A pesar de todo.

4- Chicas a la acción

Luego de la casi pelea de hace un momento, Caitlyn ya estaba más calmada y su compañera era tan simple que parecía no importarle en absoluto, como si lo hubiera olvidado. Mientras iban de camino, la sheriff pensaba en su mal comportamiento para con la otra chica pero pensaría en el modo adecuado de disculparse, luego de todo lo demás claro.

Minutos después de su salida llegaron al lugar, de hecho no estaba muy alejado.

"Espérame en el auto, volveré en un rato"- la sheriff tomó su rifle y amagó con abrir la puerta.

"Me prometiste acción"- gruñó la pelirrosa

"Lo sé pero quédate aquí hasta que termine, no puedo llevarte porque es peligroso"- entonces la dejó encerrada en el auto, yendo por detrás del edificio.

Por lo que tenía entendido ya había algunos vigilantes dentro pero se habían quedado atrapados, tendría que esperar que refuerzos llegarán pero podrían tardar demasiado y allí adentro tenían rehenes.

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" Y ahora que hago?, Espero a que la linda y poco divertida oficial regrese?"- lo consideró por un momento y luego rio-"pero que claro que no, cobraré lo que me prometieron".

Ella sabía abrir la puerta de un auto, era pan comido, mover un poco acá y allá, un golpecito y Voila!. Sin destrozos, al menos sin destrozos que se vean.

Pronto se vió parada en la parte trasera del edificio, desde allí pudo observar un ventana por la que podría espiar que sucedía dentro.

En esa planta no había nadie, podría entrar a husmear sin problemas. Pensé en romper la pared pero sería riesgoso porque podía poner en peligro a la oficial "mala onda" y ella era mi niñera así que no podía matarla indirectamente.

Con cuidado me escabullí por esa ventana y caí directamente en la parte trasera de una recepción. Era un pasillo con las puertas del estaff y un baño para empleados, más adelante estaba un escritorio y a ambos lados estaban los ascensores. En la parte posterior izquierda de la recepción había una puerta más que llevaba a las escaleras. Seguramente tendría que subir por ahí, yo esperaba que el altercado fuera en un piso cercano porque no estaba de humor para tener que subir veinte plantas de escaleras.

Igualmente era llamativo, ¿Nadie estaba vigilando?. De todas maneras no tenía miedo, no serían más fuertes que mis puños y necesitaba desquitarme, todavía tenía una mezcla de emociones que no había podido explorar y lo único que quería era partir algunos cráneos.

Revisé con cuidado y no había nadie en el perímetro. Bajé por la misma ventana por donde había estado espiando. Hice más ruido del que me esperaba pero nadie había venido.

Entonces me dirigí a la puerta que llevaba a las escaleras, no sabía por donde comenzar pero mi instinto me guiaría seguro, mis puños sabían muy bien donde se encontraban los problemas.

Era el edificio de una pequeña empresa, no parecía lo suficientemente valioso para ser asaltado. ¿Qué habría de especial?

En el segundo piso tampoco había nada.

"Demonios, así no los encontraré nunca y además... que pasará conmigo si le sucede algo a la oficial mala onda?"- la pelirrosada gruñó para si misma, de todos modos iba a continuar, la situación era rara y quizá habían atrapado a la sheriff dado que entró sola y los demás oficiales estaban imposibilitados.

Cuando se calmó un poco pudo escuchar pasos en el piso superior. Río para si misma.

"Ahora sí los encontré"