CAPÍTULO 05

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Harry

-¿Alguien quiere jugar un partido de fútbol?- Preguntó Niall abriendo nuestra habitación una mañana.

-¡Dios! ¿Qué ya no golpeas Niall?- Dijo Louis despertándose molesto de repente a mi lado. Si alguien lo despertaba siempre se ponía de mal humor.

Yo por mi parte me desperecé y me lleve las manos a los ojos para despabilarme. A mi tampoco me gustaba que me hablen tan enérgicamente cuando recién me despertaba pero me costaba mucho enojarme con Niall. Era tan alegre y dulce con todos que no podía.

-Lo siento, hermano, es que se nos ocurrió con los chicos jugar al fútbol hoy para cambiar un poco la rutina.- Dijo Niall.

-Ok, ok, no quiero que me hables por un rato. Ve a hacer el desayuno mientras intento volver a esta realidad.- Dijo Louis prácticamente echando a Niall de la habitación.

Este asintió con la cabeza y salió de inmediato. Pero entonces me sentí mal por él y me levanté y fui a buscarlo al pasillo.

-Oye, Niall.- Dije al verlo que estaba por bajar las escaleras. Él se dio vuelta y me miró con esa sonrisa tan típica de él.

-Dime, Harry.- Dijo.

-Discúlpalo a Lou... Tiene un pésimo humor en las mañanas.- Dije.

El rubio hizo un gesto despreocupado con las manos.

-Descuida, lo sé. Fue un error mío. No debí despertarlo tan eufóricamente. Lo siento también por despertarte así.- Dijo.

-Ven aquí no pasa nada.- Dije caminando hacia él y abrazándolo. Siempre había sido demostrativo con las personas que me importaban. Y en este poco tiempo había desarrollado distintos tipos de lazos con cada uno de los chicos. Pero lo cierto es que ya los quería a todos como si fueran mis hermanos.

-Más tarde continuaremos con tus lecciones de guitarra ¿Quieres?- Dijo.

-Me parece un excelente plan.- Dije.

-Iré a hacer el desayuno o Louis se enojara.- Dijo Niall comenzando a bajar las escaleras.

-Me iré a lavar la cara y cambiarme. En diez minutos bajo a ayudarte.- Dije dirigiéndome hacia la habitación otra vez.

Louis estaba cambiándose despreocupadamente. De inmediato sentí el calor en mis mejillas como venía pasándome últimamente cada vez que él hacía o decía algo. Aparentemente este sentimiento de curiosidad sexual no iba a irse así que debía convivir con él. Me dirigí hacia el baño intentando no mirarlo. Me lavé la cara e hice lo que pude con mi pelo. Mantener los rulos peinados era la tarea más desgastante de la historia. Ahora no me importaba mucho pero si algún día llegaba a ser famoso la gente iba a sacar artículos hablando de lo mal peinado que estaba. Tenía que empezar a preocuparme más por mi pelo o sería devastador. Mientras estaba concentrado en mis pensamientos observándome frente al espejo vi que se asomó Louis ya vestido con su hoodie blanco y mi beanie negro en su cabeza. Sonreí al verlo a través del espejo. Sentí su mano en mi cintura.

-Espero que no te importe.- Dijo señalando al beanie con la mano que tenía libre.

-Quédatelo. Se ve mejor en ti que en mi.- Dije.

-Lo ves. Eres un sol.- Dijo dándome un beso en la mejilla. El cual hizo que esta tome más color aún.- Por cierto, buenos días.

Estaba sonriendo. Era una buena noticia. Su mal humor se había ido. Me cambié y bajamos juntos a desayunar. En cuanto aparecimos en la cocina, Niall me quedó viendo con los brazos cruzados. Me llevé los brazos a la cabeza.

-¡Lo siento! ¡Me distraje intentando arreglar mi pelo! ¡Tuviste que preparar el desayuno solo!- Dije juntando mis manos en señal de disculpa.

-¿Te ayudó Louis a arreglarlo?- Preguntó Liam.

STRONG - Larry Stylinson ♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora