5 - Un hospital en casa
—¡Qué! ¿Quién?. Vic no podía sonar más alterada.
—No lo sé —admití.
—¿Qué hacemos? .—preguntó Diego un poco más sereno.
—Por ahora llevarlo a casa.
—Ayúdame. Le dije tratando de levantar a Adam.
Diego lo tomó por un brazo y yo por otro, no se como nos arreglamos para llegar a la salida, pero lo logramos.
—¿Y mi auto? —Preguntó Adam todavía mareado.
—Por allá.—Le dije —Diego. Puedes llevarlo? Porfavor.
—Claro.
Después de que Diego se lo llevara me giré hacia Alis que estaba bastante seria.
—Necesito que descubras quien lo drogó. —Le dije como si fuera una misión secreta.
—Pienso encargarme de eso al entrar. Quién lo haya hecho querrá morirse antes de que yo lo encuentre.
Asentí con la cabeza y me fui a sentar en la parte de atrás del auto donde Diego había dejado a Adam.
—¿A su casa? —preguntó
—Si. Puedo manejarlo
Diego asintió y nos pusimos en marcha.
Adam
¡Dios! El mareo aumentaba.
—Tengo náuseas.
—Tranquilo Adam. Falta poco -me dijo Meli con su voz tranquila.
—Estoy viendo algo borroso. ¿Debería pasar eso?
—Adam. ¡Mírame!
Pero no sirvió de mucho, la voz de Meli iba desapareciendo a la vez que mis ojos se cerraban.
—ADAM!... ADAM....AD.....
Amelia
Mierda
¿Qué pasó? —Pregunto Diego alarmado.
—Se ha desmayado. Cálmate... Es normal en estos casos cuando es la primera vez que una persona se droga. —¿Falta mucho?
—No. Es aquí a la derecha.
Mi alivio fue demasiado grande al ver que Diego se detenía en una casa al otro lado de la calle.
—¿Y sus llaves?
—Búscalas en sus bolsillos. Siempre las guarda ahí.
Y efectivamente, en el bolsillo izquierdo estaban sus llaves guardadas.
Nos bajamos del auto, Diego traía a Adam sujeto de un brazo
—¿Cual es la llave? Hay muchas
—Es la única que tiene una forma algo cuadrada.
La encontré y de nuevo. Efectivamente era esa. Abrí la puerta y entramos.
No tenía tiempo para ver la casa.
—Hay que cambiarlo.
Diego me llevo a su cuarto y me ayudó a ponerle lo que supongo que era su pijama. Lo sentamos unos segundos en la cama para tratar de despertarlo.
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A la Sombra del Jardín
Roman d'amour¿No has notado ese olor? Son... Flores. Pero no cualquiera. Estas son distintas. Su olor es suave...pero fuerte a la vez. Independiente. Amable. Para Adam su vida de colores adquirió nuevos tonos cuando la figura de esa chica entró por esas puertas...
