-Mi niña, por fin despertaste- aun tenia lágrimas en los ojos
-Tranquila Dorotea, estoy bien. ¿Qué sucedió?- no lograba recordar nada.
-Tu madre dijo que ibas a subir a tu habitación y que no te diste cuenta y tropezaste en la escalera. Mi niña tienes un feo golpe en tu rostro, deberías tener mas cuidado pudo haber sido peor- me abrazo con cuidado.
¿Caerme? Por favor cuanto tiempo tengo subiendo y bajado, desde niña y jamás paso algo. Pronto recordare, supongo.
-Dorotea ¿Hablaste a Sandra?- me senté despacio.
-Brooke…dijo que no era necesario- bajo la vista y se puso de pie.
-¿pero que mierda? Me golpee y a la tipa piensa ¿Qué no es necesario? Por favor- me levante rápido y de un mareo me senté de nuevo.
-tranquila tomaste algo fuerte, mi hija me lo receto, levántate con cuidado o mejor no, yo te traigo comida- termino de cerrar mis cortinas y bajo.
Falte a la escuela lo que es obvio –por el golpe-, y me dedique a ver televisión, bueno en realidad exactamente programas de niños –soy taaaaan madura- y también comer las cosas raras que me daban, estoy segura que ni en el hospital dan este tipo de comida, cuando sea presidenta juro que hare que paguen con años de cárcel a los que hacen este tipo de comidas malas.
El efecto del medicamento había pasado y me sentía estupenda a la mañana siguiente; Salí de ducharme tome una falda corta y larga de la parte trasera con un top. No entiendo por que quería verme más bonita de lo normal hoy, bueno en realidad si sabía era por el maldito golpe que tenía en mi rostro y necesitaba ocultarlo.
-hola amor- saludo Brat en cuanto llegue a mi casillero.
-hola bebé- salude tratando de esquivar su mirada de mi rostro
-¿solo hola bebe?- tomo mi rostro en sus manos y justo cuando iba a besarme su gesto cambio -¿qué sucedió?- preguntó asustado -¿por eso no viniste?, pero ¿a quién mató?- no pude evitar soltar una risita por su comentario.
-tranquilo bebé tan solo me tropecé y caí horrible contra el escalón-me encogí de hombros, lo tome de la mano y lo jale caminar a clases, pues la mirada de todos estaba en nosotros porque mi querido amigo no habla, el ¡GRITA!.
-me preocupas Emmylia- me besó en la mejilla y entramos a clases.
Las clases continuaron y era tiempo del descanso y gracias a Dios, por que tenía un hambre atroz y de seguro comería bastante.
-¿que te paso?-preguntó una voz varonil alarmada
-qué demonios te importa Josh- contestó Nicole
-solo es un pequeño golpe, gracias por preguntar- sonreí amable
-que por cierto, que horrible se ve -dijo la perra celosa mientras daba un bocado, quisiera que se atragantara.
-gracias. Me encanta escuchar eso-volteé los ojos –chicos me voy, necesito ir- ni siquiera me dejaron terminar.
-al baño- contesto Ann burlándose.
-Hey, que mala- me despedí y Salí rápido, la verdad es que quería ocultar el golpe, no quería que nadie se diera cuenta de que había sido tan torpe que… -¡MIERDA!- en ningún momento yo me caí o algo así, ese maldito me golpeo –hijo de…-pobre de su madre.
No puedo creerlo, el me pego y Brooke lo defiende y le mintió a Dorotea, y el colmo de todos ni dejaron que Sandra me cuidara. Cada día es mas infierno vivir sin Papá.