A pesar de todo.

6- Retazos

"...¿Mi hermana mato a tu padre?"- exhaló sorprendida-'oh no, oh no...Powder'- ella a pesar de lo que había visto no podía creerlo. Su hermanita una asesina, la niña a la que pensaba, a la que le contaba cuentos por las noches...esa misma niña había asesinado al padre de la oficial.

"Lo siento tanto...en serio, lo siento"- la chica de cabello rosa tomaba su cabeza con desesperación.

"Vi está bien...no necesitas disculparte"- respondió la chica de cabello azulado mientras acariciaba su hombro-"yo debería haber estado ahí ese día, si yo hubiera ido esto se podría haber evitado"- suspiró

"O podrías haber muerto tu también..."- pensó por un momento-"...yo...te ayudaré a capturar a Pow...a Jinx, es mi responsabilidad"- apretó el puño con determinación.

"Gracias Vi...pero sabés, esto será muy duro para ti, lo entiendo si no quieres participar hasta el final, tan solo necesito que me ayudes a recolectar las pruebas y una vez que se compruebe que no cometerás ningún delito... preferiría usar otro método pero en este momento eres la única oportunidad que tenemos"

"Soy una mujer de palabra y pienso ir hasta la última consecuencia para recuperar a mi hermana..."- se notaba consternada pero también molesta.

Luego de esa conversación ya no había ánimos de hablar de nada más así que las chicas se fueron a dormir sin decir nada más que "buenas noches".

La mañana siguiente sería más tranquila pero no por ello implicaba que no harían nada.

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Cuando el primer rayo de sol asomó por entre las cortinas de seda, Vi ya estaba despierta, después de todo aquello solo había tenido pesadillas y ya no quería continuar durmiendo, por lo que optó por sentarse en la ventana de la habitación a mirar hacia afuera, no había nada mejor que hacer por el momento.

Unas horas más tarde comenzó a sonar fuertemente el despertador de la oficial y esta al ver que la pelirrosa no estaba se alarmó y se levantó con brusquedad.

"Oye tranquila, aquí esto"- rió la zaunita acercándose desde donde estaba.

"Uff...lo lamento"- dijo sentándose nuevamente ya que se había parado muy de golpe y estaba por perder el equilibrio-" pensé que..."

"No te preocupes Cupcake, hoy no salí a buscar el desayuno"- sonrió irónicamente.

"Deja de llamarme así, ¿De dónde salió ese sobrenombre?"- suspiró

"Quién sabe"- rió la chica.

"Bueno, voy a vestirme, hoy iremos a conseguir algunos muebles para tu departamento"

"¿Ya me estás echando?, Y yo que pensé que ya estábamos construyendo una amistad"- ella se hizo la ofendida pero luego de ver la cara de la oficial, se calmó- era solo una broma, no tienes sentido del humor-

"Si lo tengo...bueno, mejor voy al baño y luego a cambiarme, espérame aquí"

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¿Cómo es que después de la charla de la noche ella estaba como si nada?. Yo no lo comprendía. Otra vez con ese humor tan estridente, bueno talvez yo también debería relajarme, sino nuestro trabajo sería aún más difícil. Incluso quizás ella tampoco quería pensar mucho en eso.

Yo sabía que no estaba bien involucrar sentimientos en el trabajo ni a los familiares en ello pero sería imposible. Ahora era algo que de alguna manera nos involucraba a las dos, ya no era solo asunto mío, yo lo sabía.