El primer receso del día llegó. Todo mundo hablaba sobre el partido de esta tarde. Inarizaki jugaría un partido amistoso con Karasuno una vez más.
Después de la derrota en el torneo de primavera, claro que el equipo tenía muy claro su objetivo; la revancha y llevarse la victoria esta vez.
—¿Iremos al partido?— preguntaba su amiga mientras la veía comer una pequeña porción de su almuerzo.
—No se... ni siquiera entiendo el voleibol.
—Oh, vamos~... no necesitas entenderlo para apoyar al equipo de la escuela.— dijo haciendo ademanes de festejo.
_____ hizo una pequeña mueca, terminando por asentir. Mucha gente, mucho ruido... ¿Como por qué iría? Bueno, siempre sigue las locas ideas de mejor amiga.
—¡Atsumu, Osamu! ¡Suerte en el partido de hoy!
—¡Eres nuestra esperanza, Miya!
—¡Confiamos en ambos!
Comenzaron los compañeros a alentar al par de gemelos cuando estos entraron al salón de clases. Osamu casi casi los ignoró, pero claro, Arsumu sonreía y agradecía el apoyo... entonces la miró.
Nunca han hablado más allá de aquella vez que les tocó limpiar juntos y eso que ella solo preguntó si ha había acabad.
Atsumu le dedicó una amable sonrisa y regreso a su asiento, siendo al instante rodeado por todas sus admiradoras del salón y de otros también.
La hora del partido llegó. Para sorpresa de ______, su amiga consiguió lugares hasta al frente de las gradas. Estaban en primera fila.
Era entretenido; la emoción se contagiaba entre todos los presentes... aunque la victoria no pudo ser asegurada.
Una vez más, perdían un set a dos.
La cara de Atsumu lo decía todo. Estaba destrozado, y de alguna manera, ver a su compañero el siempre alegre y de carácter inquebrantable así, hizo sentir a ______ un poco triste.
Quiso acercarse -por sugerencia de su amiga- a consolarla, pero claro, ahí se encontraban todas esas chicas bonitas que eran parte de sus fans. No había ni la mínima posibilidad de que le hiciera caso, así que decidió pasarlo por alto.
Los días siguientes no fueron diferentes. Atsumu continuaba viéndose deprimido.
______ sentía que debía hacer algo.
Al ser muy observadora, dado que era alguien que pasaba desapercibida, logró seguirlo hasta atrás de uno de los edificios de la escuela.
Fue sorprenderte que ninguna de sus fanáticas locas lo viera y lo siguiera también.
Se acercó despacio, sin hacer mucho ruido e hizo aparecer una pequeña bolsa de frituras frente a él. Atsumu al verlas, sonrió y la miró.
—Hey~... la chica del fondo~...— rió —¿Como me encontraste?
—Ah, le pregunté a esas chicas que te siguen siempre. Dicen que saben todo de ti, así que me dijeron dijeron estabas aquí.
—¿¡Qué!? Según yo nadie...— comenzó a reír y él entendió —Oh, así que te gusta el sarcasmo.— acompaño su risa y ella volvió a insistir con las frituras.
—Son para ti. Tomalas.
—Gracias...— susurró tomándolas y abriendolas para tomar una —Son mis favoritas, ¿sabes?— le invitó y entonces, su sonrisa volvió a desvanecerse.
—¿Crees que...?
—Jugaste muy...
Hablaron los dos al mismo tiempo y rieron.
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Haikyuu - One Shots
FanfictionHaikyuu de por sin ya es un anime grandioso, pero ahora, imagínate leer situaciones en las que tú y uno de los tantos personajes sean los protagonistas. Pequeñas historias tanto románticas, como tristes y de desamor, te podrán ayudar a sentir a esto...
