta de la habitación de Bev y caminamos hasta la puerta pero no sin antes pasar por el salón en el que se encontraba el padre de Beverly. 

-¿Ya habéis terminado? ¿Tanta prisa tenéis?-Se levantó de el sofá y se acercó a Beverly para comenzar a tocarle la cara- ¿No queréis quedaros un poco aquí? Hay tiempo... -Dijo mirándome con los ojos bien abiertos, a lo cual yo respondí igual, sin quitar mi mirada de él.-

-No gracias, señor Marsh, en verdad tenemos prisa y no queremos retrasaros más. Mi padre está fuera esperándonos para dejarnos en casa y no quiero que se preocupe, pero gracias, otro día me quedaré a charlar con usted y con Beverly en casa. -Le dije lo más amable y educadamente posible, pero lo único que pasaba por mi cabeza en ese momento era estamparle la cabeza contra la pared.-

-Bien, pues mañana nos vemos Bevvie, pásalo bien, ya hablaremos cuando vuelvas. Y lo mismo para ti Kendall. -Más bastardo no podía ser este señor, de verdad. Pero simplemente me cansé y después de asentir comencé a girar el pomo de la puerta para salir ya de ese infierno. Ese hombre te podía hacer sentir incómoda en menos de 5 segundos, lo cual no me agradaba para nada. Así que traté de salir lo antes posible y no sin asegurarme de que Bev viniera por detrás y no se quedara con aquél hombre que se hacía llamar su padre.-

Salimos y vimos a mi padre esperándonos fuera del coche mientras hablaba por teléfono. Enseguida colgó y se acercó a Bev para coger su bolsa y meterla en el maletero mientras saludaba a Beverly. 

-Encantado, soy el padre de Kendall, me puedes llamar David.

-Encantada David, soy Beverly Marsh, Kendall me ha hablado maravillas de usted. 

Nos montamos en el coche y tuvimos una charla muy agradable, Beverly parecía algo callada al principio pero luego se fue soltando al ver que podía mostrar confianza ante nosotros. Y así pasamos el camino entero hasta que llegamos a casa.